El Madrid ni sabe ni contesta

El Madrid, 28 veces ganador de Liga de 46 ediciones, m¨¢s de la mitad, no estar¨¢ en la fase final del campeonato por primera vez en su historia. Ha quedado eliminado dando una imagen lastimosa. Pero a nadie parece quitarle el sue?o el que la secci¨®n de gigantes del club ande a ras del subsuelo. Florentino P¨¦rez, el presidente del Madrid, se remite a Jorge Valdano, el director deportivo, cuando se le habla de la secci¨®n de baloncesto de la entidad. Valdano emplaza a un futuro informe de Lolo Sainz, el hombre fuerte de la directiva en el ¨¢rea de la canasta. Sainz se escuda en que a¨²n est¨¢ caliente y pide 24 horas m¨¢s para reflexionar sobre el "desastr¨®n" de la secci¨®n. Javier Imbroda, el t¨¦cnico, acusa veladamente a los jugadores: "S¨®lo yo s¨¦ lo que he sufrido y padecido en el vestuario". Y los jugadores apagan los m¨®viles, dejan recado de que no est¨¢n aunque est¨¦n o echan balones fuera acusando a la prensa, como Herreros hace unas semanas, de no tener "ni puta idea".

"Ya veremos lo que se hace con Imbroda", dice Valdano, dejando en el aire la continuidad de su t¨¦cnico. "Ni me planteo dimitir", dice el entrenador, que en un alarde de ret¨®rica del sentimiento asegura: "Mi alma no descansar¨¢ hasta poner al equipo en su sitio". Lolo Sainz, que est¨¢ preparando un memorial del caos, un informe de la infame temporada madridista y sus posibles soluciones, es muy posible que no permita al alma de Imbroda encontrar descanso y la castigue a vagar por otros banquillos. Pero no se sabe.

"El club est¨¢ dispuesto a hacer un esfuerzo para cubrir las necesidades de la secci¨®n, que al parecer son muchas", coment¨® ayer con cierta sorna el director deportivo Valdano. Esas necesidades, efectivamente muchas, las ha listado Lolo Sainz.

Por su parte, Javier Imbroda, que el pasado s¨¢bado mir¨® a los ojos por ¨²ltima vez a m¨¢s de la mitad de los jugadores del Madrid, escogi¨® la acusaci¨®n velada a la plantilla -"podr¨ªa decir muchas cosas"- y su habitual referencia a la falta de tiempo: "Llegu¨¦ en un momento dif¨ªcil, complicado y sin tiempo. He pagado esa entrada pero ten¨ªa la esperanza de recuperar el terreno perdido". Imbroda fue seleccionador nacional hasta el mes de julio. Entonces no argument¨® ning¨²n problema de incompatibilidad y planific¨® la temporada blanca fichando ¨¦l a los jugadores, por ejemplo, a Mumbr¨², del Joventut, a quien conoc¨ªa de la selecci¨®n. ?l decidi¨® que Tarlac, hoy expedientado por el club y con fecha de caducidad en el dorsal, se quedara. Tambi¨¦n fue cosa suya el refuerzo de Mulaomerovic, un fiasco, o el no contar con Lampe, cedido al Complutense de la ULEB y seguido con insistencia por equipos de la NBA.

Ayer Imbroda confesaba que hab¨ªa pasado una noche "muy larga" y describ¨ªa la ca¨ªda de su equipo como "un final lamentable y cruel".