Straw y Powell cuestionaron los informes sobre el arsenal ir aqu¨ª
Conversaci¨®n secreta entre los dos ministros de Exteriores
El ministro brit¨¢nico de Exteriores, Jack Straw, y su hom¨®logo estadounidense, Colin Powell, expresaron dudas sobre la validez de los informes secretos de sus respectivos Gobiernos sobre las armas de destrucci¨®n masiva de Irak, seg¨²n inform¨® ayer The Guardian. De acuerdo con el diario brit¨¢nico, el escepticismo de ambos sali¨® a relucir en el transcurso de un encuentro privado en un hotel de Nueva York en v¨ªsperas de la reuni¨®n del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, el 5 de febrero.
El diario basa estas ¨²ltimas alegaciones en una transcripci¨®n del encuentro entre Straw y Powell a la que ha tenido acceso a trav¨¦s de una "fuente diplom¨¢tica". En el transcurso de la conversaci¨®n, que Londres neg¨® incluso que hubiera tenido lugar, el secretario de Estado estadounidense expres¨® a Straw su "inquietud" por la debilidad de los informes oficiales de ambos pa¨ªses. En su opini¨®n, seg¨²n se?ala The Guardian, los documentos de Londres y Washington se sustentaban en "pruebas circunstanciales" favorables a ambos Gobiernos en mayor grado que en datos en bruto recopilados por los servicios de espionaje.
"La mayor parte de los informes secretos eran suposiciones y valoraciones no apoyadas por hechos concretos u otras fuentes", escribi¨® el diario en su edici¨®n de ayer. De acuerdo con su informaci¨®n, ambos dignatarios dudaron que fuera posible probar las declaraciones de sus respectivos jefes de Gobierno con las que justificaron la invasi¨®n de Irak. "Espero", dijo supuestamente Powell, que cuando los hechos salgan a la luz "no exploten en la cara".
Las dudas sobre la validez de las investigaciones del espionaje del Reino Unido y Estados Unidos crecen a medida que fracasa la localizaci¨®n en Irak de armas biol¨®gicas y qu¨ªmicas. El equipo de b¨²squeda ser¨¢ reforzado, seg¨²n anunci¨® d¨ªas atr¨¢s la Administraci¨®n de Washington, pero esta ¨²ltima estrategia no ha frenado la guerra de guerrillas entre pol¨ªticos y agentes secretos.
[Pese a ello, el presidente, George W. Bush, dijo ayer durante su vista a Polonia que el hallazgo de dos supuestos laboratorios m¨®viles era ya una prueba de sus existencia, informa Reuters].
Esta misma semana, un alto responsable de los servicios de informaci¨®n brit¨¢nicos, cuya identidad no se desvel¨®, inform¨® a la BBC de que el Gobierno de Tony Blair exigi¨® que se exagerara la potencial amenaza de Sadam Husein, en concreto la disponibilidad de Irak para preparar un ataque biol¨®gico y qu¨ªmico en un plazo de "45 minutos". Blair neg¨® estas alusiones en su visita a Polonia el pasado viernes: "Es completamente absurdo pensar que autorizamos o demandamos a nuestras agencias de inteligencia que inventaran alguna prueba".
The Guardian afirma que copias de la transcripci¨®n del supuesto encuentro en el hotel Waldorf de Nueva York circulan en sectores diplom¨¢ticos de la OTAN. "No se ha desvelado las circunstancias en que se efectu¨® la transcripci¨®n", admite. Sin identificar al autor de la filtraci¨®n a la prensa de la conversaci¨®n privada entre Straw y Powell, el diario se?ala que procede de "fuentes aliadas que apoyaron entonces el objetivo b¨¦lico de EE UU en Irak y ahora creen que les han mentido".
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