El esplendor de Tiziano deslumbra en el Prado

Tiziano, el mito de Venecia, el pintor que revolucion¨® el valor expresivo del color, muri¨® en 1576 a una edad casi centenaria. Maestro de Vel¨¢zquez, Rubens o Delacroix, su trayectoria es una de las m¨¢s apasionantes del arte occidental. A partir del pr¨®ximo martes, el Museo del Prado de Madrid le dedica el espacio de su larga y luminosa galer¨ªa central. All¨ª se exponen 65 obras (30 jam¨¢s vistas en Espa?a), desde sus pinturas iniciales -fechadas entre 1508 y 1510- a sus ¨²ltimos trabajos. La exposici¨®n de Madrid, la m¨¢s completa desde la que se le dedic¨® en 1935 en Venecia, fue ayer calificada por el director del Prado, Miguel Zugaza, como un hito sin precedentes. "S¨®lo puedo sentir emoci¨®n ante el genio, el lujo, la luz y el color de Tiziano", afirm¨®.

"Hemos tra¨ªdo las joyas m¨¢s excepcionales. De N¨¢poles, de Venecia, de Florencia..."

"Podemos contemplar algunas de las obras m¨¢s bellas de la historia de la pintura"

Los grandes ep¨ªtetos suelen ir unidos a las exposiciones del Museo del Prado, pero ayer, ante medio centenar de periodistas, cuando el jefe del Departamento de Pintura Italiana del Renacimiento del museo, Miguel Falomir, pidi¨® que se abrieran las puertas de la galer¨ªa central para contemplar, al fondo, Las meninas ("ah¨ª lo tienen: Tiziano fue su fundamento") la emoci¨®n y la admiraci¨®n se abrieron, imparables, paso. "El Prado no pod¨ªa hacer una exposici¨®n cualquiera con Tiziano", a?ad¨ªa Falomir, comisario de una exposici¨®n calificada de "¨²nica", "excepcional", "hist¨®rica".

Tiziano ser¨¢ inaugurada el pr¨®ximo lunes por el pr¨ªncipe Felipe y y el vicepresidente del Gobierno de Italia, Gianfranco Fini. Permanecer¨¢ abierta al p¨²blico desde el martes d¨ªa 10 al 7 de septiembre. Realizada conjuntamente con la National Gallery de Londres, la exposici¨®n de Madrid ampl¨ªa notablemente lo visto en la capital brit¨¢nica hasta hace pocas semanas.

De las 65 obras expuestas, distribuidas en cinco ¨¢mbitos, 30 proceden del extranjero y jam¨¢s han sido exhibidas en Espa?a. Entre ellas, La Venus de Urbino (de la Galer¨ªa de los Uffizi de Florencia); La Schiavona, Sagrada familia con pastor, Noli me tangere, La Virgen con Ni?o, Santa Catalina y San Juan Bautista, Retrato votivo de la familia Vendramin (todas de la National Gallery); Hombre del guante (del Louvre); Salom¨¦ (de la Galer¨ªa Doria Pamphilj de Roma); Tarquino y Lucrecia (del Fitzwilliam Museum de Cambridge); El martirio de Marsias (del Palacio Arzobispal de Kromeriz) o El fest¨ªn de los dioses, de Giovanni Bellini, maestro de Tiziano, procedente de la National Gallery of Art de Washington.

De las m¨¢s de quinientas obras de Tiziano que se conocen, 54 pertenecen a alguna colecci¨®n espa?ola. Treinta y nueve son del Museo del Prado, 11 de Patrimonio Nacional (depositadas en El Escorial) y cuatro del Museo Thyssen-Bornemisza.

"Hemos tra¨ªdo las joyas m¨¢s excepcionales de Tiziano. De N¨¢poles, de Florencia, de Venecia... Quer¨ªamos celebrar a un pintor que fue revolucionario para la pintura moderna, al principal vanguardista del siglo XVI", manifest¨® ayer el director del Prado, Miguel Zugaza. A su lado, Gabriele Finaldi, director adjunto de Conservaci¨®n e Investigaci¨®n del museo, a?adi¨®: "Las mujeres son tan bellas y los hombres tan guapos que hoy s¨®lo se puede sentir gozo paseando por estas salas iluminadas con luz natural".

De los or¨ªgenes al ¨²ltimo Tiziano, el Prado propone un recorrido en el que se contempla la evoluci¨®n t¨¦cnica y narrativa del pintor veneciano. De la maduraci¨®n de su estilo a la expresividad e intensidad dram¨¢tica de sus ¨²ltimos a?os. De sus famosos retratos a sus er¨®ticas escenas mitol¨®gicas. "El recorrido nos permite tener una idea clara del desarrollo de su carrera, ver c¨®mo fue un pintor cada vez m¨¢s sabio y con un mayor conocimiento de su oficio", explica Gabriele Finaldi.

Tiziano pint¨® durante m¨¢s de setenta a?os, viendo y aprendiendo todo. As¨ª, el Tiziano joven contempla la belleza como un placer (Bacanal de los Andrios) para luego, a?os m¨¢s tarde, darse cuenta de sus peligros (Diana y Acte¨®n) hasta, finalmente, padecer sus castigos (Apolo y Marsias).

"Estamos ante un pintor que domin¨® todos los g¨¦neros", afirma Miguel Falomir, "ante una obra que merece mil lecturas distintas. Decir Tiziano es decir uno de los grandes pintores de la pintura occidental, pero decir Tiziano en Espa?a es algo m¨¢s, ya que su influencia ha sido decisiva en la pintura espa?ola, y para el Prado es algo muy suyo". "Esta exposici¨®n", a?adi¨® Falomir, "es un verdadero fest¨ªn para los sentidos ya que podemos contemplar algunas de las obras m¨¢s bellas de la historia de la pintura".

Entre las piezas ¨²nicas que ahora se exponen en Madrid destacan La Venus de Urbino, de 1538, en la que se contempla la contribuci¨®n de Tiziano al desnudo femenino tumbado, determinante en la historia de la pintura. "No se pueden entender ni la Venus del espejo de Vel¨¢zquez ni La maja desnuda de Goya sin este cuadro, que fue un referente absoluto", se?ala Falomir. Tiziano transgredi¨® su ¨¦poca pintando a una mujer que, sin contexto narrativo, mira directamente a los ojos del espectador. Una pintura controvertida ("la que m¨¢s literatura ha generado") en la que algunos han visto una mera imagen er¨®tica y otros una alegor¨ªa matrimonial (las rosas en su mano y el perro a sus pies son met¨¢foras de amor constante) encargado al pintor por Guidobaldo II della Rovere, duque de Camerino y de Urbino.

Se sabe que Tiziano muri¨® en Venecia en 1576, pero la fecha de su nacimiento (¨¦l mismo contribuy¨® a ocultarla para fomentar el mito de su longevidad) sigue siendo hoy un misterio. Un autorretrato, fechado en 1562, nos revela a un anciano de extraodinaria belleza. Un autorretrato que el pintor conserv¨® a su lado y que luego fue propiedad de Rubens.