Mafia aeron¨¢utica en Ucrania
La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n denunci¨® la presunta connivencia de las autoridades de Kiev con los piratas del aire y el nulo control
La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n denunci¨® hace cinco a?os el deficiente control de la Rep¨²blica de Ucrania sobre sus propios aviones y reclam¨® sin ¨¦xito el embargo de un Ilyushin IL-76, interceptado en 1997 en el aeropuerto de Foronda, en Vitoria, cuando transportaba varias toneladas de tabaco de contrabando. El aparato, id¨¦ntico al que fotografiaron hace d¨ªas soldados espa?oles que viajaban a Basora (Irak), era propiedad del Ministerio de Defensa ucranio y dispon¨ªa de un permiso para comerciar con armas, municiones y explosivos. Sus ocho tripulantes, militares en excedencia, fueron condenados por la Audiencia Nacional y acabaron en prisi¨®n.
Federico Trillo-Figueroa, ministro de Defensa, ha defendido en el Congreso la calidad de la aviaci¨®n ucrania, sus controles y la seriedad de las autoridades de Kiev que emitieron las certificaciones de aeronavegabilidad del Yakolev 42 en el que murieron 62 militares espa?oles. La inspecci¨®n de los aparatos y tripulaciones corresponde a funcionarios ucranios y fuentes de la OTAN confiesan que est¨¢n obligados a confiar en ese pa¨ªs.
El aparato, intervenido en Vitoria, ten¨ªa permiso para trasladar armas y explosivos
Un Ilyushin 76 del Ministerio de Defensa ucranio se dedicaba al contrabando de tabaco
?Qu¨¦ validez tienen esas certificaciones e inspecciones en un pa¨ªs en el que aparatos militares de la propia rep¨²blica fueron puestos a disposici¨®n de la mafia y hay un mont¨®n de compa?¨ªas piratas?, se pregunta un directivo espa?ol de Aviaci¨®n Civil.
La historia del Ilyushin IL-76 UR-76721, cedido por el Gobierno ucranio por una cantidad "rid¨ªcula" a una mafia de contrabandistas, pone en entredicho el rigor de los controles aeron¨¢uticos en esta rep¨²blica ex sovi¨¦tica, a la que la ONG Transparency Internacional situ¨® en 2002 entre los 12 pa¨ªses m¨¢s corruptos del planeta.
El 12 de abril de 1997, los agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) de Vizcaya aguardaban en la pista del aeropuerto de Foronda la llegada del Ilyushin IL-76, un avi¨®n sovi¨¦tico que levant¨® las sospechas de un avispado aduanero de Sal¨®nica (Grecia) que se fij¨® en este enorme aparato y dio el chivatazo a sus colegas espa?oles. El avi¨®n trazaba desde hacia meses una extra?a ruta: cargaba tabaco en el aeropuerto de Ostende (B¨¦lgica), volaba a Belgrado (Yugoslavia), hac¨ªa escala en Sal¨®nica o Atenas y reanudaba su vuelo con falsa direcci¨®n a T¨¢nger (Marruecos) y escala en Vitoria. En realidad, la ciudad vasca era su ¨²ltimo destino.
El aparato estaba arrendado por el Ministerio de Defensa ucranio a la compa?¨ªa civil de ese pa¨ªs Blue Sky Line, una sociedad pantalla tras la que se ocultaba una mafia de contrabandistas. El negocio era redondo: transportaban toneladas de tabaco rubio sin pagar ni un c¨¦ntimo en impuestos. Cargaban el tabaco en Holanda y aseguraban a los aduaneros belgas que la mercanc¨ªa iba destinada a Yugoslavia. As¨ª no pagaban el impuesto comunitario. En Atenas, dec¨ªan que la carga iba a Marruecos y comunicaban que har¨ªan una escala t¨¦cnica en Vitoria, por lo que tampoco se les reclamaban aranceles, ya que se trataba de mercanc¨ªa extracomunitaria en tr¨¢nsito.
A las 21.20 del 12 de abril de 1997, el comandante Mourzakhanov y Oleg Koutnezsov, segundo piloto, descendieron del Ilyushin IL-76 y se dirigieron a pie hasta las oficinas del aeropuerto de Foronda. Era su und¨¦cimo viaje a Vitoria en los ¨²ltimos tres meses y, al igual que otras veces, identificaron los 96 bultos como equipos electr¨®nicos con destino a la factor¨ªa Fasa-Renault de Valladolid.
Los paneles de 30.587 kilos se cargaron a pie del avi¨®n en dos camiones que fueron interceptados a las afueras del aeropuerto. Los funcionarios del SVA descubrieron 887.992 cajetillas de Winston y Marlboro. Los ocho tripulantes del avi¨®n sovi¨¦tico intentaron huir y el aparato s¨®lo se detuvo cuando varios veh¨ªculos le cerraron el paso en la pista.
Todos los tripulantes fueron condenados a penas de entre dos y tres a?os de prisi¨®n por delitos de contrabando y uso de documentos oficiales falsos. BSL Airlines, que presid¨ªa Alexander Sanin, fue condenada al pago de una indemnizaci¨®n de 13 millones de euros al Estado espa?ol y Ucrania fue absuelta de responsabilidad civil.
En el recurso presentado por la fiscal¨ªa, ¨¦sta pidi¨® el embargo del avi¨®n y asegur¨® que Ucrania incumpli¨® "palmariamente con las m¨ªnimas exigencias que derivar¨ªan de la buena fe, tanto en su condici¨®n de arrendador como de autoridad p¨²blica. Sus obligaciones para con la aeronave Ilyushin fueron manifiestamente desatendidas y se incumplieron los convenios internacionales". La acusaci¨®n destac¨® que el avi¨®n militar fue apartado de su uso p¨²blico y entregado para su explotaci¨®n comercial "en condiciones incompatibles con la buena fe contractual, porque el precio del arrendamiento era rid¨ªculo en relaci¨®n al margen del beneficio previsible". Adem¨¢s, destac¨® que, pese al elevado valor econ¨®mico de la nave, no se exigi¨® a la sociedad BSL fianza o garant¨ªa alguna antes de la entrega de un aparato que ten¨ªa libertad para volar a cualquier parte del mundo. Tampoco se estableci¨® control sobre la cesi¨®n a terceros de la aeronave, "lo que hubiera permitido impedir a la BSL explotarla mediante la fletadora Mensus Trade".
Seg¨²n la fiscal¨ªa, la compa?¨ªa BSL Airlines fue constituida poco tiempo antes de que se cometieran los hechos delictivos por "unos pocos socios ucranios, pero carece de infraestructura operativa, capital social y patrimonio como para justificar que por un precio irrisorio el Estado le ceda en arrendamiento, sin control alguno, una flota de aviones del Ministerio de Defensa, previa y oportunamente desmilitarizados".
Para el fiscal, tanto el contrato como el flete fueron "negocios jur¨ªdicos simulados que pretenden crear una apariencia ficticia de desvinculaci¨®n entre el propietario del avi¨®n, la Rep¨²blica de Ucrania, y los hechos delictivos, cometidos 11 veces consecutivas con el mismo".
Para la acusaci¨®n, el hecho de que el Ilyushin y sus tripulantes portaran documentaci¨®n falsa (manifiestos de carga, albaranes, declaraciones, facturas de mercanc¨ªa), que Ucrania ten¨ªa la obligaci¨®n de controlar, indica que un "m¨ªnimo control por parte del Gobierno hubiera permitido detectar el fraude". Reproch¨® que tampoco se controlara el diario del avi¨®n y destac¨® que gracias a las autoridades de ese pa¨ªs el aparato ten¨ªa una autorizaci¨®n especial para transportar armas, municiones y explosivos. "Quiz¨¢s tabaco es la mercanc¨ªa m¨¢s inocente que el avi¨®n ucranio pod¨ªa introducir de contrabando en el Pa¨ªs Vasco", se?al¨® la fiscal¨ªa.
La Audiencia Nacional rechaz¨® el recurso porque la sentencia no declar¨® la responsabilidad penal de ning¨²n funcionario, aunque reconoci¨® la existencia de "m¨¢s que sospechas e indicios de tal responsabilidad". "La negligencia que el Estado propietario de la aeronave haya podido cometer en cuanto al control que debi¨® observar no puede considerarse equivalente a la participaci¨®n en el delito", se?al¨® el fallo.
Cuando cumplieron su condena, los ex militares ucranios fueron expulsados de Espa?a. "?Qu¨¦ controles puede haber en un pa¨ªs d¨®nde ocurri¨® esto y en el que las compa?¨ªas tiran los precios? No creo en esos controles", dice esc¨¦ptico un t¨¦cnico de Iberia.
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