Pecharrom¨¢n se lleva la Bicicleta Vasca, en la que Beloki gan¨® la etapa final
El corredor del ONCE se conforma con ganar la ¨²ltima etapa de la Bicicleta Vasca, ante la supremac¨ªa de Pecharrom¨¢n
Joseba Beloki se marcha feliz al Tour de Francia, con una victoria en la ¨²ltima etapa de la Bicicleta Vasca. Nada mejor que subir al caj¨®n para subir el ¨¢nimo. A falta de un mes para que comience la Grande Boucle, el corredor del ONCE-Eroski asegura que llega en mejor forma que el a?o pasado, cuando termin¨® segundo, s¨®lo por detr¨¢s de Lance Armstrong.
M¨¢s le vale que se confirme en julio su buen estado, porque esta vez estar¨¢ algo m¨¢s solo. No tendr¨¢ cubri¨¦ndole las espaldas a Igor Gonz¨¢lez de Galdeano, a quien las autoridades francesas impiden competir por un problema m¨¦dico de alergia que all¨ª consideran dopaje y que, para colmo, ayer se cay¨® en la Vuelta a Alemania y se lesion¨® en la clav¨ªcula.
Beloki gan¨® la ¨²ltima etapa, s¨®lo eso. Y adem¨¢s puede dar las gracias. ?l se termin¨® conformando porque, aunque el primer d¨ªa part¨ªa como favorito para ganar la general, se ha encontrado con un chaval que ha surgido de la nada y ha robado protagonismo a todos los otros grandes. Al final, bastante tuvieron Beloki y Casagrande con acompa?arle en el podio.
Jos¨¦ Antonio Pecharrom¨¢n, un joven que el lunes 16 cumplir¨¢ 25 a?os, procedente de la floreciente cantera manchega (con Sevilla y el malogrado Sanroma), ha dominado la Bicicleta Vasca casi de principio a fin. Ayer, en la quinta jornada, no quiso abusar, pero lleg¨® a Arrate con una sensaci¨®n de absoluta autoridad. No s¨®lo ¨¦l; tambi¨¦n su equipo, el Paternina, nada acostumbrado a conducir el pelot¨®n, ha demostrado un dominio total de la situaci¨®n. Desde luego, Pecharrom¨¢n debe
parte del m¨¦rito a sus compa?eros y, sobre todo, a Garrido, el ¨²ltimo en abandonarle en carrera.
El l¨ªder lleg¨® a la ¨²ltima etapa con una ventaja m¨¢s que suficiente, de m¨¢s de un minuto. Como es costumbre en la Bicicleta Vasca, no tuvo problemas para retener el maillot azul, a pesar de que el libro de ruta ten¨ªa dibujados ocho puertos. Fue una jornada movida, con escapadas largas. Etxebarria, Odriozola, Lavarinhas, Laiseka,... Muchos lo intentaron.
David Etxeberria fue quien m¨¢s cerca estuvo de llevarse el premio. Permaneci¨® fugado casi todo el d¨ªa, y se rindi¨® a apenas dos kil¨®metros de la meta.
Para entonces, la pelea por la general estaba ya m¨¢s que liquidada. Nadie discuti¨® la aplastante supremac¨ªa de Pecharrom¨¢n. S¨®lo quedaba por rifarse el triunfo de la etapa, y all¨ª el ciclista manchego estaba acompa?ado por los otros tres corredores m¨¢s fuertes de esta semana, Beloki, Casagrande y Haimar Zubeldia.
Zubeldia intent¨® ara?ar el segundo que le distanciaba del podio, pero Casagrande tiene demasiadas carreras a sus espaldas, y es demasiado r¨¢pido. Beloki, rendido a la evidencia de la superioridad de Pecharrom¨¢n, no quiso malgastar fuerzas en in¨²tiles intentos de desbancarle del primer lugar. Concentr¨® todos sus esfuerzos en procurarse la victoria de etapa. Conoce bien la subida a Arrate (gan¨® el a?o pasado), y sabe que quien llega mejor colocado a la ¨²ltima curva tiene el triunfo asegurado. Y se lo asegur¨®.
Un pasado de espinas
Hay una pregunta que todos se hacen: ?D¨®nde se ha escondido Pecharrom¨¢n los ¨²ltimos tres a?os y medio, desde que es profesional? ?l tiene la respuesta. "Como juvenil y aficionado tuve una progresi¨®n estupenda, pero en el ¨²ltimo a?o como amateur me lesion¨¦ en el pubis. Aun as¨ª, pas¨¦ a profesionales. [Javier] M¨ªnguez se hab¨ªa fijado en m¨ª para el Vitalicio, pero me fich¨® el Costa de Almer¨ªa", dice.
Pecharrom¨¢n se oper¨®, pero con un mal resultado. Pas¨® por segunda vez por el quir¨®fano. En 2001, pudo entrenarse en mejores condiciones, pero el a?o pasado de nuevo su carrera se trunc¨® con una ca¨ªda en la Volta a Catalu?a, que le mantuvo una semana hospitalizado. Este a?o tampoco empez¨® bien. En febrero, su padre sufri¨® un derrame cerebral y acab¨® muriendo hace dos meses. En ese tiempo, apenas se ha entrenado. Y, con todo, ha llegado a la Bicicleta Vasca como una flecha.
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