Las s¨®rdidas huellas de un crimen
'Amantes', de Vicente Aranda, en la colecci¨®n de cine espa?ol de EL PA?S
La historia de un pa¨ªs es tambi¨¦n la historia de sus cr¨ªmenes. Con esta premisa, el productor Pedro Costa, interesado desde sus tiempos de periodista en investigar sucesos criminales ocurridos en Espa?a, realiz¨® para televisi¨®n la serie La huella del crimen, cuyo ¨¦xito le impuls¨® a una segunda tanda de episodios. Vicente Aranda, que hab¨ªa dirigido uno de los anteriores, El crimen del capit¨¢n S¨¢nchez, se encarg¨® de adaptar en esta ocasi¨®n el caso de "los amantes de Tetu¨¢n de las Victorias", en alusi¨®n al barrio madrile?o en que se origin¨® el suceso aunque su tr¨¢gico desenlace tuviera lugar en Burgos: la historia de "dos mujeres y un hombre inmersos en una historia pasional que acaba en sangre", en definici¨®n del director.
"Es una pasional y desmedida historia de amor hasta los l¨ªmites de la muerte"
La importancia que el proyecto iba adquiriendo durante su preparaci¨®n aconsej¨® transformarlo en largometraje para el cine, desgaj¨¢ndolo de la serie televisiva. Surgi¨® as¨ª Amantes, Goya a la mejor pel¨ªcula en 1991, Goya al mejor director, y premio de interpretaci¨®n para Victoria Abril en el festival de Berl¨ªn de aquel mismo a?o. Amantes obtuvo tambi¨¦n los premios Fotogramas y Ondas, as¨ª como el de mejor director en el festival de Chicago, y el de mejor pel¨ªcula en el Mysfest, entre otros galardones...
La historia gira en torno a tres personajes perfectamente corrientes: Paco, un campesino reci¨¦n licenciado de la mili (Jorge Sanz), que entabla relaciones sexuales con su patrona (Victoria Abril), una viuda experta en amores que deslumbra al muchacho, mientras ¨¦l sigue siendo novio de la inocente asistenta de su comandante con la que piensa casarse (Maribel Verd¨²). Los tres, seg¨²n Jos¨¦ Luis Guarner, "se ven arrastrados por la fuerza inexorable de una pasi¨®n que no comprenden, pero que de alguna manera les trasciende... Bastan unas pinceladas para situar el escenario y el ambiente; lo esencial ocurre en interiores cerrados, y en el exterior percibimos la omnipresencia subliminal pero insistente de Ej¨¦rcito e Iglesia, esas dos temibles instituciones patrias". Esta observaci¨®n fue secundada por Francisco Moreno en Rese?a: "Los personajes son v¨ªctimas tanto de sus instintos como del tiempo hist¨®rico, moralmente mezquino, que les ha tocado vivir".
"El amor, o es pasi¨®n o es nada", coment¨® Vicente Aranda al referirse a las secuencias de sexo que tanto hab¨ªan escandalizado a cierto p¨²blico neoyorquino hasta el punto de pedir su retirada de la cartelera. Tambi¨¦n durante el festival de Berl¨ªn algunos peri¨®dicos alemanes "vieron en esta pel¨ªcula una obra inmoral y cercana a la pornograf¨ªa", seg¨²n coment¨® Fern¨¢ndez-Santos en este peri¨®dico: "Amantes tiene, en efecto, secuencias en las que hay explicitud er¨®tica, quiz¨¢s innecesaria, pero en cualquier caso muy el¨ªptica, fugaz, y que no crea ning¨²n escoramiento hacia la pornograf¨ªa. Pero incluso si as¨ª fuera, esto no le restar¨ªa al filme ninguno de sus m¨¦ritos". Por su parte, Juan M. Company escribi¨®: "La pel¨ªcula recrea un asfixiante espacio carnal donde rostros y cuerpos entretejen unas escenas er¨®ticas cuya escabrosa intensidad no tiene equivalencia alguna en el actual panorama cinematogr¨¢fico espa?ol".
Vicente Aranda se explic¨® con el periodista Diego Mu?oz: "He querido hacer una historia de amor, s¨®lo eso. Pero no me interesa lo que llaman amor en sentido convencional, que en realidad es una huida del amor. Esta pel¨ªcula quiere dar la cara al amor". Y respecto a las secuencias er¨®ticas, puntualizaba: "Me pareci¨® que lo original de este tr¨ªo era que el elemento disputado fuera el chico. No hab¨ªa, pues, justificaci¨®n para que las mujeres mostraran demasiado su cuerpo. Lo m¨¢s normal es que fuera el deseado protagonista quien ense?ara el suyo. Y a Jorge Sanz no le import¨® lo m¨¢s m¨ªnimo. Incluso hizo propuestas para este tipo de escenas, como la de introducir un pa?uelo en el juego amoroso", momento que desconcert¨® a alg¨²n periodista alem¨¢n, quien, seg¨²n coment¨® Rafa Fern¨¢ndez en El Sol, hab¨ªa escrito: "El resultado es una mezcla entre cine europeo de autor y un softporno de la peor cala?a. Es intolerable... Ni siquiera Victoria Abril supo contarnos c¨®mo hay que usar el pa?uelo en una situaci¨®n er¨®tica para hacer eso que ella viene a llamar el carrete".
La cr¨ªtica espa?ola no fue pusil¨¢nime como la alemana, m¨¢s bien al contrario. "Amantes es una pasional y desmedida historia de amor y de muerte. 0 del amor hasta los l¨ªmites de la muerte, all¨ª donde el sentimiento experimenta una mutaci¨®n y se convierte en una pasi¨®n destructora y sin barreras de contenci¨®n, capaz de llevarse por delante cualquier mandato moral: es decir, en el l¨ªmite de transgresi¨®n. La serie de escenas donde esta mutaci¨®n tiene lugar, bajo una nevada, est¨¢ dentro de lo mejor que se ha visto en el cine espa?ol reciente", escribi¨® Fern¨¢ndez-Santos. La media hora final de la pel¨ªcula, que Jos¨¦ Luis Guarner calific¨® de "antol¨®gica", es un momento "magistral, inolvidable"... "Una secuencia inquietante y probablemente imborrable en la memoria", ya que, seg¨²n defini¨® el cr¨ªtico, "Vicente Aranda filma los asesinatos como si fueran escenas de amor, y las escenas de amor como si fueran asesinatos". Amantes es producto del "vigoroso talento de Aranda, aliado aqu¨ª con la inspiraci¨®n de excelentes actores (los ya citados protagonistas Sanz, Abril y Verd¨², y los secundarios Enrique Cerro y Mabel Esca?o...), los guionistas ?lvaro del Amo y Carlos P¨¦rez Merinero en colaboraci¨®n con el propio Aranda, y el fot¨®grafo Jos¨¦ Luis Alcaine...".
Babelia
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