Armas de destrucci¨®n masiva
Se?or Aznar, ?durante cu¨¢nto tiempo cree usted que puede pretender enga?ar a los ciudadanos de este pa¨ªs? Ahora resulta que usted no dijo nunca que en Irak hab¨ªa armas de destrucci¨®n masiva. Le recuerdo que hay constancia de sus palabras en el Parlamento. Ahora es el momento de coger el metro y tomar medidas, unas medidas que pasan por admitir su error y pedir disculpas. Si lo hace, estoy seguro de que la ciudadan¨ªa se lo agradecer¨¢ profundamente.
En el caso de que usted opte por aquello de "sostenella y no enmendalla", mucho me temo que, en un corto espacio de tiempo, las ca?as que usted alz¨® se vuelvan lanzas que hurguen en lo m¨¢s profundo de las conciencias de este pa¨ªs. Sinceramente, se?or Aznar, espero que su conciencia le haga admitir su error.
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