La viuda y las dos hijas del abogado Castillo reconocen al acusado Arcan

La viuda de Arturo Castillo y sus dos hijas testificaron en el segundo d¨ªa del juicio que se sigue en la Secci¨®n S¨¦ptima de la Audiencia Provincial de Madrid, en el que se juzga al moldavo Pietro Arcan como autor del asesinato del abogado, ocurrido el 20 de junio de 2001 (ayer se cumplieron dos a?os). La presencia de los familiares de Castillo, que tambi¨¦n fueron v¨ªctimas de la violencia del acusado en el chal¨¦ familiar de Pozuelo de Alarc¨®n, estuvo rodeada de grandes medidas de seguridad para preservar su intimidad. Las tres reconocieron a Arcan como autor de los hechos.

Las tres v¨ªctimas que sobrevivieron al crimen de Pozuelo no cambiaron ni un ¨¢pice su declaraci¨®n y ayer se mantuvieron firmes en su versi¨®n de los hechos, que fue la misma que ofrecieron ante la polic¨ªa y ante el juez instructor poco despu¨¦s de ocurrir el asalto a su domicilio, en junio de 2001. Las tres mujeres tambi¨¦n reconocieron a Arcan como autor de los hechos.

Las testigos comparecieron ayer, segundo d¨ªa del juicio, a puerta cerrada, sin la presencia de p¨²blico ni de periodistas. Adem¨¢s, lo hicieron protegidas por un biombo que les imped¨ªa ser vistas por los cuatro encausados. Accedieron a la Audiencia Provincial a trav¨¦s del garaje del edificio en un monovolumen granate con cristales oscuros. En todo momento hubo fuertes medidas de seguridad para que la viuda de Castillo y sus dos hijas no fueran captadas por las c¨¢maras de televisi¨®n y por los fot¨®grafos.

Tanto la viuda como las dos hijas del letrado asesinado tambi¨¦n fueron agredidas en el asalto a su casa de Pozuelo. Las declaraciones de las v¨ªctimas fueron emocionantes, pero firmes -seg¨²n afirmaron varios de los all¨ª presentes-, al relatar lo que ocurri¨® la noche de autos y cuando procedieron a realizar la descripci¨®n del individuo que asalt¨® el chal¨¦ donde resid¨ªa la familia Castillo, en la calle de Arquitectura.

En el juicio, adem¨¢s de a Arcan, se est¨¢ enjuiciando tambi¨¦n a sus tres presuntos colaboradores en el crimen, Julio Rodr¨ªguez Barrios, Manuel Espa?a y Daniel Popa.

Desde las 10.30, y por espacio de algo menos de dos horas, las v¨ªctimas rememoraron todo lo ocurri¨® la madrugada del 20 de junio de hace dos a?os. Mientras la viuda y sus hijas relataban lo sucedido, seg¨²n los abogados presentes en la sala, Arcan permanec¨ªa, con el mismo atuendo que llevaba el primer d¨ªa del juicio, impasible y como si lo que estuviera escuchando "no le afectara lo m¨¢s m¨ªnimo".

Gregorio Arroyo, representante de la viuda y de las dos hijas para los asuntos relacionados con el derecho a la intimidad y a la protecci¨®n de su imagen, confirm¨® que la mayor de las j¨®venes hermanas hab¨ªa realizado una minuciosa descripci¨®n de la persona que entr¨® en su domicilio, y que esta explicaci¨®n se correspond¨ªa con las caracter¨ªsticas f¨ªsicas de Pietro Arcan.

Rubio de ojos azules

La joven se?al¨® que el individuo al que vio aquella madrugada era un hombre alto, corpulento, rubio, de ojos azules y atl¨¦tico, rasgos que coinciden con el aspecto del moldavo. Adem¨¢s, tras el suceso, las v¨ªctimas reconocieron al principal acusado como el autor de los hechos. Ayer lo ratificaron, aunque sin cruzar ni una mirada con ¨¦l.

"Han sido momentos muy duros porque han tenido que recordar minuto a minuto lo que sucedi¨®. Las tres han estado muy emocionadas, pero han repetido lo mismo que hace dos a?os", explic¨® el letrado de la acusaci¨®n particular, quien tambi¨¦n reconoci¨® el "trato excepcional" que sus clientes hab¨ªan recibido en la sala de vistas por parte de los abogados de las defensas, quienes renunciaron a hacer preguntas a las testigos.

Tan s¨®lo el representante legal de Arcan formul¨® varias preguntas a la viuda de Castillo, que fue la primera en comparecer. A continuaci¨®n lo hizo su hija menor, a la que sigui¨® la hermana mayor de ¨¦sta.

Seg¨²n el abogado Arroyo, las testigos "a¨²n est¨¢n muy afectadas" por el suceso, ya que, dijo, tan s¨®lo han transcurrido dos a?os desde entonces, y explic¨® que, aunque el trauma psicol¨®gico todav¨ªa permanece en ellas, "en el juicio se han podido quitar un peso importante".

Pero, adem¨¢s de las lesiones ps¨ªquicas que les han quedado a las tres mujeres, la viuda de Arturo Castillo tiene secuelas f¨ªsicas a consecuencia de las intervenciones quir¨²rgicas a las que tuvo que ser sometida para extirparle varios ¨®rganos internos, ya que la noche de los hechos recibi¨® un disparo con orificio de entrada en un gl¨²teo y de salida por la cadera.

El representante de la familia Castillo explic¨® que, mientras que todos los presentes en la sala se sintieron muy afectados ante el relato de las comparecientes, Arcan se mostr¨® impasible, sonriente en algunos momentos, y mirando a todos lados y haciendo gestos. "Tiene una afectividad plana, no tiene remordimientos ni asume su responsabilidad. Su ego est¨¢ muy acentuado, y es capaz de mentir sin importarle las consecuencias", a?adi¨® Arroyo, quien afirm¨® que Arcan "es un individuo muy peligroso de cara a su reinserci¨®n en la sociedad".

Arroyo precis¨® que, aunque la acusaci¨®n particular todav¨ªa no ha recibido una notificaci¨®n oficial del tribunal, todo parece indicar que los magistrados prorrogar¨¢n por dos a?os m¨¢s la situaci¨®n de prisi¨®n provisional del moldavo, recluido en una celda incomunicada del centro penitenciario de Soto del Real desde el 20 de junio de 2001. Precisamente ayer se cumpl¨ªa el plazo de arresto preventivo para Arcan.

El pr¨®ximo lunes se reanudar¨¢ el juicio con la comparecencia de los polic¨ªas nacionales y municipales que actuaron la noche de los hechos en el chal¨¦ de la calle Arquitectura y los que participaron en la detenci¨®n del principal imputado.

El fiscal pide 70 a?os de c¨¢rcel para Pietro Arcan, mientras que el abogado de la acusaci¨®n particular reclama 80 a?os.