La fiscal¨ªa polaca registra otra vez el barco que ofrece la p¨ªldora abortiva

La fiscal¨ªa y la aduana del puerto polaco de Wladyslawowo inspeccionaron ayer, de nuevo, el barco Langenort, fletado por la organizaci¨®n feminista holandesa Mujeres sobre las Olas. Est¨¢ facultado por el Gobierno de los Pa¨ªses Bajos para ofrecer la p¨ªldora abortiva RU-486 en aguas internacionales a las mujeres que se encuentren dentro de las seis primeras semanas y media de gestaci¨®n.

El de ayer es el segundo registro que efect¨²an las autoridades polacas desde el lunes y, seg¨²n asegur¨® en conversaci¨®n telef¨®nica Rebecca Gomperts, la ginec¨®loga que viaja a bordo, todo estaba en regla. "Parece que podremos iniciar en breve nuestras jornadas educativas sobre la anticoncepci¨®n. De lo otro (la p¨ªldora abortiva) prefiero no hablar por si vulnero alguna ley polaca", a?adi¨®.

A pesar de su cautela y de que el medicamento en cuesti¨®n no puede siquiera ser mostrado en p¨²blico mientras el buque permanezca atracado en Polonia, Gomperts no descartaba demandar a los grupos radicales que han lanzado piedras y huevos al barco desde que lleg¨® el pasado fin de semana. "Este tipo de violencia y las amenazas que profieren tambi¨¦n supone un delito en esta tierra", afirm¨® la ginec¨®loga.

Vigilado por guardias privados y con una polic¨ªa, "que se muestra muy comprensiva y con af¨¢n de cooperar", en palabras de la m¨¦dico, el grupo esperaba que se les permitieran trasladarse, tal vez hoy, a una zona del muelle de f¨¢cil acceso para las mujeres que requieran sus servicios. "No entrar¨¦ en detalles, pero a las sesiones informativas pensamos a?adir varias salidas fuera de aguas polacas con las personas que as¨ª lo deseen y tengan un pasaporte v¨¢lido. Pensamos estar unas dos semanas. Veremos qu¨¦ pasa".

Ecos en el Parlamento

Antes incluso de que la organizaci¨®n Mujeres sobre las Olas empiece a impartir clases sobre la contracepci¨®n, el eco de su presencia en Wladyslawowo, localidad cercana al puerto de Gdansk, ha llegado ya al Parlamento de Varsovia. Katarzyna Piekarska, presidenta socialdem¨®crata de la Comisi¨®n de Justicia y Derechos Humanos, solicit¨® ayer al fiscal nacional, Karol Napierski, que aclarara las actuaciones efectuadas en el barco por sus colegas portuarios. Tanto ella como la Federaci¨®n Polaca para la Mujer y la Planificaci¨®n Familiar, consideran que los registros del Langenort no est¨¢n justificados porque no se hab¨ªa cometido delito alguno.

Los grupos cat¨®licos y antiabortistas han pedido, por el contrario, que se procese o encarcele a las feministas holandesas y que el barco sea confiscado. El obispo Tadeusz Pieronek, que dirige la Academia Papal en la ciudad de Cracovia, ha recordado a su vez que administrar una p¨ªldora abortiva supone un asesinato, "aunque ocurra en aguas internacionales".

El barco s¨®lo puede obrar de esta manera en alta mar. Polonia anul¨® hace una d¨¦cada las permisivas leyes del aborto aprobadas en la ¨¦poca comunista. Ahora s¨®lo se autoriza la interrupci¨®n de la gestaci¨®n cuando est¨¢ en peligro la vida de la madre, cuando el beb¨¦ presente malformaciones graves o el embarazo sea el resultado de una violaci¨®n.

Para organizaciones feministas como la Federaci¨®n para la Planificaci¨®n Familiar, que curs¨® la invitaci¨®n al grupo holand¨¦s Mujeres sobre las Olas para iniciar el presente viaje, la interrupci¨®n del embarazo deber¨ªa permitirse tambi¨¦n por motivos sociales.

S¨®lo as¨ª podr¨ªa evitarse que la cifra de las interrupciones ilegales (unas 200.000 al a?o) supere con creces las cerca de 150 anuales efectuadas conforme a la ley.