Radiograf¨ªa de la corrupci¨®n en China
Un informe oficial revela que las arcas del Imperio del Centro pierden un 12% del PIB debido a la malversaci¨®n
Feng Wenchao, ex subdirector de la compa?¨ªa tabacalera de la municipalidad de Chongqing (centro de China), ten¨ªa un sue?o: construir su ¨²ltima morada en su pueblo natal. Entre 1991 y 1998 se dedic¨® a edificar un lujoso camposanto privado en el que reposar¨ªa cuando cayera el tel¨®n. Pero el particular cementerio, de cerca de 700 metros cuadrados, con un mausoleo con sistema de ventilaci¨®n y un coste de m¨¢s de 100.000 yuanes (11.000 euros), ha acabado llev¨¢ndole ante los jueces, bajo la acusaci¨®n de haber desviado dinero p¨²blico para su construcci¨®n.
El de Feng es uno de los miles de casos de corrupci¨®n y malversaci¨®n de fondos que se han producido en China desde que el proceso de reforma y apertura del pa¨ªs lanzado por Deng Xiaoping en 1978 se convirti¨® en caldo de cultivo de un fen¨®meno pr¨¢cticamente inexistente hasta entonces.
Veinticinco a?os despu¨¦s, el Centro de Estudios de China, un think tank participado por la prestigiosa universidad pequinesa de Qinghua y la Academia de Ciencias de China, ha realizado el balance sobre la corrupci¨®n de altos funcionarios en las dos ¨²ltimas d¨¦cadas. El informe hace una radiograf¨ªa de la evoluci¨®n del fen¨®meno y las razones que lo motivan. Responde a las declaradas intenciones del Gobierno de luchar sin cuartel contra una de las principales lacras del pa¨ªs, seg¨²n reconoci¨® el pasado marzo el propio Wen Jiabao en su primera comparecencia p¨²blica como primer ministro.
"En los a?os ochenta y principios de los noventa, la situaci¨®n fue empeorando cada vez m¨¢s, hasta que a partir de 1995, despu¨¦s de que el Gobierno tomara medidas, se ralentiz¨® su fuerte crecimiento. No obstante, sigue siendo un problema muy serio, que provoca unas p¨¦rdidas econ¨®micas cercanas al 12% del PIB nacional", explica Guo Yong, autor del trabajo.
Entre las principales caracter¨ªsticas de la corrupci¨®n en China, el estudio destaca la diferencia entre las cantidades afectadas en la d¨¦cada de los ochenta y la de los noventa. En la primera no hay ning¨²n caso registrado que supere 100.000 yuanes, mientras que a partir de 1992 el 70% super¨® esta cifra, y el 30%, el mill¨®n de yuanes.
El informe asegura que la investigaci¨®n de un funcionario suele conducir a otros. "Los pagos se efect¨²an a menudo por medio de intermediarios, lo que dificulta las pesquisas", dice. Uno de los casos que sacudieron a toda la naci¨®n, en 1989, fue el de Luo Yunguang, viceministro de Ferrocarriles, ya que descubri¨® a un amplio n¨²mero de implicados. Otro famoso ha sido el del ex alcalde de Pek¨ªn Chen Xitong. Algunos suelen finalizar con duras sentencias, a modo de ejemplo, incluida la pena de muerte. La principal corrupci¨®n es el soborno. Pagos en g¨¦nero, como coches de lujo o viajes, han sido frecuentes en un pa¨ªs donde los regalos forman parte de la tradici¨®n y es pr¨¢ctica frecuente invitar a comer a los amigos y pasar la factura a la empresa.
"La cultura es una raz¨®n, pero no la m¨¢s importante. El problema est¨¢ en las instituciones, que no se han adaptado al r¨¢pido avance econ¨®mico", asegura Guo. Pero, ?puede ser eliminada? "No. Existe en todos los pa¨ªses del mundo. De lo que se trata es de limitarla y poder detectar a los infractores". Los tribunales chinos han juzgado a m¨¢s de 83.000 funcionarios por este motivo en los ¨²ltimos cinco a?os, de los cuales 2.662, un 65% m¨¢s, son de altos cargos de administraciones de nivel superior a condado. "La corrupci¨®n va contra el principio de la competencia justa", se queja Li, que trabaja en el sector hostelero. "La cuesti¨®n es que las leyes van detr¨¢s del desarrollo y esto permite a los funcionarios aprovecharse".
Seg¨²n el estudio, las familias de los corruptos suelen estar al corriente, y a menudo son utilizadas para lavar el dinero. En m¨¢s del 20% de las ocasiones, los investigados ten¨ªan tambi¨¦n una amante. "A veces son la causa por la que buscan m¨¢s ingresos, pero normalmente llegan despu¨¦s", dice Guo.
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