Las playas vascas reciben en junio la mayor cantidad de fuel desde la marea de febrero
Los ba?istas apenas han variado su comportamiento, pese a la presencia de chapapote en las playas vascas
La apertura de la temporada de ba?o en las playas vascas ha coincidido este mes con la mayor llegada de restos de fuel desde la gran marea negra que contamin¨® los arenales y oblig¨® a su cierre en febrero. En junio, y contando hasta ayer mismo, se han recogido 186 toneladas -ayer fueron dos toneladas- de chapapote de los arenales, de ellas cerca de 136 s¨®lo en las dos ¨²ltimas semanas, que corresponden precisamente con el periodo oficial de ba?os.
Estas cantidades superan claramente al chapapote que se retir¨® de las playas en marzo (104 toneladas), abril (65) y mayo (163). Las playas de Sopelana y Bakio, en Vizcaya, y las de Zumaia, Zarautz y San Sebasti¨¢n, en Guip¨²zcoa, han sido las m¨¢s castigadas. Desde el hundimiento del Prestige, en noviembre pasado, los servicios de limpieza han almacenado 2.341,5 toneladas de restos con fuel.
Sin embargo, el chapapote apenas ha retra¨ªdo a los ba?istas. Las playas se llenan en cuanto asoma el sol. Ayer, en plena bajamar hacia las 10.00, La Zurriola donostiarra era un buen ejemplo. "La gente ya sabe que tiene que prestar m¨¢s cuidado que antes, pero por el chapapote nadie se queda en su casa", comenta un socorrista.
Las autoridades sanitarias ya han advertido de que es necesario tomar precauciones en el ba?o, aunque han garantizado en todo momento el buen estado del agua del mar. La decisi¨®n de cerrar o acotar los arenales, como anunci¨® el portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, s¨®lo se adoptar¨¢ cuando est¨¦ en riesgo la salud de los ba?istas.Los operarios que recogen de la arena las galletas de chapapote no han observado cambios de comportamiento en los ba?istas. "La frecuencia y eficacia con la que se est¨¢n limpiado las playas permite tomar el sol, pasear por la orilla y ba?arse con absoluta tranquilidad", asegura Roberto, que ayer llevaba en una bolsa varios kilos de chapapote encontrados en la playa de La Zurriola. Este trabajador forma parte de una de las muchas brigadas que rastrean de sol a sol, de cinco de la ma?ana a ocho de la tarde, los arenales vascos.
Los ba?istas act¨²an con normalidad, pero a los puestos de los socorristas acuden en peregrinaci¨®n muchas personas con el galipote adherido a las plantas de los pies. All¨ª retiran las manchas con un "jab¨®n especial", explica un socorrista.
Luis Gonz¨¢lez de Galdeano, director de Salud P¨²blica del Gobierno vasco, sostiene con firmeza que, en la situaci¨®n actual, "no existe riesgo alguno para la salud de las personas" en las playas. Todas las anal¨ªticas que se han realizado hasta ahora del agua de la mar con presencia de hidrocarburos garantizan su salubridad "conforme a la normativa estatal y europea".
Desde que comenz¨® la temporada playera, apenas se han constatado casos graves de contaminaci¨®n por el contacto o la ingesti¨®n de chapapote. Los socorristas que atienden a pie de playa a los ba?istas s¨®lo han encontrado "alg¨²n episodio aislado de ni?os con molestias en el est¨®mago", al parecer como consecuencia de haber tragado agua del mar, explicaba ayer un voluntario en La Zurriola. "Tambi¨¦n se ha dado el caso de un surfista que nos ha venido con los ojos muy irritados", comenta este miembro de la Cruz Roja.
Ante este panorama, queda la incertidumbre de saber los efectos que producir¨¢ en el turismo la contaminaci¨®n de las playas. El sector de la hosteler¨ªa y los arrendadores de viviendas en primera l¨ªnea de costa conf¨ªan en que la situaci¨®n no empeore y los visitantes acudan como hasta ahora al Pa¨ªs Vasco. "La ¨²nica repercusi¨®n podr¨ªa darse en el turismo de cercan¨ªas", explica un representante del Departamento de Turismo, ya que son muchos los navarros y alaveses que frecuentan en verano los arenales vascos. Previsiblemente, el turismo de negocios y el gastron¨®mico-cultural -tres de cada cuatro visitantes a la comunidad aut¨®noma- no alterar¨¢n sus planes por la presencia de hidrocarburo. No obstante, algunas de las principales localidades costeras ya han notado una menor actividad en el alquiler de pisos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.