Instituto en ruinas
El IES Cuenca Minera, de Minas de Riotinto, ha tenido un final de curso verdaderamente espectacular. La techumbre del edificio que hac¨ªa de sal¨®n de actos, y actualmente reformado para gimnasio, est¨¢ a punto de derrumbarse. Este edificio, que es de lo m¨¢s emblem¨¢tico del pueblo -el exterior de una de sus paredes hace de espl¨¦ndido front¨®n- tiene los d¨ªas contados, y lo m¨¢s curioso del caso es que hace escasos d¨ªas se recibi¨® el correspondiente permiso administrativo para su reutilizaci¨®n, tras haber estado sometido, durante todo el curso, a obras de reformas. Por cierto, parte de esa reforma ten¨ªa que ver con la techumbre.
No nos cabe duda de que la Administraci¨®n abrir¨¢ la investigaci¨®n correspondiente para el esclarecimiento de los hechos y que proceder¨¢ a su reconstrucci¨®n de forma inmediata, para que, de una vez por todas, podamos ofrecerles a nuestros alumnos y alumnas una educaci¨®n lo m¨¢s completa posible.
Hasta ahora, la respuesta de la Delegaci¨®n Provincial de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n ha sido r¨¢pida, pero quedan flecos por determinar, por ejemplo: ?Qui¨¦n entra a sacar, del edificio siniestrado, los materiales deportivos acumulados tras numerosos viajes por alumnos "porteadores" y los profesores del Departamento de Educaci¨®n F¨ªsica?, ?qui¨¦n vigila el edificio, ante un peligro tan inminente, por su parte externa, para impedir que a cualquier ni?o, salt¨¢ndose las prohibiciones que se han puesto, le pueda suceder algo?, ?qu¨¦ hubiese ocurrido si el desplazamiento de las estructuras hubiese sucedido con alumnos y profesores dentro... porque pensar en un derrumbamiento, mejor ni hacerlo? ?stas y otras muchas preguntas, que a todos se nos ocurren, podr¨ªamos hacer pero ser¨ªa prolijo colocarlas en este escrito.
Por ¨²ltimo, queremos expresar nuestro malestar con la actuaci¨®n de las autoridades competentes en este caso -Guardia Civil y Polic¨ªa Local- por desentenderse de las labores de vigilancia, antes comentadas, y que de forma voluntaria tuvo que hacer, el d¨ªa del suceso, un conserje del centro -fuera de horario-, y, as¨®mbrense, el director durante casi toda la jornada y esto s¨ª que no es misi¨®n, ni de un cargo directivo, ni de un profesional de la ense?anza.
?ltima pregunta: ?Un suceso como ¨¦ste no merece, ni tan siquiera, una llamada del alcalde a la direcci¨®n del centro interes¨¢ndose por lo ocurrido? Tal vez un mes antes...
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