Para construir futuro

La historia de la humanidad se compone de hechos que han marcado puntos de inflexi¨®n definitivos en nuestra manera de comprender el mundo. Dos ejemplos de esto pueden ser el nazismo; Theodor W. Adorno filosof¨® sobre la imposibilidad de escribir poes¨ªa despu¨¦s de Auschwitz, asunto sobre el que tambi¨¦n se ha ocupado G¨¹nter Grass (Danzig, 1927), y los atentados terroristas contra las Torres Gemelas y la reorganizaci¨®n mundial que ¨¦stos han planteado, seg¨²n los expertos. Nunca antes como ahora necesitamos tanto del "sentido com¨²n" del que habla Hannah Arendt (1906-1975) en su obra Entre el pasado y el futuro para construir un futuro. Adem¨¢s, urge prestar atenci¨®n a lo peque?o: el individuo, para comprender lo grande: la sociedad en la que vivimos. ?stos podr¨ªan ser los dos hilos conductores de los libros aqu¨ª rese?ados. En resumen, son las historias m¨ªnimas las que nos permiten contraponer al "masivo espect¨¢culo" del que habla DeLillo (Nueva York, 1936) en su libro En las ruinas del futuro, la idea propia. "Por cada centenar de personas que han muerto de modo arbitrario necesitamos hallar una que result¨® salvada por un destello de intuici¨®n", dice DeLillo. En el caso de Grass, gran parte de la discusi¨®n se centra en la reunificaci¨®n alemana. En Art¨ªculos y opiniones, el Nobel apuesta por lo que ¨¦l define como "la unidad en la diversidad", es decir, una Alemania plural no unificada, ya que en su opini¨®n ¨¦sta s¨®lo conlleva la decadencia cultural y pol¨ªtica del pa¨ªs. Grass cree importante que Alemania tome conciencia de su historia, de su "mala memoria", para construir un futuro. La idea de construcci¨®n de futuro en Hannah Arendt tambi¨¦n se basa en el conocimiento de las carencias particulares, especialmente en cuestiones como la autoridad y la educaci¨®n, dos asuntos que aborda repetidamente en sus ensayos. En el caso de J¨¹rgen Habermas (D¨¹sseldorf, 1929), que mantuvo en la d¨¦cada de los ochenta una agria pol¨¦mica con Martin Walser en el intento de no dejar que se minimizaran los cr¨ªmenes nazis, sus ra¨ªces se cimientan en las teor¨ªas de Kant a Marx, del ser capaz de "pensar poni¨¦ndose en lugar de los dem¨¢s". Una idea que tambi¨¦n articula el pensamiento de Arendt. Ya lo dice ella en el libro: "La desaparici¨®n del sentido com¨²n es el signo m¨¢s claro de la crisis de hoy", y no debemos olvidar, prosigue, que "en cada crisis se destruye una parte del mundo, algo que nos pertenece a todos". En resumen, cuatro libros que nos recuerdan que sobre los s¨®lidos cimientos del pasado es donde debemos construir el futuro.