La obra de Cascos
Otra vez el suplicio. No hace ni ocho meses que remataron las obras terribles de la Gran V¨ªa, apenas si nos han dejado disfrutar de los interminables arreglos en la Montera y ya nos anuncian un nuevo y m¨¢s insufrible calvario en el centro neur¨¢lgico de Madrid. Si nada ni nadie lo remedia, en el plazo de unas semanas comenzar¨¢n en ese enclave cr¨ªtico de la ciudad unas obras cuyas consecuencias sobre la vida de los ciudadanos empalidecer¨¢n los tormentos infligidos por cualquiera de las grandes operaciones ejecutadas en los ¨²ltimos a?os. Esta vez ya no podremos acordarnos de ?lvarez del Manzano como hac¨ªamos antes cuando cruz¨¢bamos un laberinto de zanjas. Tampoco Ruiz-Gallard¨®n, que al d¨ªa de hoy lo es casi todo en Madrid capital y Madrid regi¨®n, est¨¢ detr¨¢s de lo que sin duda alguna nos complicar¨¢ la existencia hasta l¨ªmites insospechados a quienes pululamos en la zona.
No, en esta ocasi¨®n el que ha decidido poner las calles patas arribas es el mism¨ªsimo Francisco ?lvarez-Cascos, ministro de Fomento por la gracia de Aznar. El bueno de Cascos se ha propuesto construir una nueva estaci¨®n de Cercan¨ªas cincuenta metros por debajo de los edificios que bordean la calle de la Montera. Una estaci¨®n gigante que discurrir¨¢ desde la Red de San Luis a la Puerta del Sol. La obra, seg¨²n parece, es estrat¨¦gica para meter el flujo de pasajeros de las Cercan¨ªas hasta el coraz¨®n de la ciudad. Para ello hay que horadar adem¨¢s un nuevo t¨²nel de la risa capaz de conectar el kil¨®metro cero con la ya sobrecargada estaci¨®n de Atocha.
No ser¨¦ yo quien ponga en duda la necesidad de tan ambicioso proyecto, ni la idoneidad de cualquier esfuerzo encaminado a potenciar el uso del transporte p¨²blico, pero creo que los planes de Fomento merecen algunas consideraciones. En primer t¨¦rmino, he de reconocer mi prevenci¨®n hacia cualquier operaci¨®n de envergadura que lleve el marchamo del ministerio que dirige ?lvarez-Cascos. No hay m¨¢s que observar c¨®mo le han crecido los enanos en el trazado del AVE a Barcelona para sentir escalofr¨ªos ante los hipot¨¦ticos efectos que tendr¨ªan errores similares en un espacio hipersensible para las v¨ªas de servicio y el tr¨¢fico de la ciudad. Es importante recordar, adem¨¢s, que el grueso de la operaci¨®n se llevar¨¢ a cabo bajo los cimientos de unos edificios que fueron levantados en el siglo XIX. En este sentido, el secretismo con el que Fomento rodea los detalles de la obra no contribuyen precisamente a tranquilizarnos.
Otro aspecto importante es la forma en que han proyectado ejecutar la operaci¨®n y los plazos que esta metodolog¨ªa comporta. Tal y como lo han pensado, ser¨¢ necesario dejar la Gran V¨ªa en un solo carril por sentido a su paso por la Red de San Luis, cortar¨¢n las calles de la Montera y Espoz y Mina, se tragar¨¢n las d¨¢rsenas de autobuses de Sol y desviar¨¢n el recorrido de una veintena de l¨ªneas de la EMT. Esto ya ser¨ªa un aut¨¦ntico calvario de prolongarse las obras los dos a?os o dos a?os y medio que duraron los trabajos de prolongaci¨®n en las distintas l¨ªneas del metro. Pero no son dos ni tres, sino cuatro, los a?os que est¨¢ previsto permanezca toda la zona abierta en canal. Imaginen lo que ese periodo de tiempo supone para los comerciantes de la zona. Habr¨¢ decenas de tiendas que directamente tendr¨¢n que cerrar y puede que m¨¢s de un centenar de comercios ver¨¢n mermado su negocio hasta abocarles en niveles de subsistencia. La pregunta es si el objetivo justifica un sacrificio tan prolongado y brutal, y sobre todo si la ingenier¨ªa civil no ofrece en una obra subterr¨¢nea alguna soluci¨®n menos traum¨¢tica para el movimiento en superficie. Tengan en cuenta que los beneficios de esa ambiciosa obra no est¨¢ previsto disfrutarlos hasta el 2011, fecha en que calculan concluir¨¢n las labores bajo tierra de la nueva estaci¨®n. El planteamiento general del proyecto huele a desprop¨®sito. Lo es ya de partida por arrancar a los pocos meses de rematar la remodelaci¨®n de la Gran V¨ªa que hubo que soportar durante casi dos a?os. Un elemental ejercicio de coordinaci¨®n hubiera reducido los tiempos de sufrimiento y evitado el volver a levantar el pavimento que acabamos de estrenar. La realidad es que los madrile?os estamos m¨¢s hartos que nunca de zanjas. Aunque s¨®lo fuera unos meses, nos gustar¨ªa disfrutar alguna vez de nuestra ciudad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Puerta del Sol
- Opini¨®n
- Obras municipales
- Cercan¨ªas Madrid
- VII Legislatura Espa?a
- Transporte pasajeros
- Cercan¨ªas
- Estaciones ferrocarril
- Legislaturas pol¨ªticas
- PP
- Distrito Centro
- Adif
- Ministerio de Fomento
- Ayuntamiento Madrid
- Empresas p¨²blicas
- Renfe
- Distritos municipales
- Partidos pol¨ªticos
- Ayuntamientos
- Trenes
- Sector p¨²blico
- Empresas transporte
- Ministerios
- Madrid
- Gobierno municipal