Respuesta a Rafael Rojas

Debo felicitar al se?or Rafael Rojas porque, pese a la inflada ret¨®rica de su art¨ªculo Cuba: ?es posible una democracia soberana? (EL PA?S, 25-6-2003), ha merecido entrar en la bien ahormada perspectiva de EL PA?S. Saltan a la vista gruesas inexactitudes del se?or Rojas, como su apasionada ca¨ªda en el mismo mal que critica al r¨¦gimen cubano.

Pero, al final, el mismo se?or Rojas, como si desembarcase de la luna, se decide a poner las cosas en su punto: la oposici¨®n habr¨ªa de desarrollar el escenario de una democracia soberana en Cuba, seguido de unas preguntas que son claves para dar la vuelta a su art¨ªculo. Suena lindo lo que ¨¦l dice desear la oposici¨®n: "Una democracia socialmente responsable, una econom¨ªa de mercado controlada y una soberan¨ªa nacional intacta". ?Maravilla! Estoy seguro de que los revolucionarios cubanos le aplaudir¨ªan a rabiar, a no ser porque ellos, con la historia en la mano, tienen inventariada en la cabeza, en la vida y en hechos inequ¨ªvocos, la tan cacareada proclama norteamericana sobre esa "democracia responsable, econom¨ªa controlada y soberan¨ªa nacional intacta", seg¨²n vienen aplic¨¢ndola a Latinoam¨¦rica y al mundo en general.