El orgullo del artesano
Hasta hace poco todav¨ªa gui?aba el ojo al ver pasar a una mulata entrada en carnes. Luego se fumaba un Montecristo. Y tras la primera bocanada hac¨ªa un gesto c¨®mplice de aprobaci¨®n. Si alguien conoc¨ªa los secretos de un buen puro era ¨¦l, que se pas¨® media vida como tabaquero, a raz¨®n de 150 habanos diarios durante los 17 a?os que trabaj¨® en H. Upmann. No costaba animarle a desbaratar un habano. Iba separando las hojas y las montaba de nuevo con el fin de lograr que tirase correctamente. Una operaci¨®n que practicaba con orgullo de artesano mientras repet¨ªa: "Ya no los hacen como antes".
Compay fumaba desde los siete a?os, cuando daba unas caladas al encenderle el puro a su abuela, Ma Regina, esclava liberada que muri¨® con 115 a?os. El tabaco hab¨ªa sido la profesi¨®n de este artista casi olvidado, que cantaba en La Habana para turistas que apenas le prestaban atenci¨®n en las recepciones de los hoteles. All¨ª lo vieron por primera vez algunos espa?oles, y de all¨ª lo sac¨® el music¨®logo cubano Danilo Orozco para participar en un encuentro de m¨²sica tradicional en el Smithsonian de Washington. M¨¢s tarde volvi¨® a pensar en ¨¦l con ocasi¨®n del primer Encuentro del Flamenco y el Son, que organiz¨® la Fundaci¨®n Luis Cernuda en Sevilla en 1994. Una calurosa ma?ana, Compay se acerc¨® hasta la tumba de su viejo amigo Antonio Mach¨ªn en el cementerio de San Fernando y le cant¨® El camis¨®n de Pepa, uno de los primeros ¨¦xitos de Mach¨ªn en Cuba. Ya Santiago Auser¨®n estaba entonces al tanto de las andanzas del veterano sonero y dispuesto a producirle la Antolog¨ªa, un deslumbrante disco doble con 34 n¨²meros, que se edit¨® en 1996.
No s¨®lo Auser¨®n se anticip¨® al Buena Vista Social Club de Ry Cooder y Nick Gold, tambi¨¦n Pablo Milan¨¦s contribuy¨® antes que los anglosajones a rescatarle del olvido. Compay hab¨ªa colaborado en A?os, la serie de discos en los que Milan¨¦s rend¨ªa homenaje a la Vieja Trova. Chan Chan fue el n¨²mero que le brind¨® el ¨¦xito internacional cuando cumpl¨ªa 90 a?os. Le confes¨® a un periodista colombiano no haberlo escrito ¨¦l: "Estaba dormido y lo so?¨¦".
Ten¨ªa tremendo genio. En los estudios de la BBC en Londres, Ry Cooder, Ibrahim Ferrer, Rub¨¦n Gonz¨¢lez y ¨¦l grabaron Chan Chan para un especial de televisi¨®n. Nada m¨¢s terminar la toma se escuch¨® el enfado de Compay: "?Carajo!, hemos tocado como un grupo de viejos". Vivi¨® todo el siglo XX de Cuba. Conoci¨® de ni?o al trovador Sindo Garay, sali¨® de serenata a rondar muchachas con el gran Miguel Matamoros y le cort¨® el pelo al mism¨ªsimo Benny Mor¨¦. Ten¨ªa una manera de burlarse de la muerte: "A los 90, un empujoncito hasta los 100. Luego arranco pa los 115, como mi abuela, y a los 115 pido pr¨®rroga".
Babelia
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