Longevidad

Vivo en Galicia y trabajo en un hospital. Sin necesidad de escrutar las pir¨¢mides estadisticas, s¨¦ que la poblaci¨®n vive m¨¢s a?os. Hay viejos venerados, a la antigua usanza, y otros no tanto. Los tiempos cambiaron. La generaci¨®n de abnegadas mujeres cuidadoras de padres, suegros, nietos y vecinos, si hace falta, est¨¢ envejeciendo.

Dice Manuel Fraga que se perdieron los valores familiares, por eso nacen pocos ni?os y no se cuida a los mayores. Mientras, los hospitales gallegos est¨¢n colapsados, y se culpa a los familiares de llevar all¨ª a sus mayores cuando se ponen enfermos, ?y ad¨®nde los van a llevar? Encontrar una cama geri¨¢trica es como encontrar en la calle un boleto de la ONCE, premiado.

Los trabajadores sociales, m¨¦dicos, enfermeras, etc¨¦tera est¨¢n en paro y los "exportamos". En la campa?a electoral se dijo que las habitaciones ser¨ªan ?individuales! Ser¨¢ que est¨¢n invirtiendo en esos futuristas hospitales, nos quieren dar una sorpresa y por eso se utilizan los pasillos como habitaciones. Aut¨¦nticas acampadas.

Por ahorrar los m¨¦dicos cubren a los compa?eros en verano, el resto del personal tambi¨¦n. Las consultas externas parecen pel¨ªculas a c¨¢mara r¨¢pida. Las listas de espera reposan meses y meses.

Aun as¨ª nuestros mayores son longevos. Y son nuestra memoria y tienen todo el derecho a que los cuidemos. Ma?ana seremos usted y yo. En una habitaci¨®n ?individual?

Cu¨¢nto delirio, cu¨¢ntas mentiras. Eso s¨ª: d¨¦ficit cero. Dicen.