Muere un 'garganta profunda' del 'caso Irak'

David Kelly, el cient¨ªfico del Ministerio de Defensa del Reino Unido identificado por el Gobierno de Tony Blair como el topo de la BBC, desapareci¨® el jueves a media tarde de su casa. El cad¨¢ver de un hombre que corresponde a la descripci¨®n de Kelly fue hallado ayer por la ma?ana en un bosquecillo a ocho kil¨®metros de la casa del cient¨ªfico. La polic¨ªa, que hizo llegar su p¨¦same a la familia y estudia su muerte como "no explicada", es decir, sospechosa, no confirmar¨¢ hasta hoy la identidad y circunstancias del caso. La desaparici¨®n y casi segura muerte de David Kelly cay¨® ayer como una bomba pol¨ªtica en Londres. Aunque su cad¨¢ver no ha sido identificado, las probabilidades de que el cad¨¢ver corresponda al cient¨ªfico de Defensa son enormes.

La polic¨ªa estudia la muerte como "no explicada", es decir, como sospechosa

Tony Blair, que se encontraba volando de Washington a Tokio al conobcer la noticia, parec¨ªa muy afectado a su llegada a la capital japonesa, donde hizo saber que, si se confirma que el fallecido es David Kelly, el Ministerio de Defensa abrir¨¢ una investigaci¨®n independiente sobre las circunstancias de la muerte. Blair se hab¨ªa entrevistado en Washington con el presidente de EE UU, George W. Bush, y hab¨ªa recibido diversos homenajes.

Kelly, de 59 a?os, fue identificado p¨²blicamente el 9 de julio por el Ministerio de Defensa como una de las fuentes en las que se bas¨® el periodista de la BBC David Gilligan para denunciar que el Gobierno hab¨ªa presionado a los servicios secretos para "hacer m¨¢s atractivo" el primer informe oficial sobre los arsenales de Sadam Husein. Aunque Defensa no lo dijo expl¨ªcitamente, al hacer p¨²blico su nombre lo estaba se?alando como el topo de la BBC.

El cient¨ªfico, un microbi¨®logo experto en armas de destrucci¨®n masiva que desempe?¨® un papel clave en las inspecciones de Naciones Unidas en Irak entre 1991 y 1998, compareci¨® el martes pasado ante la comisi¨®n parlamentaria que investiga las denuncias de David Gilligan. Kelly, que pareci¨® muy inc¨®modo en su comparecencia p¨²blica, neg¨® que se considerara la fuente principal de Gilligan, porque consideraba que el periodista "no pudo basar en lo que yo le dije las tajantes afirmaciones que hizo".

David Kelly "estaba muy afectado, porque para ¨¦l era inexplicable el haber llegado a una situaci¨®n como ¨¦sa", declar¨® ayer su amigo y colega Alastair Hay a la BBC. Su esposa, Janice, ha reconocido a trav¨¦s de otro amigo de la familia, el periodista Tom Mangold, que el cient¨ªfico estaba sometido a una "fuerte tensi¨®n", que estaba muy estresado por la situaci¨®n y que se qued¨® muy decepcionado por su comparecencia parlamentaria.

"Janice no utiliz¨® la palabra depresi¨®n, pero dijo que estaba muy estresado con lo que hab¨ªa pasado y que ¨¦ste no era el mundo en el que quer¨ªa vivir", declar¨® Mangold.

Durante unos d¨ªas David Kelly se refugi¨® en el domicilio de unos amigos para evitar el acoso de la prensa, pero luego decidi¨® volver a su casa en Abingdon, en el condado de Oxford, porque la echaba de menos. Gran andar¨ªn, el jueves a las tres de la tarde sali¨® a dar un paseo. Nunca regres¨®. Poco antes de medianoche la familia tom¨® la decisi¨®n de llamar a la polic¨ªa.

Al alba de ayer, la polic¨ªa destin¨® 70 hombres y un helic¨®ptero para buscar a David Kelly, que vest¨ªa ropas veraniegas cuando sali¨® de paseo a pesar de que el tiempo el jueves era tormentoso y fresco en la regi¨®n. A las 9.20, la polic¨ªa localiz¨® un cad¨¢ver en Harrowdown Hill, Faringdon, un bosquecillo situado a unos ocho kil¨®metros de la casa de David Kelly. A primera hora de la tarde confirm¨® que el cuerpo y las ropas correspond¨ªan a las del profesor desaparecido. Pero hasta hoy la polic¨ªa no confirmar¨¢ ni la identidad ni las causas de la muerte.

La polic¨ªa se limit¨® a decir que investigaba el caso como "una muerte no explicada", una manera de decir que las causas del fallecimiento resultan sospechosas. El comentario policial invita en principio a descartar la posibilidad de que la muerte sea accidental o producto de un infarto quiz¨¢ debido a los d¨ªas de estr¨¦s. M¨¢s plausibles parecen las otras dos posibilidades: el asesinato o el suicidio.

La desaparici¨®n y casi segura muerte de David Kelly provoc¨® enorme preocupaci¨®n entre quienes, de una manera u otra, le llevaron a lo que sus amigos han descrito como una situaci¨®n l¨ªmite, a comparecer ante la opini¨®n p¨²blica en contra de sus deseos y de su naturaleza. El presidente del comit¨¦ parlamentario que le interrog¨® el martes, Donald Anderson, asegur¨® que el tono de la sesi¨®n de preguntas "no fue agresivo".

La BBC se declar¨® "consternada". Y el Gobierno prometi¨® una investigaci¨®n oficial de un caso que pone en entredicho la campa?a que desat¨® para identificar la fuente de las informaciones de la corporaci¨®n p¨²blica.