Tamayo se retrata

El diputado tr¨¢nsfuga Eduardo Tamayo no se apart¨® ni un mil¨ªmetro, en su primera comparecencia ante la comisi¨®n que investiga su defecci¨®n en la sesi¨®n constitutiva de la Asamblea de Madrid, del gui¨®n esbozado durante su intervenci¨®n en el debate de investidura frustrada de Rafael Simancas: todo se debe a la situaci¨®n interna de la Federaci¨®n Socialista Madrile?a (FSM) y no hay trama inmobiliaria alguna tras su decisi¨®n.

Tamayo sac¨® de nuevo a relucir un supuesto pacto por el que deber¨ªa entregarse al grupo Renovadores por la Base, del que formaba parte, el 40% de los cargos del hipot¨¦tico gobierno formado por Simancas con Izquierda Unida y cuyo incumplimento le llev¨®, junto a la diputada Mar¨ªa Teresa S¨¢ez, a dar la espantada. Que no le dieran lo que consideraba suyo y encima pretendieran d¨¢rselo "a los comunistas" en un "pacto oculto y humillante" parece que removi¨® en Tamayo su "conciencia pol¨ªtica", impuls¨¢ndole a desencadenar una crisis institucional sin precedentes.

Pero esa explicaci¨®n end¨®gena -un asunto interno de la FSM que Tamayo se empe?a en ofrecer como causa ¨²nica de su deserci¨®n y que avala el PP- salt¨® ayer por los aires, tras sus primeros interrogatorios. Tamayo no aport¨® prueba alguna, salvo recortes de prensa, de la entrega del posible Gobierno PSOE-IU en la Comunidad de Madrid a "los comunistas", ni pareci¨® interesarse por su formaci¨®n, al admitir expresamente que entre el 27 de mayo y el 6 de junio no asisti¨® a las reuniones de la FSM en las que se inform¨® de las negociaciones en curso. Incluso se vio impelido a admitir que, como miembro de la Ejecutiva socialista de Madrid, hab¨ªa dado su visto bueno tanto a las listas como al programa electoral que luego utilizar¨ªa para justificar su fuga. La coartada de Tamayo para su incalificable actuaci¨®n qued¨®, pues, desmontada. Y a falta de una buena explicaci¨®n, caben todas las explicaciones, incluida la de una trama de intereses urban¨ªsticos que hasta ahora no se ha podido probar.

Tamayo no pudo negar ni dar tampoco explicaciones convincentes sobre el fluido trato telef¨®nico en esas fechas previas a su deserci¨®n con el abogado pr¨®ximo al PP Jos¨¦ EstebanVerdes. Es posible que esa relaci¨®n sea el hilo del que tire el PSOE en pr¨®ximas comparecencias para encontrar esas otras causas -ex¨®genas en este caso- que aclaren lo ocurrido el 10 de junio en la Asamblea de Madrid. Tamayo se ha definido como "un hombre de principios, sincero y de tranquila y limpia conciencia". Pero ese retrato corresponde a alguien bien distinto al personaje contradictorio que compareci¨® ayer ante la comisi¨®n de investigaci¨®n.