"La nuestra es una arquitectura sin arquitectos"
Los arquitectos Carlo Baumschlager (1956) y Dietmar Eberle (1952), radicados en Voralberg, la provincia m¨¢s occidental de Austria, no utilizan ninguna de las t¨¢cticas habituales en la profesi¨®n para hacerse notar. Sus edificios no son dif¨ªciles de entender; tampoco pretenden impactar, ni abrir nuevos campos te¨®ricos. Al contrario, su enfoque de la arquitectura es muy directo; es el arte pr¨¢ctico de construir. Dedican su talento a perfeccionar cada detalle constructivo y a eliminar todo lo superfluo. Como resultado, sus edificios poseen una intensidad formal exquisitamente discreta a la vez que disciplinada. Baumschlager y Eberle son conocidos principalmente por sus edificios residenciales, aunque recientemente han ganado varios concursos para obras mayores, como la ampliaci¨®n del aeropuerto de Viena, un gran hospital en Kortrijk, B¨¦lgica, la nueva sede de la organizaci¨®n mundial contra el sida en Ginebra o un enorme proyecto de usos mixtos en Pek¨ªn. Ahora acaba de aparecer una monograf¨ªa que resume su producci¨®n, mientras sus proyectos se exponen en Ausburgo (hasta el 17 de agosto) para viajar a continuaci¨®n a Viena, Mil¨¢n, Bruselas, Nueva York, Par¨ªs y Praga.
"La gente siente que hablamos su mismo idioma"
PREGUNTA. En su ¨¦poca de estudiantes, en Viena, ?se sent¨ªan m¨¢s atra¨ªdos por el enfoque disciplinado de O. M. Ungers que por las ense?anzas de Hans Hollein?
RESPUESTA. En nuestro inter¨¦s por las tipolog¨ªas puede verse cierta similitud con las obras de Ungers; tambi¨¦n ¨¦l trabaj¨® mucho con el tema de la identidad cultural local. Una parte importante de nuestro pensamiento tiene que ver con la arquitectura an¨®nima y vern¨¢cula; me refiero a la arquitectura de la que habla Bernard Rudofsky en su libro Arquitectura sin arquitectos.
P. ?C¨®mo se reflejan esas ideas en sus primeros proyectos?
R. Nuestra actitud era abordar el dise?o de una forma muy directa. Intent¨¢bamos utilizar las tecnolog¨ªas locales; por ejemplo, los oficios de las construcciones de madera de la zona. Las tipolog¨ªas eran muy elementales, simples adiciones de espacios. Quiz¨¢ a eso se deba la aceptaci¨®n que tuvieron. De alg¨²n modo, la gente notaba que habl¨¢bamos su mismo idioma.
P. Otra cosa que hacen es contar con los usuarios en los proyectos de vivienda.
R. Nuestra tarea como arquitectos es construir estructuras f¨ªsicas e identidades culturales. Especialmente en proyectos de vivienda no nos parece que lo m¨¢s importante sea si el cliente quiere una cocina grande o peque?a, dos ba?os o uno. Nosotros no decidimos ese tipo de cosas. Hacemos posible que el usuario elija lo que quiere. En nuestro proyecto de Innsbruck, el promotor contrat¨® a un arquitecto local dedicado a decidir las distribuciones con los usuarios y al final los 300 apartamentos son todos distintos.
P. Al tiempo, han conseguido excluir a los residentes de la toma de decisiones est¨¦ticas.
R. Desde un punto de vista pragm¨¢tico, la responsabilidad del arquitecto incluye todos los puntos en los que lo privado entra en contacto con el ¨¢mbito p¨²blico. La fachada, la geometr¨ªa, la organizaci¨®n..., representan la parte m¨¢s p¨²blica del edificio.
P. Sus fachadas por capas est¨¢n dise?adas para que tras ellas puedan ocurrir muchas cosas.
R. Habitualmente utilizamos la estrategia de disponer dos capas de fachada a cierta distancia una detr¨¢s de otra para solucionar ese conflicto entre la expresi¨®n individual y la apariencia p¨²blica del edificio. Esto tambi¨¦n tiene ventajas en t¨¦rminos t¨¦cnicos, de aislamiento t¨¦rmico. Adem¨¢s, ofrece otras posibilidades; las habitaciones cuentan con un espacio al aire libre.
P. Y de aqu¨ª pasamos al tema del ahorro energ¨¦tico.
R. El ahorro de energ¨ªa no consiste en utilizar una tecnolog¨ªa especial; nosotros hacemos plantas compactas, con escaleras y servicios en el centro, y espacios vivideros en el contorno, orientados hacia la fachada. Tambi¨¦n los acabados son importantes: c¨®mo reflejan el calor, etc¨¦tera. As¨ª puede reducirse el consumo energ¨¦tico de un edificio.
P. En sus recientes oficinas para la aseguradora Munich Re han introducido piezas de arte, neones de Keith Sonnier o el muro de musgo de Olafur Eliasson.
R. Cuando se integra de verdad en un edificio, el arte puede contribuir a aumentar realmente su calidad. En las obras de Sonnier y Eliasson resulta dif¨ªcil distinguir qu¨¦ es arquitectura y qu¨¦ arte, pues consiguen llevar la calidad de la experiencia espacial hasta un nivel distinto. En este sentido podr¨ªa comparar su contribuci¨®n con la de un ingeniero o un constructor.
Tipos y funciones
AL HACERLE notar que las fachadas de vidrio de sus viviendas m¨¢s recientes no se diferencian demasiado de la fachada de vidrio de las oficinas para Munich Re, Dietmar Eberle responde: "La arquitectura es un signo de los tiempos, y estamos convencidos de que cada vez habr¨¢ menos diferencias entre habitar y trabajar. El siglo XX fue el de la industrializaci¨®n, pero este sector est¨¢ desapareciendo en los pa¨ªses m¨¢s desarrollados. Por ejemplo, las grandes empresas est¨¢n empezando a reorganizarse en unidades menores que funcionan independientemente, con gran autonom¨ªa en la toma de decisiones. Actualmente, la organizaci¨®n del trabajo no tiene que ver con la idea de funci¨®n, sino m¨¢s bien con la de proyecto. Ello implica que muchas de las tipolog¨ªas constructivas del siglo XX tendr¨¢n que cambiar porque se basan en una idea de funci¨®n que ya no se sostiene en una sociedad basada en la econom¨ªa de servicios. En el futuro, la vivienda no estar¨¢ separada del lugar de trabajo, pues en nuestra realidad social ya no lo est¨¢. Tomemos el tipo de vivienda m¨¢s reciente de estos tiempos, el loft. Qu¨¦ es un loft sino un espacio de trabajo transformado en un lugar donde se puede habitar y trabajar a la vez. Esto nos conduce de nuevo al tema de la arquitectura an¨®nima: al estudiar los edificios antiguos, de hasta finales del siglo XIX, se comprueba que en ellos lo normal era integrar trabajo y vivienda. Al igual que esas tipolog¨ªas, los cambios a los que hoy asistimos est¨¢n relacionados con el contexto y la organizaci¨®n de nuestra sociedad, y no hacen sino expresar el desarrollo de la misma".
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