Mercado gris

La Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA) del segundo trimestre de este a?o confirma una moderada mejor¨ªa del mercado laboral espa?ol. El paro ha descendido entre abril y junio en 97.600 personas y en el mismo periodo se crearon 233.700 puestos de trabajo, al tiempo que la poblaci¨®n activa aumentaba en 136.000 personas. La tasa de paro se sit¨²a as¨ª en el 11,12% de la poblaci¨®n activa. No obstante, no estamos ante unos indicadores entusiasmantes. Medido en t¨¦rminos interanuales, el paro ha aumentado en casi 59.000 personas y la tasa de temporalidad de los contratos ha subido del 30,2% del total de asalariados al 30,6%. No se puede decir, pues, que mejore la estabilidad de los asalariados, aunque est¨¢ claro que el mercado laboral mantiene una buena situaci¨®n en un entorno de bajo crecimiento econ¨®mico. Las tasas de creaci¨®n de empleo son similares a las de crecimiento y de aumento de la actividad.

Pero la evoluci¨®n del mercado de trabajo no puede entenderse sin mencionar otro factor decisivo en la creaci¨®n de empleo, que es la productividad. La econom¨ªa espa?ola genera empleo de baja calidad, barato, sin la aportaci¨®n debida de capital tecnol¨®gico y humano que a?ada valor a la producci¨®n y contribuya a que los productos espa?oles ganen cuota de mercado. Por otra parte, la creaci¨®n de empleo no muestra una tendencia homog¨¦nea. La construcci¨®n y los servicios generan gran cantidad de puestos de trabajo, debido a la burbuja inmobiliaria en el primer caso y a factores estacionales en el segundo. Pero existe otra realidad, que se menciona menos, y es que la agricultura destruye muchos empleos (a un ritmo interanual del 3%) y la industria pierde ocupaci¨®n a una tasa interanual del 0,9%.

Poca euforia suscita, pues, la evoluci¨®n del mercado de trabajo, aunque se mantenga con indicadores de salud correctos. El modelo de creaci¨®n de empleo es vulnerable -pr¨¢cticamente pende del hilo ¨²nico de la construcci¨®n - y la temporalidad se mantiene en una inercia inasequible a las reformas laborales. La consigna parece ser la de ir tirando mientras se confirma la recuperaci¨®n de la econom¨ªa internacional.