'Fes-me un catal¨¤'
S¨¢bado, 19 de julio. Voy a la Boqueria a comprar unos melones y al salir, subiendo por La Rambla, mi mirada se dirige a la fachada de la Virreina y, ?oh, milagro!, me encuentro con Ricard Salvat asomado a una de las ventanas del hermoso edificio. ?Qu¨¦ hace all¨ª ese hombre? ?Habr¨¢ el taimado Bertoldo tomado el Palacio de Invierno del sociata Mascarello? ?Y yo sin enterarme! Pero no, lo que se asoma a la ventana no es el profesor Salvat: es una foto del profesor Salvat. La foto del profesor Salvat que a su vez dirige la mirada hacia el balc¨®n central del palacio, el cual ha sido cubierto con un tel¨®n teatral en el que puede leerse: "Ricard Salvat y la seva ¨¨poca". Una mirada, la del profesor, entre sorprendida e incr¨¦dula y, en definitiva, de un m'enfotisme piramidal.
La exposici¨®n, seg¨²n leo en los papeles, tiene un objetivo: "Subsanar errores de desmemoria hacia la persona del autor" (Ricard Salvat). "?ste es un pa¨ªs con tendencia a la desmemoria", dijo el m¨¢ximo responsable de la cultura municipal el d¨ªa en que se inauguraba la exposici¨®n, palabras que en boca del regidor Mascarell hay que tom¨¢rselas como un dogma de fe. Ahora bien, en el caso de Salvat, yo no hablar¨ªa de "desmemoria", sino de simple ignorancia, como es el caso de una inmensa mayor¨ªa de profesores, escritores y artistas de este pa¨ªs que no disfrutan de una proyecci¨®n medi¨¢tica, enti¨¦ndase televisiva. Entre todos hemos conseguido que ¨¦ste sea un pa¨ªs de ignorantes y nada tiene de extra?o que en una reciente edici¨®n de un concurso televisivo, cuando a una se?ora le preguntaron en qu¨¦ lengua escrib¨ªa don ?ngel Guimer¨¤, respondiese que en ingl¨¦s.
A Ricard Salvat, el p¨²blico en general (hablamos b¨¢sicamente de un hombre de teatro) lo ignora, pero la gente de la seva ¨¨poca y principalmente las gentes de teatro de este pa¨ªs no s¨®lo no lo ignoran, sino que guardan una buena, excelente memoria de sus m¨²ltiples bondades. Yo todav¨ªa no he ido a ver esa exposici¨®n, pero si cuando vaya a verla encuentro en ella la raz¨®n ¨²ltima que me explique c¨®mo un hombre que en su d¨ªa fue el patr¨®n del teatro de este peque?o pa¨ªs, respetado y adorado por todos, al cabo de unos a?os se convirti¨®, para una gran parte de la profesi¨®n teatral, en un don nadie, en una persona de la que se hablaba francamente mal; si doy, repito, con esa ¨²ltima raz¨®n, considerar¨¦ que el objetivo de la exposici¨®n -"subsanar errores de desmemoria" o del tipo que sean- ha sido todo un ¨¦xito.
Aparte de que la exposici¨®n consiga o no ese objetivo, les dir¨¦ que la mirada de Salvat hacia el balc¨®n central de la Virreina no deja de tener su morbo. ?Por qu¨¦? Pues porque all¨ª, si no recuerdo mal, ten¨ªa su despacho Maria Aur¨¨lia Capmany, que fue regidora de Cultura municipal y unos a?os antes cofundadora, con Salvat, de la Escola d'Art Dr¨¤matic Adri¨¤ Gual y compa?era del insigne tortosino. Pero ¨¦sa es ya otra historia.
Mi¨¦rcoles, 23 de julio. "La Generalitat pide voluntarios para ense?ar catal¨¢n a extranjeros", leo en el peri¨®dico. El programa se denomina Voluntaris per la llengua y se trata de formar parejas ling¨¹¨ªsticas, de id¨¦ntico o distinto sexo, en las que un o una catalanohablante dedique 10 horas para darle al otro u otra, preferentemente emigrante, clases de catal¨¢n oral. En realidad, la idea no es ninguna novedad y recuerdo que Joan Mar¨¦s/Faneca y Norma Valent¨ª, los personajes de El amante biling¨¹e, la farsa novelada de mi amigo Mars¨¦ sobre la esquizofrenia de las nacionalidades y las lenguas, ya le hab¨ªan sacado buena punta a la misma para deleite del personal.
"?Qui¨¦n le ense?ar¨¢ catal¨¢n a Ronaldinho?", se pregunta uno de mis amigos. Mi amigo dice que ha de tratarse de un crack medi¨¢tico y propone a Mari Pau Huguet. "En el caso de que el chico no meta goles", dice mi amigo, "siempre podremos hacer de ¨¦l un buen catal¨¢n y, qui¨¦n sabe, lo mismo termina abriendo una tienda de carquinyolis en Cardedeu". Yo me inclino por otra Mari Pau, crack y medi¨¢tica: la Mari Pau Janer. ?Se imaginan a la bella mallorquina jugando con las rizadas melenas del brasileiro mientras le canta La balanguera? Y qu¨¦ emoci¨®n en la tribuna del Bar?a el d¨ªa en que la se?ora revele que, con ojos pillos y la mejor de sus sonrisas, el futbolista le ha pedido: "Fes-me un catal¨¤". Eso, haz de m¨ª un catal¨¢n com cal. Visca el Bar?a!
Jueves, 24 de julio. En el cruce de Diagonal con paseo de Sant Joan, el monumento a Verdaguer sigue encorsetado por un andamio met¨¢lico. Lleva meses as¨ª ?Tanto tardan en remozarlo, en limpiarlo? Y desde hace unos dos o tres meses, encima lo tienen cubierto con unas lonas de tela. ?Hasta cu¨¢ndo? A ver si acabar¨¢ siendo verdad aquello de "dol?a Catalunya, p¨¤tria del meu cor, qui de tu.... recony quina sort!". Los domingos cierran las terrazas. Antes, el Bauma cerraba los s¨¢bados y abr¨ªa los domingos, lo contrario del Morrysson. Ahora cierran ambos. Ya no tengo ad¨®nde ir a leer los peri¨®dicos. Podr¨ªan turnarse, como las farmacias. Frente a mi casa hay tres farmacias en solo 100 metros. El paseo est¨¢ sucio, hace un calor insoportable, duermo mal. Nada, que me voy a la monta?a. Ciao.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.