Centenares de personas despiden a Sandra Palo, asesinada en Legan¨¦s
Familiares y amigos dieron ayer el ¨²ltimo adi¨®s a la joven asesinada en mayo por cuatro chicos, tres de ellos menores
Centenares de familiares y amigos dieron ayer por la ma?ana el ¨²ltimo adi¨®s a Sandra Palo, una vecina de Getafe de 22 a?os que fue violada y asesinada el pasado 17 de mayo por cuatro j¨®venes, tres de ellos menores, junto a una nave industrial de una empresa de r¨®tulos luminosos, en Legan¨¦s. Dos autopsias, varias pruebas forenses y un estudio de ADN son los pasos previos a los que ha sido sometido el cuerpo de la joven deficiente ps¨ªquica antes de que recibiera sepultura ayer en el cementerio getafense de Nuestra Se?ora de la Soledad.
Los hechos se producen sobre las tres y media de la madrugada del s¨¢bado 17 de mayo. Sandra Palo ha salido a tomar unas copas con sus compa?eros del taller ocupacional donde estudiaba, en la zona norte de la capital. A esa hora decide regresar a su casa, en el barrio getafense de Las Margaritas. Ese mismo d¨ªa toma la primera comuni¨®n su hermano peque?o y prefiere estar pronto en casa. De hecho, avisa a trav¨¦s de su tel¨¦fono m¨®vil a sus padres de que est¨¢ en la plaza El¨ªptica (Carabanchel) y que est¨¢ a punto de subir al autob¨²s nocturno que la llevar¨¢ a casa.
Los cuatro j¨®venes deciden volver y quemarla para borrar las posibles huellas
La v¨ªctima es atropellada unas ocho veces tras ser violada y quedar extenuada
Pero, la historia tiene un final much¨ªsimo m¨¢s tr¨¢gico. Mientras Sandra Palo est¨¢ esperando al autob¨²s junto a su ex novio, tres j¨®venes montados en un coche oscuro van a recoger a un cuarto amigo a las fiestas de San Isidro, en la cercana avenida de la Ermita del Santo. Los tres chavales tienen edades entre 14 y 18 a?os. El mayor es Francisco Javier Astorga Luque, apodado El Malaguita. Cuando recogen a su amigo, de 16 a?os, le dicen que esa noche tienen que salir a trabajar. Pensaba robar en alg¨²n concesionario o en alguna joyer¨ªa, ya que los cuatro son expertos aluniceros (robar empotrando un coche contra el escaparate de una tienda), seg¨²n fuentes policiales.
Su invitado les dice en un principio que no les acompa?a. Se lo est¨¢ pasando muy bien en las fiestas y prefiere quedarse, pero al final es convencido y sube al veh¨ªculo. Emprenden trayecto a Vallecas para recoger a un quinto miembro del grupo, pero no le encuentran, por lo que cambian de camino y deciden ir a Alcorc¨®n, donde ten¨ªan escondido en un garaje un coche robado listo para hacer varios alunizajes.
En su recorrido, pasan por plaza El¨ªptica y ven a Sandra Palo con su novio. Entonces, El Malaguita dice al menor de 16 a?os: "Haz todo lo que sea necesario para que suba al coche porque quiero liarme con ella". Algunas fuentes se?alan que el joven nacido en M¨¢laga (de ah¨ª su apodo) conoc¨ªa a la chica, logr¨® que el ex novio y ella se subieran al coche. Algunas declaraciones apuntan a que emple¨® un cuchillo para intimidarla. Inician entonces camino hacia Getafe, donde vive Palo.
A pocos kil¨®metros de la plaza El¨ªptica, paran el coche y obligan a bajar del veh¨ªculo al ex novio. Despu¨¦s siguen su viaje, hasta que paran en un descampado junto a la carretera de Toledo (N-401), que da acceso a la f¨¢brica de r¨®tulos Fraile. Entonces, comienza la verdadera tortura para la vecina de Getafe.
Primero se bajan el joven de 16 a?os y Sandra Palo: "Ella quer¨ªa hacerlo conmigo. Se hab¨ªa enamorado de m¨ª, porque se aprendi¨® mi nombre de puta madre". Entonces, empiezan a besarse "en la parte calentita del coche", encima del cap¨® del veh¨ªculo, hasta pasar a mayores. Mientras, el resto de amigos se quedan dentro del coche. Cuando terminan el acto sexual, deciden subirse al veh¨ªculo. Sus acompa?antes dicen que ellos tambi¨¦n quieren divertirse y que la chica tiene que acostarse con ellos. La joven se niega, pero dos de ellos la sujetan fuertemente por los brazos mientras el tercero la viola. Ella no puede moverse a pesar de su corpulencia. Despu¨¦s se van turnando hasta que completan el acto sexual los tres. El abuso dura unos 45 minutos, seg¨²n los detenidos.
La joven logra ponerse en pie con serias dificultades. Con paso lento, se apoya en el muro de la f¨¢brica de r¨®tulos. Est¨¢ extenuada tras las m¨²ltiples agresiones sexuales a que ha sido sometida. El Malaguita, que conduc¨ªa el coche, piensa que, si la dejan con vida, podr¨ªa reconocerles. Los cuatro est¨¢n fichados y han pasado mucho tiempo con su v¨ªctima. Arranca el motor, mete la primera velocidad y pisa a fondo el acelerador. La joven es atropellada y cae malherida. La operaci¨®n la repite unas siete u ocho veces. Marcha adelante, marcha atr¨¢s. Piensan que la han matado, pero en realidad Sandra Palo est¨¢ agonizando. El reiterado atropello hace que uno de los faros delanteros se rompa y los cristales queden en el lugar del crimen.
Los cuatro j¨®venes se marchan. Uno de ellos tiene ara?azos que le ha provocado Sandra en su intento de defenderse, por lo que deciden volver y quemarla para borrar las posibles huellas. Antes paran en una gasolinera de la plaza El¨ªptica y compran un euro de gasolina. Lo hacen con disimulo y tap¨¢ndose la cara para no ser grabados por las c¨¢maras de seguridad. Regresan al descampado. El Malaguita roc¨ªa con el combustible a la joven y le prende fuego. Las graves heridas que sufre acaban por matarla. Despu¨¦s cada uno se va a su casa. El ZX verde oscuro que emplearon nunca ha sido recuperado. Supuestamente fue quemado cerca de Valde-ming¨®mez, seg¨²n la polic¨ªa.
El Grupo XII de Polic¨ªa Judicial, dedicado a robos y atracos, detiene a los supuestos culpables
. Diversas llamadas permiten identificar al menor de 16 a?os como uno de los autores. ?ste es detenido el 12 de junio tras robar un Jaguar e intentar atropellar a un peat¨®n en Puente de Vallecas. El resto de los culpables fue apresado a finales de junio en sus domicilios de Alcorc¨®n y Ca?ada Real.
Los padres de Sandra Palo afirman que han recogido hasta la fecha 400.000 firmas para solicitar al Gobierno de la naci¨®n que endurezca las penas recogidas en la Ley del Menor.
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