Kluivert prolonga su odisea

Mientras que el Barcelona viajaba ayer desde Boston a Washington despu¨¦s de haber derrotado a la Juve en el primer partido de su gira americana, en Madrid, Patrick Kluivert se afanaba en conseguir el visado que le permita reunirse con la expedici¨®n azulgrana. Su intento fue en vano, al menos ayer. El Barcelona removi¨® cielo y tierra para conseguir, de la manera m¨¢s r¨¢pida posible, el documento que haga posible la entrada del delantero holand¨¦s en Estados Unidos. Diputados de CiU, a instancias del club azulgrana y al igual que han hecho con otros ciudadanos catalanes o que viven en Catalu?a, se interesaron en la embajada de Estados Unidos sobre los tr¨¢mites de la documentaci¨®n del jugador. Sin embargo, este tipo de casos est¨¢n ya regulados y quedan a expensas de las decisiones que adopte el Departamento de Inmigraci¨®n de Estados Unidos.

El pasado viernes, los funcionarios de aduanas del aeropuerto de Boston impidieron a Kluivert la entrada a Estados Unidos porque no pose¨ªa el visado especial que se requiere a los ciudadanos no estadounidenses con antecedentes penales. Es el caso del jugador del Barcelona que, en 1996, sufri¨® un accidente de tr¨¢fico en Holanda en el que result¨® muerta una persona. Fue juzgado, fue declarado culpable y fue obligado a cumplir una condena realizando trabajos sociales.

"Todo va bien, estamos a la espera de noticias". Uno de los representantes de Kluivert se mostr¨® optimista a la salida de su entrevista personal con el c¨®nsul estadounidense en Madrid, a media tarde. Pero la realidad era otra. El delantero del Barcelona no hab¨ªa podido tomar ya el avi¨®n de las 13.30 que deb¨ªa llevarle ayer a Filadelfia.

La jornada comenz¨® muy temprano para Kluivert. Tras tomar el primer puente a¨¦reo, lleg¨® a la embajada de EE UU, en la calle de Serrano, pasadas las nueve de la ma?ana. Acompa?aban al holand¨¦s ?scar Santos, empleado del club, Kim Loudrup, uno de los representantes del jugador, y un abogado de la entidad azulgrana. El procedimiento para conseguir un visado especial para personas con antecedentes penales no es f¨¢cil. Seg¨²n fuentes de la propia embajada, es necesario rellenar un completo formulario y concertar cita con el c¨®nsul estadounidense, que estudia el caso y entrevista al solicitante en las dependencias consulares de la embajada. Cerca de las once y media, un monovolumen de alquiler a bordo del cual hab¨ªa intentado acceder a la embajada -finalmente tuvo que hacerlo a pie-, recogi¨® al grupo y lo condujo a un c¨¦ntrico hotel madrile?o, donde almorzaron a la espera de las cinco de la tarde, hora de la entrevista con el c¨®nsul. Una hora despu¨¦s salieron de la embajada con prisas y pocas ganas de hablar. Ya bien entrada la tarde, con la esperanza de que el papeleo se resuelva hoy, Kluivert regres¨® a Barcelona. Despu¨¦s de recorrer 15.000 kil¨®metros en los ¨²ltimos tres d¨ªas, no se vislumbra el fin de su viaje.