DOS HIJOS DE COMPAY SEGUNDO TOMAN EL RELEVO DEL SONERO
Dos hijos de Compay Segundo, Salvador y Basilio Repilado, tomar¨¢n el relevo del legendario sonero cubano, fallecido el mes pasado en La Habana a la edad de 96 a?os, y continuar¨¢n con las giras por el mundo para mantener viva su m¨²sica. Desde hace a?os ambos integraban la banda del famoso autor de Chan Chan, y a partir de ahora contar¨¢n con el apoyo de F¨¦lix Mart¨ªnez, un virtuoso del la¨²d que lleva varios meses entren¨¢ndose con el arm¨®nico, el instrumento que Compay invent¨® hace m¨¢s de 60 a?os.
"A lo largo de su vida, Compay compuso m¨¢s de 100 canciones. No s¨®lo sones, tambi¨¦n boleros, guarachas, guajiras y changu¨ªs, el ritmo tradicional de Guant¨¢namo. No vamos a permitir que ese legado se pierda", dice Salvador, de 52 a?os, quien desde mediados de los ochenta acompa?¨® a su padre con el contrabajo y fue su mano derecha. Basilio, de 58 a?os, fue el ¨²ltimo en incorporarse al grupo Compay y sus muchachos, hace tres a?os, en la percusi¨®n menor y haciendo los coros. A partir de ahora har¨¢ la voz segunda.
"El carisma de Compay es inimitable, pero en las ¨²ltimas actuaciones Basilio ya lo acompa?aba y hace tiempo que ensaya el timbre y el color de su voz", afirma Salvador, quien ahora asumir¨¢ la organizaci¨®n y direcci¨®n de la agrupaci¨®n.
La charla tiene lugar en la oficina de Compay en La Habana, llena de recuerdos del inolvidable m¨²sico, que fue compa?ero de Miguel Matamoros y fund¨® en los a?os cuarenta el d¨²o Los Compadres, con Lorenzo Hierrezuelo.
Al igual que Compay fue barbero y torcedor de puros adem¨¢s de m¨²sico, Salvador y Basilio se dedicaban a otros oficios antes de entrar en el grupo. El primero es graduado de Informaci¨®n Cient¨ªfico-T¨¦cnica y Bibliotecnolog¨ªa, aunque de joven hizo estudios de solfeo en dos prestigiosos conservatorios de La Habana. Basilio es mec¨¢nico de aviones -"Me gradu¨¦ con diploma rojo en la Escuela de Aviaci¨®n de Krasnodar"- y aprendi¨® m¨²sica de o¨ªdo. "En la calle Salud viv¨ªamos puerta con puerta con Miguel Matamoros. Llevo la m¨²sica en la sangre, pues escuch¨¦ a mi padre desde peque?ito y siempre le imit¨¦. Cuando no lo hac¨ªa bien, ¨¦l me correg¨ªa", cuenta Basilio. Compay fue un eterno optimista. Es famoso su dicho de que iba a vivir al menos 115 a?os, como su abuela, la esclava liberada Ma Regina. Pero en los ¨²ltimos tiempos Compay se preocup¨® de preparar a sus hijos y al resto de los m¨²sicos de la banda para el relevo. A F¨¦lix Mart¨ªnez, que durante a?os fue el laudista de Celina Gonz¨¢lez, le ven¨ªa ense?ando desde hac¨ªa meses las posiciones del arm¨®nico y el timbre de ese instrumento, hecho a su medida. Hasta 1997, el grupo de Compay fue un cuarteto tradicional. Ese a?o, el carism¨¢tico Hugo Garz¨®n comenz¨® a hacer en la agrupaci¨®n la voz prima y, posteriormente, entraron los clarinetistas Haskell Armenteros, Rafael Inciaerte y Rosendo Nardo, adem¨¢s de Rafael Fournier (bongo), Erenio Almonte (guitarra), Basilio y -hace algunos meses- F¨¦lix Mart¨ªnez, convirti¨¦ndose el cuarteto en una banda fabulosa. El proyecto m¨¢s inmediato de los herederos de Compay es grabar Tribute, un disco para el sello discogr¨¢fico espa?ol DRO-Warner que ser¨¢ un homenaje al artista e incluir¨¢ canciones in¨¦ditas de Compay.
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