Muere un caballo de Diego Ventura

La tragedia se consum¨® en el tercer toro. Por un tropez¨®n, no se sabe si por culpa del jinete o porque fall¨® el caballo, el toro arroll¨® al equino y el jinete sali¨® despedido. El toro se ceb¨® con el caballo y lo corne¨® hiri¨¦ndolo de muerte. Cuando entre todos consiguieron que el toro se apartara del caballo, para entonces el pobre animal llevaba el paquete intestinal colgando. Daba grima ver al pobre caballo arrastrando sus entra?as. Cuando consiguieron llevarle a las dependencias veterinarias nos lleg¨® la noticia de que le tuvieron que apuntillar.

Rui Fernandes estuvo muy fr¨ªo ante un toro que era un t¨¦mpano. Eso, en su primero. En su segundo valoramos un rej¨®n a porta gayola muy bien ejecutado, seco. Bien de ejecuci¨®n, pero mal de colocaci¨®n en banderillas.

Andy Cartagena estuvo cumplidor en sus dos toros. Muy bien en su segundo en los quiebros en banderillas.

Diego Ventura estuvo eficaz despu¨¦s de la cogida de su caballo. Sac¨® otros ejemplares de su cuadra, y lo hizo muy bien. En su segundo realiz¨® demasiadas pasadas en falso en banderillas. Las tres rosas que coloc¨® estuvieron desigualmente puestas.

Celebramos las decisiones que tom¨® el nuevo presidente de la plaza de San Sebasti¨¢n, Francisco Tuduri. En primer lugar, la petici¨®n de oreja a Diego Ventura no era mayoritaria, pese a todo el drama que supuso la cogida de su caballo. Con relaci¨®n a la negativa de este presidente a que Andy Cartagena colocara una rosa, creemos que el presidente volvi¨® a tener raz¨®n, ya que ese toro hab¨ªa recibido un sinf¨ªn de rejones, banderillas largas y banderillas cortas. No se puede ir matando a los toros como si fuera una carnicer¨ªa.

En recuerdo del caballo muerto citemos unos breves versos del poeta del ventisiete Fernando Villal¨®n: "Mi caballo marisme?o / que no le teme a los toros / ni a los jinetes de acero". Si no se me parte el palo, / aquel torillo berrendo / no me hiere a m¨ª el caballo".