Debate inform¨¢tico cuerpo a cuerpo

Uno de los platos fuertes de la s¨¦ptima edici¨®n de la Campus Party promet¨ªa ser la mesa redonda que en la ma?ana de ayer enfrent¨® a la compa?¨ªa Microsoft con su reci¨¦n enemiga Linux. El debate llen¨® todos los asientos del auditorio del Museo Pr¨ªncipe Felipe, donde m¨¢s de 300 participantes escucharon con atenci¨®n los argumentos que dieron una y otra parte. Todo ello con un espectador oficial, el consejero de Educaci¨®n, Cultura y Deportes, Esteban Gonz¨¢lez Pons.

En representaci¨®n de Linux estuvo Juan Tom¨¢s Garc¨ªa, presidente de Hispalinux, y en la parte contraria se encontraba el director de estrategia de la Plataforma de Microsoft Espa?a, Luis Mart¨ªn. El tema a tratar era peliagudo: el monopolio de Microsoft como servidor se ve amenazado por la llegada de Linux, sistema operativo que ofrece un software libre y gratuito.

El encuentro, que pretend¨ªa ser una exposici¨®n sobre las ventajas y desventajas tecnol¨®gicas de cada uno de los servidores, termin¨® convirti¨¦ndose en un ataque directo entre los polemistas. Juan Tom¨¢s acus¨® a Mart¨ªn de "politizar" sus argumentos, al tiempo que ¨¦ste le reprochaba que el proyecto Linux "son meras ideas filos¨®ficas".

Desde el principio, el debate no estuvo falto de ataques directos entre ambas empresas. El representante de Microsoft confes¨® que su empresa se sent¨ªa "m¨¢s o menos perseguida por Linux". Juan Tom¨¢s, director de Hispalinux, coment¨® hasta la saciedad la presunta "ilegalidad de ciertas acciones de la compa?¨ªa norteamericana". Asimismo, ambos representantes se ampararon continuamente en las acciones realizadas por los grandes dirigentes de ambas empresas inform¨¢ticas, Steve Balmer, por parte de Microsoft, y Richard Stalman por parte de GNU-Linux.

Mientras que Juan Tom¨¢s y Luis Mart¨ªn se lanzaban argumentos que m¨¢s de un asistente calific¨® de "carentes de sentido alguno", el moderador y cofundador de la Campus Party, Paco Ragajeles, intentaba que el debate volviera a su cauce. Al final, las intervenciones m¨¢s aplaudidas fueron los de este ¨²ltimo.

A la salida del debate, al que el consejero Esteban Gonz¨¢lez estuvo en todo momento atento, las reacciones de los asistentes no se hicieron esperar. La mayor¨ªa de los campuseros ped¨ªan un software libre, tal y como ofrece Linux, aunque aseguraron sentirse "muy c¨®modos" en un sistema operativo que "todos conocen" como es Microsoft. De hecho, reprocharon a Linux no tener un sistema "f¨¢cil de programar", pero no estaban contentos con el "monopolio que Microsoft representa en el mundo inform¨¢tico". En lo que s¨ª estaban todos de acuerdo y as¨ª lo manifestaron reiteradamente en el turno de preguntas, fue en que no hubo una comparaci¨®n entre ambas plataformas tecnol¨®gicas, sino que se centraron "¨²nicamente en aspectos pol¨ªticos de las compa?¨ªas". El debate lleg¨® a parecer, tal como comenta un barcelon¨¦s que se define como Linuxero, "una escena de comedia".

Es as¨ª como, aunque el sue?o ya empieza a hacer mella en estos "adictos al ordenador", ¨¦stos quieren "saber m¨¢s" acerca de aquello que usan diariamente.