Zapatero asegura que Aznar se va con un epitafio de rencor que choca con los valores democr¨¢ticos

Si el presidente del Gobierno acus¨® al l¨ªder de la oposici¨®n, el lunes en Menorca, de anteponer sus intereses a los de Espa?a e incluso a los de su propio partido, ayer Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero reproch¨® a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar que s¨®lo le preocupe arremeter contra el PSOE y no los soldados espa?oles en Irak, los problemas medioambientales o de inseguridad. Con sus mensajes, que "chocan frontalmente con los valores democr¨¢ticos", Aznar escribe "un epitafio de rencor y crispaci¨®n" y se va de su cargo "como lleg¨®, usando el terrorismo como arma pol¨ªtica".

Tr¨ªas: Aznar intenta "quebrar el sentimiento de concordia de la Constituci¨®n"

Maragall: la negaci¨®n de la pluralidad hace del presidente "un adversario de Catalu?a"

La respuesta de Zapatero a las duras acusaciones formuladas el lunes por Aznar en una cena con militantes del PP fue tan r¨¢pida como contundente. Quiz¨¢s porque el propio l¨ªder del PSOE avis¨® de que hab¨ªa cargado "las pilas" durante sus vacaciones en Motril, ayer por la ma?ana retom¨® la actividad pol¨ªtica con una reuni¨®n con la ejecutiva provincial de su partido en Granada tras la que cit¨® a los periodistas para asaetear con inusual vehemencia al presidente. Hasta el punto de que, muy serio y con muestras de enfado, lleg¨® a avisar un par de veces a Aznar de que "est¨¢ colmando la paciencia de los espa?oles, de los socialistas" y la suya propia.

Comenz¨® por devolverle la pelota al presidente, quien al hilo de la respuesta al plan Ibarretxe, hab¨ªa acusado al l¨ªder socialista de anteponer sus intereses de dirigente a los de Espa?a. Tras decir que los socialistas replicar¨¢n al proyecto soberanista del lehendakari a su "manera" espet¨® que la "¨²nica preocupaci¨®n" de Aznar "es el PSOE y no Espa?a, ni Irak", ni los soldados, "ni las costas afectadas por los vertidos, ni los incendios de este verano, ni el aumento de la criminalidad". Frente al emplazamiento del jefe del Ejecutivo de que el PSOE disponga del suficiente "sentido com¨²n" para situar "la lealtad constitucional como eje de la acci¨®n pol¨ªtica", Zapatero le acus¨® de "chocar radicalmente con el esp¨ªritu de la transici¨®n, con el esp¨ªritu constitucional". Su "mensaje de crispaci¨®n y de pasado" constituye, seg¨²n el socialista, "un epitafio de rencor, crispaci¨®n y divisi¨®n".

"Aznar se va como lleg¨®, utilizando el terrorismo, la divisi¨®n, la crispaci¨®n y muy cerca de los sectores inmobiliarios", a?adi¨® en referencia a la versi¨®n de los socialistas del esc¨¢ndalo de transfuguismo en la Comunidad de Madrid.

Zapatero se pregunt¨® si de verdad alguien puede creer que Aznar quiere alg¨²n frente con el PSOE cuando al tiempo le insulta gravemente. Es m¨¢s, cree que lo que quiere Aznar es un frente contra el PSOE y por eso los socialistas no creen necesario ninguno para oponerse a un plan soberanista que no comparten pero que no combatir¨¢n con "la demagogia, el enga?o y la intolerancia", que achac¨® al PP.

El l¨ªder socialista le record¨® a Aznar que s¨®lo har¨¢ frentes contra el terrorismo, porque en Espa?a "sobran frentes y faltan acciones para construir". Y cuestion¨® la buena fe de Aznar al descalificar a un partido que en las ¨²ltimas elecciones, las municipales, fue "el m¨¢s votado por los espa?oles".

El presidente del Gobierno hab¨ªa arremetido asimismo contra el l¨ªder de los socialistas catalanes, Pasqual Maragall, cuyas propuestas sobre una colaboraci¨®n interregional en el marco de la Uni¨®n Europea "ponen en tela de juicio la convivencia" y quien, a juicio de Aznar, usa la Constituci¨®n "como un instrumento de usar y tirar". El l¨ªder socialista replic¨® a esto que no entiende c¨®mo un partido que se llama liberal critique que una regi¨®n quiera establecer relaciones comerciales con otras vecinas y concluy¨® que las cr¨ªticas de los populares son "rancias, ignorantes".

Algo m¨¢s extensa pero no menos ¨¢cida fue la respuesta del propio Maragall a Aznar.

El dirigente catal¨¢n afirm¨® que Aznar "miente" cuando dice que su preocupaci¨®n es mantener una Constituci¨®n que "ni vot¨®". Asegur¨®, adem¨¢s, que el presidente del Gobierno y del PP "tiene miedo" de las consecuencias que tenga "una lectura atenta de la Constituci¨®n y de la realidad de la Espa?a plural", frente a la "interpretaci¨®n m¨¢s minimalista" en la que el presidente se empe?a para "impedir que la historia avance". Un esfuerzo que demuestra, a juicio del candidato a la presidencia de la Generalitat, que Aznar es "un peligro para Espa?a" y un "adversario de Catalu?a".

Maragall destac¨® que esa comunidad "no acepta el mapa de Espa?a radioc¨¦ntrico de Aznar", en la que no figuran "el eje cant¨¢brico, ni el eje del Ebro, ni el eje mediterr¨¢neo". Rechaz¨® la idea de la Espa?a del jefe del Ejecutivo en la que "todo pasa por Madrid" como una visi¨®n "peque?a y estrecha" del pa¨ªs y de sus posibilidades. Frente a esta concepci¨®n "Catalu?a no est¨¢ dispuesta a callar m¨¢s tiempo".

Esa "negaci¨®n de la pluralidad" lleva a Espa?a "contra las rocas" y por eso Catalu?a debe liderar el desarrollo del modelo constitucional y auton¨®mico "frente a la Catalu?a sumisa y sometida" garantizada por los pactos del PP con CiU.

Pero tambi¨¦n ayer desde la coalici¨®n nacionalista replicaron al discurso de Aznar, y con inusual sinton¨ªa con las tesis socialistas. El portavoz del grupo catal¨¢n en el Congreso, Xavier Tr¨ªas, tambi¨¦n atribuy¨® al presidente un "intento de quebrar el sentimiento de concordia, de entendimiento, que se busc¨® en su d¨ªa con la Constituci¨®n". Las cr¨ªticas del presidente a Maragall muestran que Aznar ("un hombre dif¨ªcil al que le gusta serlo", le defini¨® Tr¨ªas) "no pierde la ocasi¨®n, cada vez que habla, de generar crispaci¨®n", cuando lo que deber¨ªa hacer es "buscar puntos de encuentro".

No tom¨® precisamente esa l¨ªnea el PP en su r¨¦plica a Zapatero, ya que por boca de Ana Mato, coordinadora de organizaci¨®n, atribuy¨® al l¨ªder socialista "el mismo resentimiento" que Felipe Gonz¨¢lez en su "constante obsesi¨®n por insultar y descalificar" a Aznar.