Retretes
Cuando empec¨¦ a trabajar y llegaba un momento en que ya no pod¨ªa soportar a los compa?eros ni a los jefes, me escapaba al cuarto de ba?o y me met¨ªa en alguno de los v¨¢teres dispuestos en fila. Me sentaba sobre la tapa y all¨ª me pasaba un buen rato contemplando c¨®mo el fluorescente iluminaba el portarrollos de Roca y los dibujos del corcho de las paredes. Sal¨ªa como nueva.
La primera vez que sub¨ª a un avi¨®n y me vi hecha un cuatro e inmovilizada entre la bandeja y el compa?ero de asiento y fui consciente de lo temerario de la situaci¨®n, busqu¨¦ con cierta angustia la puerta de los aseos y la encontr¨¦ bajo el letrero de Lavatory. El lavatory es un cuarto de ba?o compacto en que todo est¨¢ empotrado en un mueble, que se abre y se cierra como las branquias de un pescado. Pero donde es imposible, al contrario de lo que muestran las pel¨ªculas, que dos personas por delgadas que sean puedan follar en ninguna postura veros¨ªmil, lo que realmente ir¨ªa en contra de su esencia, que es el encuentro con la soledad dentro de un aparato atestado de pasajeros y sin ninguna posibilidad de escapatoria.
Cuanta m¨¢s soledad necesitamos, m¨¢s solitarios nos vamos volviendo, y al rev¨¦s. Quiz¨¢ por eso en las viviendas actuales cada vez hay m¨¢s ba?os y menos dormitorios y comedores. Esta sensaci¨®n la expresa de maravilla el escritor japon¨¦s Tanizaki cuando dice que "un pabell¨®n de t¨¦ es un lugar encantador, lo admito, pero lo que s¨ª est¨¢ verdaderamente concebido para la paz del esp¨ªritu son los retretes".
As¨ª que no nos extra?emos de que la gente famosa, m¨¢s necesitada de intimidad que los dem¨¢s, tienda a poseer cuartos de ba?o, o sea, refugios m¨¢s numerosos. En estos cuartos de ba?o remotos, extensos como campos de f¨²tbol, Beckham por fin podr¨¢ quitarse los pendientes y el traje de los domingos. Y Aznar y Blair, dando rienda suelta a su megaloman¨ªa, podr¨¢n so?ar que son Beckham.
El m¨ªo, en cuya paz y sosiego tengo por costumbre leer la prensa, en los ¨²ltimos d¨ªas, con tanto informe manipulado sobre Irak, se est¨¢ volviendo loco, se est¨¢ hinchando como un globo y me da miedo. Es el signo de los nuevos tiempos.
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