Incertidumbre sobre el efecto del crimen en la consulta del euro

El impacto que puede tener el asesinato de Anna Lindh en el refer¨¦ndum sobre el euro de ma?ana, domingo, era ayer una inc¨®gnita. Los dos primeros sondeos aparecidos tras conocerse la muerte de la ministra arrojaban resultados contradictorios.

La encuesta realizada en la tarde del jueves por el Instituto SKOP y publicada ayer por el diario Aftonbladet reflejaba un espectacular incremento del voto del s¨ª, estableciendo un empate al 50% entre los partidarios y los contrarios a la moneda ¨²nica. Sin embargo, otro sondeo elaborado por el prestigioso Instituto Sifo y publicado en el peri¨®dico Dagens Nyheter no recog¨ªa en sus datos el menor rastro de cambio hacia la tendencia que encarnaba Lindh: el no obten¨ªa el 50% de los votos, frente al 38% del s¨ª. El Instituto Gallup, cuya encuesta se espera conocer hoy, avanzaba ayer que el 91% de sus entrevistados aseguraban que la muerte de Lindh no iba a afectar el sentido de su voto.

Pero como todo el mundo sabe, la ciencia demosc¨®pica no es exacta. El director general del Instituto Sifo, Tolvo Sj?ren, se excusaba ayer ante la prensa por no haber podido medir la corriente de emotividad y solidaridad que ha despertado en todo el pa¨ªs el asesinato de la ministra y subrayaba que, a su juicio, "ahora ser¨ªa mucho m¨¢s dif¨ªcil para algunas personas votar no al euro". Id¨¦ntica opini¨®n ten¨ªa el chileno Mauricio Rojas, exilado desde hace 30 a?os y ahora diputado por el Partido Liberal sueco: "Creo que s¨ª tendr¨¢ influencia y ser¨¢ muy dif¨ªcil votar no para los socialdem¨®cratas. El resultado est¨¢ m¨¢s incierto que nunca".

Un pa¨ªs dividido

La encuesta de Sifo reflejaba tambi¨¦n algunos datos demoledores para la causa de la moneda ¨²nica. Por ejemplo, cit¨® Sj?ren, "el 25% de los que en 1994 votaron a favor de la adhesi¨®n a la Uni¨®n Europea se muestran hoy contrarios al euro". Aquel plebiscito dividi¨® en dos a Suecia, con un resultado del 52% a favor del ingreso y un 47% en contra, un tanteo at¨ªpico en los suecos, que tienden a eludir el conflicto social en aras del consenso y que podr¨ªa volver a repetirse ahora.

Los argumentos esgrimidos por los partidarios del s¨ª han hecho hincapi¨¦ sobre todo en la conveniencia del euro para la econom¨ªa y las empresas suecas y en la necesidad de influir en las decisiones que se tomen en la UE. Pero, como dec¨ªa el director general del Instituto Sifo, "los argumentos t¨¦cnicos no han funcionado en la campa?a". Los contrarios al euro han hecho bandera de la soberan¨ªa econ¨®mica de Suecia, en peligro, seg¨²n ellos, de caer en manos de los bur¨®cratas de Bruselas, y del fantasma de una subida de precios y del paro que provocar¨ªa la moneda ¨²nica. Su eslogan, "Mejor tu salario en coronas que tu seguro de paro en euros", se hab¨ªa mostrado imbatible hasta la muerte de Lindh frente a la pregunta "?Cooperaci¨®n o aislamiento?" que planteaba la propaganda del s¨ª.