El pueblo jiennense de Rus celebra un segundo carnaval, una tradici¨®n que se remonta al siglo XVII

Durante estos d¨ªas, en Rus (Ja¨¦n), los ni?os acuden al colegio disfrazados como si estuvieran en pleno carnaval. Pero hoy no s¨®lo hay fiesta en el colegio, las m¨¢scaras y disfraces tambi¨¦n toman las calles de este pueblo durante la Fiesta de los Mozos, una tradici¨®n que se mantiene desde el siglo XVII. Este pueblo se distingue por ser el "¨²nico que celebra dos fiestas de m¨¢scaras y dos fiestas del Corpus", se?al¨® Diego Poyatos, cronista de Rus.

Todo comenz¨® cuando, en 1682, una peste bub¨®nica acab¨® con la vida de cerca de una treintena de j¨®venes de Rus, cuando la poblaci¨®n de este municipio, ubicado en pleno coraz¨®n de la comarca de La Loma, apenas se acercaba a los dos centenares. Mientras el miedo y la preocupaci¨®n cund¨ªan entre los vecinos, los m¨¢s j¨®venes se vieron obligados a ocultar sus rostros con m¨¢scaras para protegerse de la peste que amenazaba con acabar con las nuevas generaciones y el futuro que ¨¦stas representaban. La desesperaci¨®n creada por esta epidemia fue tal, que todas las esperanzas se depositaron en una segunda procesi¨®n.

Ahora, Rus cuenta con 4.000 habitantes y los vecinos vuelven a sacar en procesi¨®n a Jes¨²s Sacramentado y celebran tres d¨ªas de m¨¢scaras y fiestas. Las calles se engalanan con flores, altares, dibujos de colores y el pueblo sale a la calle con sus m¨¢scaras, al igual que hicieron aquellos mozos de 1682.

La procesi¨®n se celebra cada tercer domingo de septiembre y esta festividad abre tres d¨ªas de una fiesta llena de color y m¨²sica que resucita a don Carnal en unas fechas un tanto at¨ªpicas. Al anochecer, las calles se transforman y las m¨¢scaras se hacen con el pueblo. Y en la noche de hoy mi¨¦rcoles, disfraces y m¨¢scaras de todo tipo se ver¨¢n en la plaza del pueblo, donde se entregar¨¢n los premios a los mejores disfraces. Antes, un pasacalles protagonizado por los m¨¢s peque?os recorre el centro de Rus con m¨²sica y, por supuesto, con las m¨¢scaras que son el elemento protagonista de la Fiesta de los Mozos.

Las caretas recuerdan a los monstruos de siempre o incluso a pol¨ªticos y protagonistas de la actualidad social. Pero sobre todo predominan las hechas a mano. Seg¨²n Poyatos, lo m¨¢s caracter¨ªstico de esta fiesta, que mezcla dosis del jolgorio popular pagano con la espiritualidad m¨¢s profunda, "es la espontaneidad de los vecinos, que se sienten muy identificados con esta tradici¨®n".