Negar el agua
Tras su pol¨¦mica eurorregi¨®n ahora Maragall nos ofrece un nuevo cap¨ªtulo de su culebr¨®n particular. El candidato socialista a presidente de Catalu?a o no sabe estar callado o le agrada demasiado el protagonismo p¨²blico. Cuando las inundaciones que se cobraron muertos en Catalu?a, principalmente en Barcelona, solicit¨® ayuda de toda ¨ªndole y la recibi¨® incluso de valencianos y murcianos. A posteriori, ide¨® su plan, del que durante meses y hasta hace d¨ªas estuvo hablando sin parar levantando desconfianzas y creando malestar en algunas autonom¨ªas y divisi¨®n de opiniones en su partido. Toda su andadura pol¨ªtica se resume como una sucesi¨®n de cap¨ªtulos a cual m¨¢s rocambolesco. Precisamente el nuevo fasc¨ªculo supera a los anteriores en humillaci¨®n y falta de escr¨²pulos. Estos d¨ªas se ha columpiado con un asunto que es de vital¨ªsima importancia y de primera necesidad: el Plan Hidr¨®logico Nacional. Negar Maragall como catal¨¢n un bien com¨²n, agua, a regiones que le correspondieron antes solidariamente no es de recibo. Supone una injusta vejaci¨®n, un insulto a los pueblos de Valencia y Murcia, esencialmente a sus laboriosos y sufridos agricultores que claman por una gotita de sobrante perdido al mar y no por robarle todo un caudal al Ebro. A ello cabe a?adir el hecho de que Maragall se atrevi¨® a acusar a las autonom¨ªas de Valencia y Murcia de no saber ahorrar agua. Es una provocaci¨®n hostil impropia de un pol¨ªtico que se jacta de ser dialogante y moderado.
?Se imaginan a la inversa que se le niega ayuda contra incendios y se insulta calificando de taca?os e insolidarios a los catalanes? ?La que se armar¨ªa! Seguro que Maragall defender¨ªa a Catalu?a contraatacando tales comentarios. Por ello, ser¨ªa ideal que Maragall se pusiera en el pellejo de los humillados para que sintiera el dolor que sus palabras han provocado. Esta situaci¨®n requiere disculpas inmediatas a los aludidos y la rectificaci¨®n desde el propio ofensor.
A costa de lo que sea, de quien sea y como sea, quiere ser el pr¨®ximo presidente de la Generalitat de Catalu?a. Sus artima?as, ideas y declaraciones ofensivas hacia los dem¨¢s hacen dudar de su capacidad para el cargo y de sus intenciones.
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