Aznar admite negociar la modificaci¨®n del reparto de poder en la Uni¨®n Europea

El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, rebaj¨® ayer el tono de la pol¨¦mica que ha iniciado en la Uni¨®n Europea en torno al reparto de votos en el Consejo y se declar¨® dispuesto a negociar en la Conferencia Intergubernamental abierta ayer en Roma incluso una soluci¨®n distinta de la acordada en el Tratado de Niza. "Puede haber acuerdo con los equilibrios alcanzados en Niza, o con partes de esos equilibrios, o de otras formas. O puede ocurrir que no haya acuerdo", dijo en rueda de prensa. "Queremos escuchar las razones de los otros", a?adi¨®.

"La diferencia entre un sistema de doble mayor¨ªa [como el aprobado por la Convenci¨®n] y otro de ponderaci¨®n de voto [como el acordado en Niza] es que, en el primero, los pa¨ªses con m¨¢s poblaci¨®n est¨¢n sobrerrepresentados. Hay una diferencia, pero no es una diferencia por la que nos estemos abriendo las venas", a?adi¨®, en un intento de quitar dramatismo al tema.

Aznar no recul¨®, sin embargo, un ¨¢pice de la argumentaci¨®n que ha venido manejando las dos ¨²ltimas semanas para defender la preferencia espa?ola hacia el sistema de ponderaci¨®n de votos. En su turno de palabra ante la CIG introdujo, adem¨¢s, inmediatamente el problema y reiter¨® que la Convenci¨®n se "excedi¨® del mandato" de los Quince cuando abord¨® la reforma del Tratado de Niza.

Pero tambi¨¦n en ese ¨¢mbito formal de la reuni¨®n entre los 25 l¨ªderes reunidos en Roma emple¨® Aznar un lenguaje orientado a no encasillar posiciones y a superar problemas. Dedic¨®, por ejemplo, m¨¢s tiempo del habitual a alabar el trabajo global de la Convenci¨®n, que, dijo, "es una buena base para empezar a discutir". Elogi¨® asimismo la inclusi¨®n en el proyecto de Constituci¨®n de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE, y concluy¨®: "Estoy muy a gusto con el proyecto constitucional de la Convenci¨®n, pero queremos que no se modifiquen los equilibrios institucionales. No estamos pidiendo nada".

El presidente expres¨®, por otra parte, "el deseo de que la CIG termine sus trabajos antes de fin de a?o", y de que en tres meses "se logre un tratado constitucional que lo englobe todo".

M¨¢s tarde, fuera de la sala, en su encuentro con la prensa, reiter¨® que el ¨²nico consenso vigente es el de Niza, donde se realiz¨® "el acoplamiento institucional" necesario para proceder a la ampliaci¨®n; que la Convenci¨®n "rompi¨®" ese consenso; que la CIG "tiene toda la legitimidad para enmendar" el proyecto de la Convenci¨®n, ya que en ella est¨¢n los Gobiernos surgidos de las urnas; que cambiar el sistema de ponderaci¨®n de voto que ha regido hasta ahora "es una aventura que no sabemos hasta d¨®nde nos puede llevar"; que para que prospere la posici¨®n espa?ola "no se bloquear¨¢ nada, porque ya est¨¢ en marcha" el sistema de Niza.

En medios pr¨®ximos a los negociadores espa?oles se insiste en el lenguaje duro de que el Gobierno espa?ol har¨¢ "una negociaci¨®n de principios". Aznar repiti¨®, sin embargo, que quiere "escuchar las razones de los otros" e insisti¨® en que est¨¢ "abierto a la discusi¨®n y al di¨¢logo".

"Yo soy veterano en estas cosas, s¨¦ c¨®mo funcionan y qu¨¦ significan las posiciones y los discursos de cada uno", a?adi¨®, tras recordar que le toc¨® negociar los tratados de Amsterdam y Niza. "Es una experiencia larga y no me siento ni solo ni aislado", dijo.

El presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, y el canciller alem¨¢n, Gerhard Schr?der, advirtieron ayer de que el debate puede llegar a condicionar las negociaciones sobre la financiaci¨®n de la UE en el sexenio 2007-2013. Aznar no mostr¨® ese temor. "Yo no descarto nada", se?al¨®, "pero no hay por qu¨¦ mezclar las cosas. Ahora tenemos una Conferencia Intergubernamental que abordamos con buen esp¨ªritu y con la convicci¨®n de terminarla antes de finales de a?o. Luego ser¨¢ el turno de las perspectivas financieras, que ahora no tocan".