La universidad

Pod¨ªa uno hoy arrancar con la criminal amenaza de ETA a los trabajadores de EITB y el tipo de r¨¦gimen que nos deparar¨ªa un imposible gobierno de los suyos: quien discrepara pasar¨ªa por una especie de parodia de los juicios de Stalin para ser fusilado o exiliado en las Bardenas (lo m¨¢s parecido a Siberia que tenemos en el paisito y aleda?os). Pod¨ªa arrancar as¨ª, para luego pasar a un alegato nost¨¢lgico de aquella primera ETB y Euskadi Irratia, hechas por profesionales j¨®venes, din¨¢micos,... buenos, que resultaba como aire fresco en el panorama de las comunicaciones del momento. Nostalgia frente a una EITB directamente intervenida por el Gobierno y el PNV, que puede decir una cosa cuando reg¨ªa el Pacto de Lizarra y otra cuando se impulsa el plan Ibarretxe "a pesar" de Batasuna, o se le da un tono a las cadenas en euskera diferente a las cadenas en castellano. Podr¨ªa decirse otro tanto de RTVE y los otros medios p¨²blicos (y algunos privados). Es un mal general: la directa dependencia de los medios de comunicaci¨®n p¨²blica de los ejecutivos de Espa?a.

Y esto me lleva a conectar con el tema que inquieta a muchos y al que dedicar¨¦ hoy este escrito: la voluntad de los ejecutivos, y en concreto del Gobierno vasco (no s¨®lo), por controlar las universidades, espec¨ªficamente, la UPV, por aterrizar ya. La voluntad de suprimir una autonom¨ªa universitaria, garante (al margen de poderes o intereses) desde que las universidades son de un trabajo cient¨ªfico de calidad a trav¨¦s de recortes presupuestarios y leyes de intervenci¨®n, LOU y ley vasca de universidades. (Otro tanto podr¨ªa decirse de la libertad informativa a que antes alud¨ªa.)

El rector puso el dedo en la llaga y lo dijo con datos y m¨¢s que convincentemente en su discurso en el acto de inauguraci¨®n del curso acad¨¦mico. Ya es lamentable que un rector (¨¦ste o cualquier otro) se vea obligado a intervenir en un acto institucional "reivindicando" (en lugar, pongamos, de hablar de los nuevos proyectos, del dise?o de nuevas titulaciones, de las nuevas perspectivas internacionales, de los convenios logrados o los avances en investigaci¨®n), que aparezca antes que como una autoridad acad¨¦mica y cient¨ªfica como un contable justiciero. Es lamentable, pero debe hacerlo por responsabilidad, se ve obligado a ello.

Porque el hecho cierto es que la ¨²nica universidad p¨²blica de este pa¨ªs (estar¨ªa por decir que la ¨²nica universidad, pues es la que, adem¨¢s de docencia, tiene un programa serio de investigaci¨®n; el resto tienden a ser centros de formaci¨®n superior), donde estudia hasta el 70% de los universitarios, est¨¢ siendo seriamente acosada por el poder pol¨ªtico. Lo est¨¢ siendo en t¨¦rminos financieros con unos presupuestos raqu¨ªticos que no s¨®lo impiden un crecimiento necesario y natural de ella, sino que la constri?en hasta el l¨ªmite de la paralegalidad y que acaban en despilfarro. (?Qu¨¦ hace un catedr¨¢tico de F¨ªsica rellenando torpemente formularios y llevando la contabilidad de su proyecto el 60% de su tiempo disponible, quit¨¢ndolo a investigaci¨®n y docencia, cuando eso lo har¨ªan mucho mejor administrativos y contables? La UPV es la universidad con un ratio menor entre profesores y personal de administraci¨®n entre las espa?olas.) En general, se dedica un tercio menos respecto al PIB en gasto universitario si lo comparamos con los pa¨ªses de la UE. Si el profesor universitario cobra la mitad que en Irlanda o B¨¦lgica y est¨¢ a la altura de Turqu¨ªa, el gasto por alumno es de un tercio (con lo que ello implica en equipamiento, etc). Y lo est¨¢ siendo por la v¨ªa de leyes de control (en lugar de autonom¨ªa) universitario.

No entrar¨¦ en las insidias y descalificaciones que desde el Gobierno se lanzan sobre el actual equipo: es el fragor de la refriega. Pero tener una universidad s¨®lida es m¨¢s decisivo si cabe para el futuro de cualquier pa¨ªs en esta era de la informaci¨®n. Tras los acuerdos de Bolonia y la b¨²squeda de una remodelaci¨®n profunda de las universidades de toda la UE para actualizarlas y hacerlas competitivas, es urgente que el Gobierno vasco ampl¨ªe y estabilice su relaci¨®n financiera con la UPV y busque respetar su autonom¨ªa plena... salvo que pretenda otra cosa distinta al progreso para este pa¨ªs.