La "mayor redada antipirater¨ªa de Europa" se convierte en una gran pifia policial
Los denunciantes de la presunta "banda organizada", la SGAE y la AFYVE, prestaron sus peritos a la polic¨ªa para comprobar la ilegalidad del material incautado. Luego, la SGAE almacen¨® los 500.000 discos requisados
La "mayor operaci¨®n europea contra la pirater¨ªa", seg¨²n la polic¨ªa, acab¨® como la gran pifia contra la pirater¨ªa europea.
"Los 14 detenidos", seg¨²n la nota policial del 1 de julio, nunca lo fueron. El "sueco" era una sueca, ama de casa. El "cubano", un ingeniero de telecomunicaciones. El software con el que la polic¨ªa comprob¨® la ilegalidad de los CD v¨ªrgenes estaba descatalogado desde 2000. Los peritos policiales encargados de certificar el contrabando del material estaban (y est¨¢n) a sueldo de los denunciantes, la sociedad de Autores (SGAE) y la Sociedad Fonogr¨¢fica (AFYVE). "No existen peritos independientes. Para que se imparta justicia -somos v¨ªctimas del delito- debemos aportar los t¨¦cnicos que certifiquen la ilegalidad", declara a Ciberp@¨ªs Pedro Farr¨¦, de la Oficina de Defensa de la Propiedad Intelectual de la SGAE.
Los 500.000 CD y DVD v¨ªrgenes incautados el 30 de junio han sido devueltos tres meses despu¨¦s a sus propietarios. Para ello tuvieron que ir a recogerlos al guardamuebles pagado por uno de los denunciantes: la SGAE, que prefiere "pagar el guardamuebles que tener el material en la calle", dice Farr¨¦.
"La banda organizada de falsificaci¨®n y venta de discos y pel¨ªculas pirateados importados de Taiwan", seg¨²n la nota policial, resulta que fabrica un CD virgen que impide la pirater¨ªa.
La gran chapuza comenz¨® el 30 de junio. Ese d¨ªa la polic¨ªa entr¨® en locales de CD World en Barcelona y Badalona y en la oficina y el domicilio particulares de un accionista. Al d¨ªa siguiente se emite el comunicado policial sobre "la mayor redada en Europa contra la pirater¨ªa", con 14 detenidos, que ni siquiera hab¨ªan declarado todav¨ªa en comisar¨ªa. "Esta operaci¨®n supone el m¨¢s duro golpe a la pirater¨ªa en los ¨²ltimos tiempos, ya que esta empresa era la mayor distribuidora a nivel mundial de reduplicadoras y distribuci¨®n masiva tanto de software como de hardware para vencer las medidas de seguridad de los DVD y convertirlos a CD para su distribuci¨®n y venta".
"La magnitud de esta empresa era tal que se sabe que una de cada tres grabadoras intervenidas el a?o pasado en Espa?a pertenec¨ªan a esta organizaci¨®n". El comunicado policial sigui¨® en la web de la SGAE hasta el d¨ªa en que la juez orden¨® devolver los 500.000 CD a sus propietarios.
La SGAE insiste. "El auto se refiere a la devoluci¨®n de una parte del material, porque Philips ahora ha llegado a un acuerdo con CD World", dice Farr¨¦. "Se mantienen los delitos contra la propiedad intelectual; el archivo del caso es parcial".
"Negamos absolutamente que se haya pactado con CD World", dice la portavoz de Philips. "Nos vimos involucrados. El juzgado nos pidi¨® que analiz¨¢ramos si los 500.000 CD cumpl¨ªan con la patente en origen. Parte del material se mand¨® a Holanda, donde realizaron pruebas microsc¨®picas y se certific¨® que el material era legal". O sea, que CD World compr¨® a un fabricante que paga por la licencia.
El caso se basaba en dos delitos. Uno contra la propiedad industrial (importaci¨®n de CD ilegales sin pagar licencia). Otro contra la propiedad intelectual: la venta y distribuci¨®n de reduplicadoras a redes de pirater¨ªa dedicadas a la comercializaci¨®n de copias piratas de CD y DVD.
Philips no ha presentado, es la ¨²nica a quien por ley le corresponde, denuncia por un delito contra la propiedad industrial. El registro policial se produjo a instancias de SGAE y AFYVE, dos sociedades que gestionan los derechos de autor.
La primera parte ha sido desmontada, pero el culebr¨®n no ha terminado. "Todav¨ªa se tiene que probar si la actividad de empresa es ilegal porque vend¨ªa a redes de pirater¨ªa que a su vez comercializaban copias ilegales de CD", dice Farr¨¦.
"Es absolutamente falso. Somos distribuidores mayoristas de material inform¨¢tico que se vende a grandes superficies y tiendas, y nunca al usuario final del producto, y menos a¨²n a piratas", asegura Kim Sorensen, gerente de CD World.
Sus cinco principales clientes son, seg¨²n una auditor¨ªa externa realizada por la empresa en julio: Carrefour, FNAC, Jump, Personal Computer y Ei System. La misma auditor¨ªa muestra que el negocio "de la mayor distribuidora mundial de reduplicadoras" consisti¨® en el 0,41% del ejercicio de 2002. Y que el 95,67% de sus ventas corresponden a productos no relacionados con la duplicaci¨®n de discos. CD World estima en 6 millones de euros las p¨¦rdidas por la intervenci¨®n policial.
Para mayor escarnio, el ¨²ltimo producto de CD World combate la pirater¨ªa. "Quiz¨¢s nos persiguen por ello. CD-DO impide reproducir m¨²sica, dificulta el negocio del top manta y evita, o al menos disminuye, el canon que pagan los CD y DVD grabables y Minidisk", dice Sorensen. Un canon que los fabricantes pagan desde septiembre para compensar a los autores por la copia privada.
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