?Qui¨¦n dispar¨® contra Couso?
Tele 5 record¨® al c¨¢mara muerto en Irak a consecuencia de un ataque estadounidense
?Fue un lamentable error o, por el contrario, formaba parte de un intento deliberado para acallar a la prensa que cubr¨ªa el conflicto de la capital de la guerra? ?Se han convertido los periodistas en enemigos? ?stos son algunos de los interrogantes que trat¨® de revelar ayer el reportaje de investigaci¨®n de Tele 5 de Hotel Palestina. 8 de abril, y que desde entonces est¨¢n sin respuesta. Precisamente ayer se cumpl¨ªan seis meses de la muerte de Jos¨¦ Couso, c¨¢mara de la cadena privada. El trabajo, de 50 minutos, fue un an¨¢lisis cronol¨®gico de los hechos que rodearon el bombardeo del hotel Palestina en Bagdad, lugar en el que se alojaba la mayor parte de la prensa internacional.
Un equipo de Tele 5 viaj¨® hasta Bagdad para reconstruir el d¨ªa fat¨ªdico y los anteriores. Contrastaron las opiniones y fueron a los lugares de los hechos. Ante las c¨¢maras, los compa?eros de Couso recordaron sus impresiones sobre la guerra y su trabajo. "Ves un mont¨®n de periodistas entrando en un pa¨ªs y te preguntas si esta vez vas a ser t¨² el que no va a salir", afirm¨® Antonio Baquero, de El Peri¨®dico de Catalu?a.
Tal y como explic¨® el narrador del reportaje, en la guerra, la primera medida de seguridad para los periodistas es la elecci¨®n del lugar en el que van a vivir. "Se dice que la CNN ha reservado una planta del Palestina. Se cree que EE UU no va a bombardear un hotel en el que est¨¢ la CNN", cont¨® ?ngeles Espinosa, enviada de EL PA?S. "Era una zona civil", puntualiz¨® Baquero.
Adem¨¢s de estos testimonio, Hotel Palestina cont¨® con las emotivas declaraciones del compa?ero de Couso Jon Sistiaga (Tele 5), Carlos Hern¨¢ndez (Antena 3), Olga Rodr¨ªguez (Ser), M¨®nica G. Prieto (El Mundo), Paul Pasquale (Reuters) o Taysir Alouni (Al Jazeera), entre otros.
El reportaje apunt¨® las numerosas contradicciones en las que incurri¨® el Ej¨¦rcito de Estados Unidos al justificar el ataque y las declaraciones posteriores de George Bush: "Me parece que la guerra conforma un lugar peligroso. Nadie matar¨ªa a un periodista intencionadamente", o de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar: "El Gobierno de EE UU ha dicho que ha sido un error y nosotros creemos al Gobierno de EE UU".
Sistiaga cre¨ªa que en el ataque contra Couso y los periodistas de Reuters hubo una intenci¨®n "deliberada". Otro periodista declar¨® que "los norteamericanos no quer¨ªan testigos de la masacre que se iba a producir'.
El reportaje al final llega a una conclusi¨®n: de los 16 periodistas muertos en Irak, siete fallecieron a causa de los ataques de las tropas estadounidenses. En el hotel Palestina, seis meses despu¨¦s, a¨²n permanece la mancha de sangre de Couso y restos de metralla.
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