Conservas artesanales

Jos¨¦ V¨¢zquez, director gerente de Usisa, la Uni¨®n Salazonera Isle?a S.A., de Isla Cristina (Huelva), considera que la clave del ¨¦xito de su empresa est¨¢ en el proceso artesanal de la producci¨®n. Las conservas de Usisa se hacen siguiendo viejas recetas. "El consumidor aprecia que nuestros productos se han fabricado con la materia prima, el aceite, la sal y punto. Ni colorantes ni nada. La calidad es el mejor arma para competir", dice V¨¢zquez.

Usisa tiene en el mercado conservas como los filetes de mojama de at¨²n -especialidad en la que son l¨ªderes en el mercado nacional-, de caballa, de melva y de sardinas, entre otras. Hay un momento del a?o, en torno al mes de junio, en el que cinco barcos de Isla Cristina, uno de los principales puertos pesqueros de la provincia onubense, trabajan exclusivamente para Usisa, sobre todo en la captura de caballa. La empresa importa otros pescados desde Marruecos y Mauritania, seg¨²n Jos¨¦ V¨¢zquez.

Su principal mercado es Andaluc¨ªa, pero tambi¨¦n vende en Valencia y Barcelona

Usisa mueve 2.000 toneladas anuales de at¨²n. Adem¨¢s, cuenta con un departamento de sardinas saladas, de las que una importante parte de la producci¨®n se est¨¢ exportando a Francia.

Usisa, pues, fundamenta su pol¨ªtica comercial en la tradici¨®n. La empresa proporciona trabajo a unas 280 personas, de las que aproximadamente 240 son mujeres. "La mayor parte del personal es femenino, est¨¢n en la planta. Se trata de una historia que viene de antiguo: el hombre en la mar y la mujer en la f¨¢brica. Tambi¨¦n se dice que ellas tienen mejores manos para manipular el pescado. Los hombres se dedican aqu¨ª a llevar y traer mercanc¨ªas, a labores de mantenimiento y hay alguno en las oficinas", se?ala Jos¨¦ V¨¢zquez.

La mayor¨ªa de las empleadas son de Isla Cristina, aunque tambi¨¦n hay algunas que llegan diariamente a trabajar a Usisa desde otras localidades cercanas, como Lepe, Villanueva de los Castillejos, Villablanca, San Silvestre o Trigueros.

V¨¢zquez subraya que una empresa, para que funcione bien, debe contar con un buen ambiente laboral. En este sentido, Usisa tiene una psic¨®loga que atiende a los trabajadores con el fin de optimizar los recursos.

Esta empresa se cre¨® hace 30 a?os, en marzo de 1973, por el empuje de Juan V¨¢zquez, un veterano empresario de Isla Cristina, actual presidente del Consejo de Administraci¨®n. "Mi padre siempre ha sido un hombre absolutamente entregado a la empresa", explica Jos¨¦ V¨¢zquez. Ese a?o se fusionaron 24 peque?as firmas dedicadas al salaz¨®n para formar una cooperativa. Posteriormente, hacia 1980, Usisa irrumpi¨® en el mercado de las conservas tras adquirir la marca El Decano, de Isla Cristina. Y continu¨® su crecimiento con la compra de la marca conservera Tejero, que, seg¨²n Jos¨¦ V¨¢zquez, "vende muy bien en la provincia de Huelva".

Usisa es una empresa familiar en la que los V¨¢zquez tienen m¨¢s del 90% de las acciones. Pero junto a ese apego a la tradici¨®n hay una decidida apuesta por la modernidad y por el crecimiento del negocio. Las antiguas instalaciones de la empresa, ubicadas en el casco urbano de Isla Cristina, se quedaron peque?as para el volumen de trabajo. Por este motivo, Usisa adquiri¨® 80.000 metros cuadrados de terreno en 2001en La Redondela, una pedan¨ªa de Isla Cristina, de los que 12.500 se dedicaron a nave industrial, tras una inversi¨®n de once millones de euros.

Usisa tiene su principal mercado en Andaluc¨ªa, pero tambi¨¦n distribuye sus productos en Valencia y Barcelona. Adem¨¢s, sus directivos asisten cada a?o a varias ferias europeas del sector. Entre los proyectos inmediatos de la empresa figura la comercializaci¨®n de las conservas en tarros de cristal.

Usisa, junto con dos empresas salazoneras de Ayamonte (Huelva) y tres de Barbate (C¨¢diz), constituy¨® a finales de septiembre en Sevilla el Consejo Regulador de la Denominaci¨®n Espec¨ªfica Caballa y Melva de Andaluc¨ªa. "El objetivo reside en distinguirnos de otras empresas del sector, pues nos hemos unido al distintivo de calidad de la Junta de Andaluc¨ªa y hemos creado un reglamento al estilo del que tienen los consejos reguladores del jam¨®n o el vino. Se trata de una labor muy importante, porque ni en Galicia, con el mejill¨®n, tienen ese reglamento. Se trata de un trabajo de autoexigencia, porque nosotros esperamos que la gente valore cada vez m¨¢s las conservas", explica Jos¨¦ V¨¢zquez, quien a?ade: "La creaci¨®n de ese consejo regulador ha sido muy bien acogido, sobre todo, por las autoridades de nuestra comunidad. Nos ha animado mucho el propio consejero de Agricultura y Pesca, Paulino Plata".

Lo importante, en definitiva, radica en la calidad. Ah¨ª est¨¢ el caballo de batalla para ganar el futuro, seg¨²n Jos¨¦ V¨¢zquez, en un sector en el que se libra desde hace a?os una enorme competencia. "El aceite de oliva hace una mezcla con el pescado azul de un valor nutritivo muy grande. Y eso est¨¢ en las conservas", concluye Jos¨¦ V¨¢zquez.