Una batalla escolar que moviliza un barrio
Los vecinos de Loranca, en Fuenlabrada, llevan cinco a?os pidiendo m¨¢s colegios para una zona con alta tasa de natalidad
El barrio fuenlabre?o de Loranca est¨¢ envuelto en los aires de los a?os setenta. ?Los vecinos lucen moda hippie? ? Los legendarios seiscientos circulan por sus calles? No. Lo que sugiere una vuelta a esa ¨¦poca son las protestas de cientos de padres ante las sedes de la Administraci¨®n, las pancartas colgadas entre los ¨¢rboles del parque, el atrincheramiento en recintos oficiales y la protesta a pie de calle en manifestaciones multitudinarias.
El motivo de la lucha fue, y volver¨¢ a ser desde hace cinco a?os, la construcci¨®n de colegios p¨²blicos en un barrio que triplica la tasa de natalidad de toda la regi¨®n. El centro educativo que ha comenzado a funcionar este curso -el cuarto del barrio- ostenta un doble r¨¦cord: fue construido en tan s¨®lo cinco meses debido a la presi¨®n de los padres, directores de otros colegios y grupos de izquierda en el Ayuntamiento, y adem¨¢s naci¨® lleno, ya que las aulas de educaci¨®n infantil albergan a una tropa de 500 alumnos.
"Como miembro de la asociaci¨®n de padres ten¨ªa que protestar porque creo en la educaci¨®n"
Los desvelos de la Plataforma por la Escuela P¨²blica de Loranca para conseguir el cuarto colegio del barrio han contrastado con la lentitud de reflejos de la Administraci¨®n auton¨®mica, seg¨²n la concejal de Educaci¨®n de Fuenlabrada, Carmen Bonilla. "Nosotros ya nos dimos cuenta en el a?o 2000 de que hab¨ªan nacido 634 ni?os a los que habr¨ªa que escolarizar tres a?os despu¨¦s, y por eso solicitamos una reuni¨®n urgente con la Comunidad de Madrid", rememora la edil.
El arranque de las negociaciones auspiciaba buenos augurios para los afectados: "Ese mismo a?o la inspecci¨®n emiti¨® un informe favorable a la construcci¨®n del cuarto colegio para Loranca y en junio de 2001 el Ayuntamiento cedi¨® el terreno para que estuviese listo en 2002", a?ade. Pero en lugar de disponer del ansiado centro escolar, el curso 2002-2003 arranc¨® con una docena de barracones ocupados por 500 ni?os.
Esa estampa fue la que crisp¨® a los padres, la que encendi¨® la espita de una guerra que se prolongar¨ªa durante meses. Mientras que los chavales pasaban el invierno atrincherados en las "aulas transitorias", sus padres se organizaban en una especie de ej¨¦rcito y decid¨ªan en qu¨¦ frentes presentar¨ªan batalla: las calles del barrio, la Consejer¨ªa de Educaci¨®n y la mism¨ªsima Puerta del Sol. "Hac¨ªa mucho tiempo que no ve¨ªa a la gente tan unida por una misma causa; fueron meses muy emocionantes", afirma el edil.
Carmen Seco piensa en alto mientras sonr¨ªe orgullosa. Esta mujer de 36 a?os, madre de dos hijos, se enrol¨® en las filas de los damnificados a pesar de que esa guerra no le afectaba directamente. "Como miembro de la Asociaci¨®n de Madres y Padres del colegio Vel¨¢zquez, sent¨ªa que deb¨ªa estar ah¨ª defendiendo la escuela p¨²blica, porque es en lo que creo", afirma sin titubeos.
El aliento del marido de Carmen y de sus hijos, de 8 y 14 a?os, sirvi¨® a esta vecina para sacar fuerzas de flaqueza y sobre todo tiempo libre que ceder a la causa. "Curs¨¦ las denuncias de los padres, convoqu¨¦ reuniones en mi colegio, me encerr¨¦ con los afectados en la Junta de Distrito y acud¨ª a cuantas manifestaciones se celebraron", recita de carrerilla esta mujer. Incluso estuvo a punto de perder sus vacaciones cuando responsables del Gobierno regional fijaron una fecha en pleno mes de julio para reunirse con los portavoces de la Plataforma en Defensa de la Escuela P¨²blica. "A m¨ª me dio la impresi¨®n de que nos recib¨ªan para callarnos la boca, pero que ni siquiera sab¨ªan d¨®nde estaba el barrio de Loranca ni cu¨¢les son sus problemas", afirma Seco.
Despu¨¦s de aquel verano, los padres, apoyados por el equipo de gobierno municipal, decidieron reforzar sus protestas: confeccionaron una gran pancarta y la colgaron a la entrada del barrio para recordar a vecinos y visitantes que el Gobierno regional no cumpl¨ªa sus compromisos; celebraron concentraciones multitudinarias en los terrenos cedidos por el Consistorio y se reunieron peri¨®dicamente para conocer los pormenores de la negociaci¨®n con los pol¨ªticos regionales.
En la labor de informaci¨®n a la comunidad educativa, To?i Marzo jug¨® un importante papel. Su labor como presidenta de la asociaci¨®n de padres de una escuela infantil del barrio consisti¨® en convocar reuniones con las familias, colocar carteles, recoger miles de firmas para enviarlas a la Comunidad de Madrid y bucear en el ciberespacio para crear una direcci¨®n de Internet donde poder depositar las quejas de los afectados.
Volver a empezar otra vez
Los padres y pol¨ªticos que lucharon por conseguir el cuarto centro educativo de Loranca est¨¢n orgullosos del pasado, pero miran con preocupaci¨®n el futuro. "Para el curso pr¨®ximo hay otros 600 probables escolares cuyos padres ya nos est¨¢n pidiendo plaza", ilustra la edil de Educaci¨®n, Carmen Bonilla.
El ¨²nico instituto del barrio tambi¨¦n empieza a dar s¨ªntomas de sobrada plenitud, por eso los miembros de la Plataforma por la Escuela P¨²blica han vuelto a organizarse para exigir la construcci¨®n de un quinto colegio para el a?o que viene y un instituto en un plazo m¨¢ximo de dos a?os. "Con los precedentes que existen ya no confiamos demasiado en que el Gobierno regional responda a la primera, as¨ª que tendremos que hacer un seguimiento exhaustivo a las gestiones para conseguir el nuevo centro escolar", afirma Bonilla.
La presidenta del AMPA del colegio Vel¨¢zquez, Carmen Seco lo tiene claro. "Me movilic¨¦ hace meses y lo volver¨¦ a hacer si es necesario porque, si quieres calidad en la ense?anza de tus hijos, o te mueves, o te olvidan y pasas a la historia", sentencia.
To?i Marzo, presidenta de la asociaci¨®n de Padres de una escuela infantil, recuerda los momentos m¨¢s duros de la protesta. "Mi trabajo me imped¨ªa poder hacer m¨¢s por la plataforma", aclara esta mujer de 38 a?os.
Tras un invierno de "acciones reivindicativas sin respuesta oficial", la plataforma convoc¨® un encierro el 14 de marzo de 2003 al que se sum¨® el propio alcalde, Manuel Robles, del PSOE. Veinte d¨ªas despu¨¦s arranc¨® la construcci¨®n de cuarto colegio de Loranca, con un a?o de retraso pero suficiente velocidad para llegar a tiempo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Colegios p¨²blicos
- Fuenlabrada
- Asociaciones vecinos
- APAS
- Colegios
- Comunidades aut¨®nomas
- Orden p¨²blico
- Protestas sociales
- Malestar social
- Comunidad educativa
- Administraci¨®n local
- Provincia Madrid
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Seguridad ciudadana
- Pol¨ªtica educativa
- Centros educativos
- Comunidad de Madrid
- Problemas sociales
- Espa?a
- Administraci¨®n p¨²blica
- Justicia
- Sociedad
- Ense?anza p¨²blica
- Sistema educativo
- Educaci¨®n