Chirac habla en nombre de Schr?der en un gesto hist¨®rico en la Uni¨®n

Por primera vez en la historia de la Uni¨®n, un l¨ªder europeo habl¨® ayer en nombre de otro durante una cumbre. El gesto fue mucho m¨¢s significativo porque el arreglo lo protagonizaron los dos pa¨ªses m¨¢s potentes de Europa: Francia y Alemania. "He sido una especie de portavoz del canciller, como ¨¦l podr¨ªa hacerlo tambi¨¦n en el futuro conmigo", declar¨® despu¨¦s el presidente franc¨¦s, Jacques Chirac.

"Ha sido un testimonio de confianza y amistad", agreg¨®. Es la prueba m¨¢xima de la salud que exhibe el eje franco-alem¨¢n. Reclamados por la importante sesi¨®n en el Bundestag para debatir las reformas sociales, ni el canciller alem¨¢n, Gerhard Schr?der, ni su ministro de Exteriores, Joschka Fischer, pudieron asistir a la segunda jornada de la cumbre europea. Chirac fue su voz. No s¨®lo plante¨® cuestiones avaladas por ambos, sino que tambi¨¦n expuso razonamientos en nombre personal de Schr?der. "No he tenido ninguna dificultad en hacerlo", dijo, "porque eran observaciones id¨¦nticas a las que Francia quer¨ªa hacer".

La escenificaci¨®n lleg¨® tan lejos que a las tres sillas reservadas en la mesa para la representaci¨®n francesa (la de Chirac y las de sus ministros de Exteriores y Finanzas) se a?adi¨® a petici¨®n del presidente franc¨¦s una cuarta para el consejero pol¨ªtico de Schr?der.

El in¨¦dito gesto, aunque anunciado d¨ªas atr¨¢s, dej¨® desconcertados y descolocados al resto de los l¨ªderes. Aznar declar¨® que le parece "fundamental" que el eje franco-alem¨¢n funcione, pero que debe actuar de forma "positiva para la construcci¨®n europea". "No hab¨ªa pasado nunca", agreg¨®, "y me ha parecido interesante".

?Se dejar¨ªa usted, su pa¨ªs, representar por otro en una cumbre? La pregunta se plante¨® a varios l¨ªderes. ?Se ver¨ªa usted representado por Espa?a?, espetaron los periodistas al portugu¨¦s Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso y al polaco Leszek Miller. "Trabajamos bien con Espa?a", respondi¨® el portugu¨¦s, pero matiz¨® que no le gustan "los miniclubs dentro del club". Miller se lo tom¨® con m¨¢s humor: "Me lo puedo imaginar, porque tenemos una imaginaci¨®n sin l¨ªmites".

Otros tambi¨¦n acompa?aron con una media sonrisa forzada la sugerencia. "Podr¨ªa estar bien hacerme representar por Chirac", se?al¨® el luxemburgu¨¦s Jean-Claude Juncker. "Si Schr?der nos lo hubiera pedido, tambi¨¦n nosotros le habr¨ªamos representado", coment¨® la ministra austriaca Benita Ferrero-Waldner. Con mucha m¨¢s retranca, el belga Guy Verhofstadt cont¨® que le hab¨ªan interrumpido durante la cumbre para reclamar su presencia en el Parlamento federal de B¨¦lgica por un problema presupuestario: "Ser¨ªa mejor quedarme yo aqu¨ª y enviar a Chirac a mi Parlamento".