Moda de Occidente, ritos de Oriente
Con su abrigo corto de rombos blancos y rojos, sus zapatos de alta aguja y su peque?o bolso negro de Dior, Ashma Asad compon¨ªa junto a su esposo, el presidente sirio, enfundado en un ligero traje beige, una imagen decididamente pop y occidental. Todo resulta armonioso con la vigente moda formal en esta joven pareja de antiguos estudiantes en el Reino Unido que se entienden perfectamente en ingl¨¦s con los Reyes.
La calle puso, entre tanto, el contrapunto oriental de una abigarrada escena en la que no faltaron los contraluces caracter¨ªsticos de la Damasco recoleta ni la solemne arquitectura y los aromas embriagadores de una ciudad imprescindible para la historia del mundo ¨¢rabe y de las relaciones entre Europa y Asia. Fueron las masas las que con sus manifestaciones enfervorizadas de adhesi¨®n al l¨ªder, marcaron las verdaderas distancias entre las dos culturas y ritos pol¨ªticos representados, respectivamente, por los Reyes Juan Carlos y Sof¨ªay el presidente Bachar el Asad y su esposa, Ashma.
Todo culmin¨® en el bazar de las especias, donde los reyes y sus anfitriones llegaron a pie tras visitar la Gran Mezquita Omeya, el principal templo isl¨¢mico de Damasco, que es tambi¨¦n objeto de devoci¨®n para los cristianos porque, seg¨²n la tradici¨®n, conserva en una urna la cabeza de San Juan Bautista.
Aplausos y v¨ªtores comenzaron a sonar en cuanto los l¨ªderes reaparecieron en la puerta que mira hacia el bazar y las ruinas romanas que lo enmarcan. Media hora despu¨¦s, cuando el incienso y la canela el clavo o el piment¨®n hab¨ªan conquistado las pituitarias, el entusiasmo rompi¨® todas las medidas habituales de seguridad y los Reyes caminaron apretujados entre una muchedumbre que se abr¨ªa paso a empujones y corr¨ªa para corear: "Con el esp¨ªritu, el coraz¨®n y la mano, estamos contigo, El Asad".
Amnist¨ªa Internacional sigue denunciado que, despu¨¦s de la llegada al poder de el Asad, "los sirios contin¨²an privados de sus derechos civiles y pol¨ªticos", que muchos exiliados que volvieron han sido detenidos y vueltos a expulsar y que las c¨¢rceles siguen guardando "cientos de sirios, palestinos y otros presos pol¨ªticos".
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