Uribe pone a prueba su popularidad con un refer¨¦ndum para reformar Colombia

El Congreso colombiano probablemente hubiera aprobado la mayor¨ªa de las enmiendas constitucionales propuestas por ?lvaro Uribe en el refer¨¦ndum del pr¨®ximo s¨¢bado, antesala de importantes ajustes fiscales y transformaciones pol¨ªticas, pero el presidente apost¨® por su popularidad y por la consulta para, entre otras razones, evitar negociaciones que le obligar¨ªan a limitar los cambios. La oposici¨®n protesta: el gobernante, aplaudido por el 75% de sus compatriotas, seg¨²n Gallup, abusa p¨¦rfidamente de la democracia para imponer un autoritarismo en el que el Ejecutivo ahogar¨¢ las prerrogativas del legislativo y del Estado de derecho.

El lema del refer¨¦ndum -"contra la politiquer¨ªa y la corrupci¨®n"- es atractivo en una naci¨®n harta de sinverg¨¹enzas y prebendas, y sus 15 preguntas, el punto de arranque de cambios en el desprestigiado Congreso, de las inversiones estatales o en la cuant¨ªa de los salarios p¨²blicos y pensiones. La oposici¨®n denuncia truco: "Como todos estamos tan aburridos, tan exacerbados con los actos terribles e irracionales de los grupos alzados en armas, pues ocurre que la gente est¨¢ dispuesta a que le rebajen el salario siempre que derroten militarmente a la guerrilla", advirti¨® el senador Carlos Gaviria. "Si reducen a las autodefensas (paramilitares), pues que nos congelen las pensiones".

El conservador presidente colombiano, investido el 7 de agosto de 2002, despu¨¦s de haber sido elegido en la primera vuelta del 26 de mayo con el 53% de los votos, subraya que sus adversarios exageran o mienten. Contrariamente, seg¨²n argumenta, se trata de fortalecer la democracia y acabar con pr¨¢cticas legislativas corruptas, apuntillar privilegios espurios y establecer una austeridad financiera que facilite el ahorro, impida la bancarrota nacional y envie se?ales de confianza a los mercados internacionales e instituciones de cr¨¦dito. "Si ganamos podremos negociar mejor la reestructuraci¨®n de la deuda, los intereses de los pr¨¦stamos, y estaremos en mejores condiciones para combatir a las guerrillas", dijo una fuente oficial.

El refer¨¦ndum plantea reducir de 268 a 218 los esca?os del Congreso y modificar el acceso al hemiciclo, despoja de derechos pol¨ªticos a los culpables de fraude al Estado, anula las suplencias de diputados y senadores, que devengan salarios sin haber sido elegidos, reduce las pensiones de los congresistas, congela durante dos a?os los salarios de los empleados p¨²blicos y elimina los reg¨ªmenes fiscales especiales. Las votaciones de los cargos p¨²blicos deber¨¢n efectuarse con car¨¢cter nominal, uno por uno, con nombres y apellidos, para que los electores conozcan las posiciones de los elegidos y se acabe con los pactos secretos y de camarilla.

Uribe suprime las auditorias de los dineros p¨²blicos a cargo de las autoridades locales, imput¨¢ndoles ineficacia, o corrupci¨®n en muchos casos, y transfiere sus competencias a la Contralor¨ªa General de la Rep¨²blica. Asimismo, se congelan durante dos a?os los gastos de funcionamiento de los 32 gobiernos y entidades territoriales de Colombia.

Un total de 25 millones de personas podr¨¢n pronunciarse en la consulta y debe hacerlo el 25% del padr¨®n, equivalente a 6,2 millones de papeletas, para que sea validada. Como los votos negativos suman, la oposici¨®n llama a la abstenci¨®n a fin de que no se alcancen los 6,2 millones de sufragios. Una derrota de la propuesta presidencial castigar¨ªa su imagen, hasta ahora bastante intacta, a pesar de los denunciados excesos contra varias organizaciones no gubernamentales y defensores de los derechos humanos, a los que calific¨® de "c¨®mplices del terrorismo".