Evoluci¨®n
Se comporta la derecha en el poder como si las opciones de la oposici¨®n, a la hora de conformar la evoluci¨®n colectiva, fuesen intrones, esas vastas regiones del ADN que no codifican informaci¨®n, que no se expresan como prote¨ªnas, una abundante basura sin prop¨®sito frente a los tramos activos, los exones. Se comporta as¨ª por razones a la vez gen¨¦ticas y antropol¨®gicas, quiero decir, hist¨®ricas e ideol¨®gicas. Nada en su tradici¨®n ni en su estrategia la invita a otra actitud que no sea aquella de Giulio Andreotti cuando dijo que gobernar no es solucionar problemas, sino hacer callar a quienes los provocan. Tal forma de hacer, muy confortable, exhibe sus contradicciones en cuanto los proyectos desbordan, por su envergadura, las pol¨ªticas de vuelo corto. Ocurre, por ejemplo, con el AVE, ese tren de alta velocidad que el PP usa descaradamente como propaganda y que monopoliza como si fuese cosa propia, hasta el extremo de mostrar sus verg¨¹enzas dom¨¦sticas en p¨²blico con la plancha que el ministro de Fomento, ?lvarez Cascos, lanz¨® a la cabeza del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y de la comisaria europea Loyola de Palacio por haber tenido la osad¨ªa de garantizar ante la prensa la llegada de la l¨ªnea en 2007 a tierras valencianas. El AVE, que ha de llegar antes a Albacete que a ninguna otra parte porque as¨ª lo acord¨® Zaplana con Jos¨¦ Bono, se ha proyectado, literalmente, por encima de comarcas como La Ribera o L'Horta, seriamente afectadas por su trazado. Y cuando sus alcaldes reclaman di¨¢logo y debate, Camps amenaza al socialista Joan Ignasi Pla de que lo har¨¢ responsable si el veloz ferrocarril no llega de Madrid en tiempo electoral, como ¨¦l ha programado. Algo parecido sucede con el Plan Hidrol¨®gico Nacional y el trasvase del Ebro. El Gobierno se planta en Bruselas a pedir financiaci¨®n con media Espa?a en contra y en Europa se preguntan por qu¨¦ no se ha pactado una obra tan gigantesca. Tambi¨¦n aqu¨ª, si falla, la culpa ser¨¢ de la oposici¨®n, aunque, como ha dicho Jordi Pujol con bastante raz¨®n, tendr¨¢ que negociarse el plan el a?o que viene, tras las elecciones. Por m¨¢s que quiera alguien erigirse en un gen ego¨ªsta, la vida social tiende a la complejidad evolutiva.
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