Las universidades valencianas cierran la reforma de sus Estatutos con la vista puesta en Europa
El nuevo marco legal de la Universitat de Val¨¨ncia consagra la normalizaci¨®n del biling¨¹ismo
Rumbo a Europa, con la vista puesta en la construcci¨®n del espacio com¨²n de ense?anza superior que empezar¨¢ a caminar en el curso 2005-2006 con la puesta en marcha del cambio de estructura de los planes de estudio. Con la aprobaci¨®n del proyecto de estatutos reformados de la Universitat de Val¨¨ncia, el jueves pasado, las cinco universidades p¨²blicas de la Comunidad Valenciana cierran un largo periodo de casi dos a?os de adaptaci¨®n de sus normas y de renovaci¨®n de sus ¨®rganos de gobierno impuesto por "imperativo legal" de la controvertida Ley Org¨¢nica de Universidades (LOU) aprobada el 11 de diciembre de 2001 tras un breve tr¨¢mite parlamentario "de urgencia" instruido por el Gobierno de Aznar. El temor expresado entonces por la Conferencia de Rectores de las Universidades Espa?olas (CRUE) de que la actividad de los campus estar¨ªa "condicionada" en los siguientes a?os por las reformas y las elecciones obligatorias a rector se ha cumplido con creces: un a?o y 11 meses despu¨¦s de la aprobaci¨®n de la LOU la mitad de las 48 universidades p¨²blicas a¨²n no ha cerrado su proceso de reforma estatutaria.
De hecho, el factor de laboriosidad y cansancio fue precisamente uno de los aludidos el jueves por el rector Francisco Tom¨¢s, tras el respaldo masivo del claustro de la Universitat al nuevo marco jur¨ªdico (181 votos, 13 en contra y ninguna abstenci¨®n) para explicar el grado de "consenso" y de "participaci¨®n" alcanzado en la decana instituci¨®n universitaria valenciana donde -a priori- parec¨ªa m¨¢s dif¨ªcil por el tama?o de su estructura integrada por 60.000 personas entre alumnos, profesores y administrativos.
"Hemos dado una lecci¨®n de democracia como m¨¦todo de participaci¨®n, y no como la fuerza de los votos", sentenci¨® el rector Tom¨¢s, al t¨¦rmino de la votaci¨®n que di¨® luz verde a "un texto muy negociado", que transform¨® la discusi¨®n del anteproyecto inicial que ten¨ªa "m¨¢s de 2.000 enmiendas" en un debate final de tres d¨ªas entorno "a s¨®lo un centenar de enmiendas no fundamentales", como coment¨® Juan Carlos de Miguel, miembro de la Comisi¨®n de Estatutos. "Esto demuestra las ganas de los universitarios por superar los procesos de reforma impuestos por la LOU, para ponerse a trabajar en lo suyo, la docencia y la investigaci¨®n", resumi¨® Tom¨¢s.
"Las ganas de hacer de la dificultad una virtud" ha sido, de hecho, el com¨²n denominador al que se hab¨ªan comprometido en origen los cinco equipos rectorales valencianos al inicio del proceso. De ese pacto entre caballeros naci¨® a principios de 2002 la vocaci¨®n asumida de convertir un instrumento jur¨ªdicoadministrativo nacido de la primera ley democr¨¢tica de la universidad espa?ola -la extinta Ley de Reforma Universitaria de 1982- que se hab¨ªa aquilosado por tanto con los a?os, en un potente software que "imprima flexibilidad y operatividad a la organizaci¨®n, docencia e investigaci¨®n del sistema de ense?anza superior". Los equipos vicerrectorales encargados de llevar a buen puerto la reforma adelantaron en febrero, en entrevista con este peri¨®dico, su firme prop¨®sito de que el esqueleto com¨²n de "los nuevos estatutos sirviera para proyectar y catapultar una imagen de singuralidad y propia en cada universidad" combinando la voluntad de "anticiparse" a la compleja arquitectura sobre la que se edificar¨¢ el Espacio de Ense?anza Europeo (EEE) establecido en la famosa Declaraci¨®n de Bolonia (1999) que fija la convergencia en el 2010.
Fiel a ese pacto, el resultado del proceso de reforma estatutaria en el Sistema Universitario P¨²blico Valenciano (SUP) ha dejado impreso en cada uno de los cinco estatutos aprobados por su respectivos claustros un nuevo copyrigth o "imagen corporativa propia" en cada universidad, cumpliendo as¨ª con el triple objetivo de: anticiparse a los cambios europeos, salir a competir por un mercado estudiantil en franco retroceso -con una ca¨ªda oficial de la matr¨ªcula del 25% el ¨²ltimo curso-, y en un escenario de fuerte competencia como el actual donde el Gobierno popular ha apostado claramente en la LOU por la liberalizaci¨®n y/o privatizaci¨®n de titulaciones y centros, seg¨²n los informes jur¨ªdicos elaborados por la CRUE. As¨ª lo han hecho todas desde que se aprobaran los primeros estatutos en la Jaume I de Castell¨®n el 5 de junio, seguida de la Polit¨¦cnica de Valencia, y de las universidades de Alicante y Miguel Hern¨¢ndez en julio.
Pero, adem¨¢s, la Universitat de Val¨¨ncia -donde el uso de la lengua propia ha sido un tradicional foco de conflicto pol¨ªtico y social- ha tratado tambi¨¦n de "superar una etapa en la que se buscaban unas reglas para la normalizaci¨®n ling¨¹¨ªstica", como explic¨® el vicerrector Joan Carles Carbonell, por otra en la que se apuesta "por el uso del biling¨¹ismo consagrado en la Constituci¨®n y en el Estatut de Autonomia", estableciendo un servicio permanente de pol¨ªtica ling¨¹¨ªstica, que fue aceptado incluso por sectores sindicales y docentes m¨¢s beligerantes con el tema ling¨¹¨ªstico tanto a favor de la unidad del catal¨¢n y el valenciano, como por los sindicatos estudiantiles opuestos a esta interpretaci¨®n cient¨ªfica.
Garant¨ªas a la investigaci¨®n
Definir el modelo de universidad -sin tener claro antes el marco legal estatal, porque a¨²n no est¨¢n establecidas las competencias en materia de acreditaci¨®n y evaluaci¨®n de los profesores e investigadores por parte del Minsiterio de Educaci¨®n- es una tarea ardua. M¨¢xime cuando las universidades pierden la autonom¨ªa para implantar titulaciones y centros, a expensas de un Cat¨¢logo de Titulaciones.
Con todo la Universitat de Val¨¨ncia, con una potente estructura de personal, ha aprobado un proyecto de reforma estatutario que -seg¨²n CCOO, el ¨²nico sindicato que present¨® enmiendas en esta materia- "consolida" los principios de negociaci¨®n colectiva de las nuevas figuras de contrataci¨®n docente creadas por la LOU y garantiza la carrera investigadora, aunque haya tenido dejar abierto el porcentaje de horas lectivas, por ejemplo, que tendr¨¢ que dedicar el profesorado ayudante doctor, a petici¨®n de los representantes de este colectivo, que alegaron las contradicciones en la agencia nacional de acreditaci¨®n ANECA y la valenciana a la hora de baremar y puntuar el n¨²mero de horas docentes.
La Universitat ha optado por "matices propios", no ya para medir el grado el nivel de conocimiento del ¨¢rea por el aspirante a una plaza (ya que corresponde a la ANECA) sino para valorar la adecuaci¨®n a las necesidades espec¨ªficas de cada plaza, para lo cual por ejemplo si la demanda lo requiere primar¨¢ el conocimiento del valenciano, en el caso de dos aspirantes con la misma puntuaci¨®n.
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