Estados Unidos crea una oficina para poner orden en los contratos de Irak

En respuesta a las cr¨ªticas de "caos y falta de transparencia" en la concesi¨®n de contratos para la reconstrucci¨®n en Irak, Estados Unidos va a abrir una oficina en Bagdad que "centralice y racionalice" el proceso, se?alan fuentes del Pent¨¢gono. La Oficina de Gesti¨®n de Proyectos s¨®lo tendr¨¢ autoridad para controlar y auditar las obras financiadas con dinero estadounidense y con el derivado del petr¨®leo iraqu¨ª a trav¨¦s del Fondo para el Desarrollo, pero tambi¨¦n coordinar¨¢ con Naciones Unidas y el Banco Mundial las contratas que ¨¦stos otorguen para evitar que se dupliquen los trabajos.

Los dos fondos gestionados por EE UU podr¨ªan ascender a lo largo del pr¨®ximo a?o a 35.000 millones de d¨®lares, que incluyen los 20.000 presupuestados por Washington m¨¢s los cerca de 15.000 que calculan de las exportaciones de petr¨®leo. El fondo gestionado por el Banco Mundial y la ONU nace con una peque?a parte los 13.000 millones recaudados en la Conferencia de Donantes de Madrid celebrada la semana pasada.

La nueva oficina en Bagdad obedece tambi¨¦n a una reorganizaci¨®n dentro del Gobierno de EE UU en la que el Pent¨¢gono ha salido ganando poder frente al Departamento de Estado. La Oficina de Gesti¨®n de Proyectos (PMO, por sus siglas en ingl¨¦s) estar¨¢ formada por militares especializados en resoluci¨®n de licitaciones de obras y auditores del Departamento de Defensa. Sin embargo, la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID) del Departamento de Estado, que hasta ahora hab¨ªa decidido la mayor¨ªa de los contratos de infraestructura no petrolera, tendr¨¢ un papel secundario. USAID aspiraba a administrar contratos por importe de 12.000 millones de d¨®lares, pero en principio s¨®lo repartir¨¢ 1.500 millones.

Estados Unidos espera poner la oficina en marcha el mes pr¨®ximo o, a m¨¢s tardar, antes de fines de a?o. La va a dirigir el almirante retirado David Nash y depender¨¢ del administrador norteamericano en Irak, Paul Bremer. Contar¨¢ en principio con una docena de auditores y unos 110 funcionarios de Defensa. La PMO tendr¨¢ tres sedes geogr¨¢ficas: en el norte, sur y centro de Irak.

El objetivo es "saber cu¨¢nto gastamos, c¨®mo y qu¨¦ hace cada qui¨¦n. Es la ¨²nica forma de exigir responsabilidades", explica a EL PA?S un funcionario del Pent¨¢gono, aclarando que no van a entrometerse en las decisiones de los concursos que resuelvan el Banco Mundial y la ONU. "L¨®gicamente, mantendremos un nivel de coordinaci¨®n". La PMO del Pent¨¢gono crear¨¢ primero una lista de prioridades y establecer¨¢ un procedimiento para los concursos de obras. Tambi¨¦n discuten la posibilidad de crear otra lista con los contratistas que incumplan.

La primera fase del proceso de adjudicaci¨®n de contratos ha sido criticada por su opacidad, particularmente a ra¨ªz de que el Pent¨¢gono le concediera en secreto las obras petroleras a la empresa que dirigi¨® el vicepresidente Dick Cheney hasta asumir el cargo, Halliburton. Las quejas forzaron el pasado agosto la reapertura del concurso, pero Halliburton ya ha ganado m¨¢s de 1.400 millones de d¨®lares en la posguerra iraqu¨ª.