Javier Tusell reconstruye los vaivenes de la borrascosa etapa de Arias Navarro

Contra la idea generalizada de que se ha dicho todo y se sabe todo sobre la transici¨®n pol¨ªtica espa?ola, Javier Tusell y Genoveva G. Queipo de Llano publican Tiempo de incertidumbre (Cr¨ªtica). Un libro que reconstruye los vaivenes pol¨ªticos del ¨²ltimo jefe del Gobierno franquista, Carlos Arias Navarro. Gracias al archivo privado del propio Arias y de muchos de sus ministros, Tusell aporta documentaci¨®n in¨¦dita sobre una era todav¨ªa opaca y "borrascosa". "Sobre la transici¨®n hay muchos mitos. El m¨¢s perfecto es pensar que fue f¨¢cil y sali¨® bien", se?al¨® Tusell.

"Hay una evocaci¨®n de la Espa?a de aquellos a?os, desde series como Cu¨¦ntame a la pel¨ªcula de Albert Boadella", afirm¨® ayer Javier Tusell (Barcelona, 1945). "Parece claro que necesitamos la memoria, pero tambi¨¦n necesitamos la ciencia: la historia". "A estas alturas no se pueden escribir libros triviales que vuelvan al mismo sitio. La ¨¦tica del historiador empieza ah¨ª".

Tiempo de incertidumbre aporta, seg¨²n explicaron ayer sus autores, informaci¨®n in¨¦dita sobre el mandato de Carlos Arias Navarro, designado jefe del Gobierno por Franco en diciembre de 1973 y mantenido en el cargo por el Rey hasta su cese en julio de 1976. Gracias a testimonios y archivos, p¨²blicos y privados, Tusell y Genoveva G. Queipo de Llano (que describen a un Arias Navarro sin personalidad, dubitativo en todas sus decisiones pero a la vez con un car¨¢cter "encendido y algo volc¨¢nico", un Arias Navarro que entre sus papeles personales guardaba las p¨¢ginas de Hola dedicadas al funeral de Carmen Polo) narran sucesos hasta ahora desconocidos como los planes pol¨ªticos del Rey antes de ser asesinado Carrero Blanco; los motivos de la ejecuci¨®n con garrote vil de Salvador Puig de Antich; las tensiones entre el Gobierno y la Iglesia con motivo del incidente con el obispo de Bilbao Antonio A?overos; las denuncias de los ultras ante Franco por el rumbo de una pol¨ªtica aperturista; el choque entre Arias Navarro y don Juan Carlos en el que el primero le reprocha haberle hecho lo que ¨¦l llama "una borbonada", o la primera conspiraci¨®n militar, precursora del 23-F de 1981 e iniciada en marzo de 1976.

Tiempo de incertidumbre fue presentado ayer por Javier Pradera y Fernando Su¨¢rez. Una conferencia de prensa cuyo debate se anim¨® y prolong¨® durante m¨¢s de dos horas. "La historia del restablecimiento de la democracia en Espa?a seguir¨¢ abierta mientras sigan viviendo protagonistas y espectadores de la transici¨®n, y mientras sigan existiendo investigadores dispuestos a rastrear archivos y testimonios", se?al¨® Pradera.

Frente a ¨¦l, uno de esos protagonistas de esa historia y una de las fuentes fundamentales del libro de Tusell, el que fuera ministro Fernando Su¨¢rez.

Su¨¢rez quiso apuntar algunos "defectillos" que hab¨ªa encontrado en una primera lectura, "y pretendo leerlo varias veces m¨¢s", dijo. "?ste es un libro excelente, y acepto la parte cr¨ªtica que nos toca, porque es verdad que fue una ¨¦poca de errores may¨²sculos, de vacilaciones, de pasos adelante y atr¨¢s, pero, eso s¨ª, no quiero dejar pasar ciertas inexactitudes, y matices, y tambi¨¦n ciertas opiniones de las que discrepo". Fernando Su¨¢rez apunt¨® que la democracia era algo aceptado por Arias Navarro "y todos nosotros". "Tampoco es verdad", a?adi¨®, "que Arias Navarro pretendiera que los funerales de Franco se celebraran con los 84 obispos espa?oles. Todo estaba en la 'Operaci¨®n Lucero', y tanto yo como el resto de mis compa?eros podemos confirmarlo". "Hay un comentario que supuestamente le hizo Franco a Eduardo Navarro [secretario general t¨¦cnico del Movimiento] sobre la manera de vestir de sus nietas que me parece una frivolidad y una locura. Sencillamente, no me creo que Franco le dijera a Eduardo Navarro nada sobre si le gustaba o no la manera de vestir de sus nietas". Fernando Su¨¢rez (que tambi¨¦n corrigi¨® a Tusell sobre la autor¨ªa de "la versi¨®n pop del Cara al sol") finalmente admiti¨® que frente al trabajo de los historiadores est¨¢ "el que todos escribimos y contamos s¨®lo lo que queremos que se sepa".