Concesiones al protocolo
La presencia de Zaplana y la ausencia de Olivas recortan el papel de Camps en la 'noche de la econom¨ªa valenciana'
Eduardo Zaplana y Rita Barber¨¢ recibieron a Francisco Camps el viernes por la noche a las puertas de la Feria de Valencia. El ministro de Trabajo y portavoz del Gobierno, la alcaldesa de Valencia y el presidente de la Generalitat hab¨ªan acordado el orden de llegada, una concesi¨®n al protocolo que el devenir de la noche de la econom¨ªa valenciana sorte¨® en varias direcciones. Arturo Virosque, presidente de la C¨¢mara de Comercio de Valencia y anfitri¨®n de la fiesta, insisti¨® en conceder al ministro de Trabajo una presencia adecuada a la estima que le profesa.
Una presencia tan notable como la ausencia de Jos¨¦ Luis Olivas, sucesor de Zaplana al frente de la Generalitat y presidente de Bancaixa in p¨¦ctore, quien prefiri¨® eludir la noche de la econom¨ªa para evitar un gesto inc¨®modo hacia Julio de Miguel, todav¨ªa presidente de la caja valenciana y protagonista del evento en su calidad de patrocinador.
El viernes no hizo falta distinguir al ministro de Trabajo, tom¨® la palabra por alusiones
Los premiados que subieron a la mesa presidencial a recoger sus galardones desfilaron, uno a uno, por delante de Alberto Catal¨¢, presidente de la Feria de Valencia; Rafael Ferrando, presidente de la patronal; Juan Cotino, delegado del Gobierno; Eduardo Zaplana, ministro de Trabajo; Francisco Camps, presidente de la Generalitat; Julio de Espa?a, presidente de las Cortes; Rita Barber¨¢, alcaldesa de Valencia; y Julio de Miguel, presidente de Bancaixa.
Jos¨¦ Manuel Machado y Francisco Murcia, como portavoces de Ford Espa?a y Grupo Nisa, leyeron dos breves discursos de agradecimiento en nombre de los premiados.
A medianoche, Virosque tom¨® la palabra. Agradeci¨® la cooperaci¨®n de los presidentes de la Feria y Bancaixa con un saludo expreso a Julio de Miguel, que permanec¨ªa sentado con gesto severo a un metro escaso metro de la tribuna de oradores.
Virosque desgran¨® con tono desigual las actividades desarrolladas por la c¨¢mara durante el a?o pasado pero carraspe¨®, bebi¨® y casi grit¨® cuando, en el momento culminante de su intervenci¨®n, solicit¨® al ministro de Trabajo una rebaja de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social. Despu¨¦s de soltar la fresca, lleg¨® a esbozar una sonrisa traviesa.
El presidente de la Generalitat s¨®lo fue mencionado de refil¨®n en el discurso del anfitri¨®n. Y para agradecerle que mantenga el rumbo trazado por sus predecesores.
Francisco Grau, mantenedor del acto, anunci¨® a continuaci¨®n la intervenci¨®n del ministro de Trabajo. Zaplana, que ya era ministro en noviembre pasado, fue galardonado en la ¨²ltima edici¨®n de la noche de la econom¨ªa para que disfrutara de la oportunidad de dirigirse a los empresarios asistentes. El viernes por la noche ya no hizo falta distinguirle, tom¨® la palabra por alusiones. Y dej¨® patente su autoridad con una soltura que s¨®lo emana de la cartera ministerial.
El discurso del presidente de la Generalitat cerr¨® la fiesta. Fue la segunda concesi¨®n al protocolo. Camps, siempre correcto, apenas pudo invitar a los empresarios a suplir con imaginaci¨®n la escasez de recursos p¨²blicos para financiar sus negocios.
Reformas y reformas
Arturo Virosque, anfitri¨®n de la noche de la econom¨ªa, lleg¨® a invocar las "excelentes relaciones que tenemos ahora con Estados Unidos" como una oportunidad de negocio y un est¨ªmulo para incorporar h¨¢bitos de flexibilidad laboral y fiscal. Pero Eduardo Zaplana, ministro de Trabajo, aludi¨® al car¨¢cter progresivo de las reformas econ¨®micas que introduce el Gobierno central y cort¨® de ra¨ªz la tentaci¨®n ultraliberal con una propuesta proteccionista. El ministro apunt¨® un inminente "paquete de medidas" para proteger al sector textil de los efectos de la liberalizaci¨®n comercial que afrontar¨¢ a partir de enero de 2005, con la plena incorporaci¨®n de China a la Organizaci¨®n Mundial de Comercio.
Zaplana record¨® el tenso ambiente que presidi¨® la ¨²ltima edici¨®n de la noche de la econom¨ªa, cuando Jos¨¦ Luis Olivas invitaba a los empresarios a sumarse a un acto p¨²blico en defensa del plan hidrol¨®gico como preludio de la campa?a para las ¨²ltimas elecciones auton¨®micas. Contrapuso ese ambiente a la confianza que se respira ahora entre la clase empresarial. Y cedi¨® a Francisco Camps la oportunidad de asentar los puntos fuertes de la situaci¨®n econ¨®mica regional.
El presidente de la Generalitat, por su parte, cerr¨® filas con la pol¨ªtica de "reformas y reformas" del Gobierno central; anunci¨® una "paulatina y progresiva" supresi¨®n del impuesto auton¨®mico sobre sucesiones; y asumi¨® que la econom¨ªa valenciana "est¨¢ en las mejores condiciones de su historia". Pero apenas ofreci¨® "nuevas f¨®rmulas de financiaci¨®n que tenemos que encontrar" como aportaci¨®n institucional a un futuro despegue econ¨®mico.
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