Ribot gana el Nacional de Historia con un libro sobre el poder espa?ol en Sicilia

Luis Ribot ha ganado el Premio Nacional de Historia con la que puede considerarse la obra de su vida. Y no es que falten otros m¨¦ritos en su biograf¨ªa, como docente, como investigador y como gestor cultural. El autor galardonado es desde 1987 catedr¨¢tico de Historia Moderna de la Universidad de Valladolid, donde adem¨¢s ha desempe?ado la direcci¨®n del Secretariado de Publicaciones e Intercambio Cient¨ªfico, del Instituto Universitario de Historia Simancas y de la C¨¢tedra Felipe II, a cuyo frente sigue figurando. Del mismo modo, ha tenido la oportunidad de colaborar con Luis Miguel Enciso en empresas culturales tales como la Sociedad P¨²blica para la Conmemoraci¨®n del V Centenario del Tratado de Tordesillas o el Pabell¨®n de Espa?a en la Exposici¨®n de Lisboa de 1998. Finalmente, ha sido comisario de la gran exposici¨®n hist¨®rica sobre Felipe II, un monarca y su ¨¦poca: las tierras y los hombres del rey, que tuvo por escenario la ciudad de Valladolid.

Como investigador, ha consagrado la mayor parte de sus esfuerzos al estudio de la Administraci¨®n espa?ola en la Sicilia del siglo XVII, aunque tambi¨¦n se ha preocupado por cuestiones relativas a la historia militar, como son el reclutamiento de las milicias castellanas, las diversas formaciones militares espa?olas en los tiempos modernos o el papel de las provincias italianas en la defensa de la Monarqu¨ªa. Entre sus trabajos sobre Sicilia destacan los dedicados a la Hacienda Real en aquella provincia en la segunda mitad del seiscientos, la public¨ªstica a favor y en contra del absolutismo mon¨¢rquico y, finalmente, las revueltas antiespa?olas del siglo XVII. Sobre la revuelta de 1647-1648 escribi¨® tanto acerca de los antecedentes (La ¨¦poca del Conde Duque de Olivares y el reino de Sicilia) como acerca del desencadenamiento de los hechos revolucionarios (en el volumen colectivo 1640: la Monarqu¨ªa Hisp¨¢nica en crisis). La revuelta de Mesina de 1674 ya fue objeto de una primera monograf¨ªa, que exploraba sus causas y sus antecedentes, antes de llegar a este libro de madurez, donde atiende adem¨¢s a su completo desarrollo dentro del cuadro general de la situaci¨®n de la Monarqu¨ªa espa?ola durante el reinado de Carlos II. Reinado que conoce perfectamente como demuestra la excelente s¨ªntesis que publicara en el marco de la Historia de Espa?a dirigida originalmente por Ram¨®n Men¨¦ndez Pidal.

La Monarqu¨ªa de Espa?a y la guerra de Mesina

(1674-1678), obra que fuera prologada por Antonio Dom¨ªnguez Ortiz -fue uno de sus ¨²ltimos escritos-, se ocupa, por tanto, de la sublevaci¨®n de la ciudad siciliana, que se convirti¨® en una guerra s¨®lo cuando Luis XIV de Francia decidi¨® ofrecer su apoyo militar a los rebeldes para as¨ª debilitar a Espa?a, uno de los integrantes de la coalici¨®n que se enfrentaba al Rey Sol en la llamada guerra de Holanda. El autor demuestra que la guerra no tuvo a la postre ni vencedores ni vencidos, sino que termin¨® cuando los estrategas se desentendieron de un frente que pas¨® a ser completamente secundario en el tablero europeo. Y concluye resaltando la resistencia de la Monarqu¨ªa Hisp¨¢nica, una potencia decadente pero todav¨ªa capaz de movilizar sus efectivos y tambi¨¦n sus lealtades para mantener sus posiciones en Europa. Por ¨²ltimo, decir que el galard¨®n concedido al libro supone ante todo un justo reconocimiento a sus indudables virtudes, pero que puede juzgarse asimismo como un tributo a la plenitud alcanzada por la generaci¨®n de historiadores modernistas que Luis Ribot tan bien representa.