Montoro defendi¨® en el Congreso el gravamen sobre las viviendas vac¨ªas

El Gobierno, a trav¨¦s del ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro, y el Partido Popular, a trav¨¦s de sus portavoces parlamentarios en el Congreso y el Senado, defendieron la aplicaci¨®n de un gravamen en el impuesto de bienes inmuebles (IBI) para las viviendas desocupadas, en octubre, noviembre y diciembre del a?o pasado, durante la tramitaci¨®n de la nueva Ley de Haciendas Locales.

Montoro defendi¨® el 30 de octubre que el proyecto de Ley de Haciendas Locales permit¨ªa "mejorar la autonom¨ªa y suficiencia financiera de las corporaciones locales y elevar la solidaridad del sistema". Para ello, Montoro defend¨ªa una "reforma del impuesto de bienes inmuebles que permite a los municipios gravar las viviendas permanentemente desocupadas con un tipo superior al de las viviendas habituales o segundas viviendas". "Se pretende as¨ª", argument¨® entonces Montoro, "fomentar el mercado de viviendas en alquiler, al igual que planteamos en el impuesto sobre la renta de las personas f¨ªsicas".

Eso que Montoro ve¨ªa tan razonable el 31 de octubre de 2002 es ahora rechazado por Mariano Rajoy, secretario general del PP y candidato a presidente del Gobierno, que pidi¨® el pasado fin de semana al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, que retirase ese gravamen sobre las viviendas vac¨ªas de las ordenanzas madrile?as.

Durante los dos meses de tramitaci¨®n de la Ley de Haciendas Locales, el PP no se arrepinti¨® del art¨ªculo que establec¨ªa el gravamen especial para las viviendas desocupadas. As¨ª, su portavoz en la comisi¨®n de Hacienda, Jordi de Juan i Casadevall, defendi¨® el impuesto: "El nuevo proyecto de ley hace un notable esfuerzo por la modernizaci¨®n de nuestro sistema tributario local, ampliando la capacidad normativa de las haciendas locales, penalizando fiscalmente las viviendas desocupadas mediante el IBI".

Malos y buenos

En aquellos debates, Jos¨¦ Antonio Labordeta, diputado de la Chunta Aragonesista, augur¨® un futuro complicado a la ley: "Se?or ministro, ustedes rebajan los impuestos, y los ayuntamientos y las comunidades aut¨®nomas van a tener que subirlos para sobrevivir. Ellos van a ser los malos y ustedes, los buenos. Al final, va a haber un enfrentamiento entre ustedes y los ayuntamientos y comunidades aut¨®nomas".

El impuesto que grava las viviendas desocupados no se puede aplicar, aunque algunas ciudades, entre ellas Barcelona y Sevilla, lo han incorporado a sus ordenanzas fiscales.

Para que pueda ser recaudado por los ayuntamientos, el ministerio de Hacienda debe precisar a trav¨¦s de un reglamento las caracter¨ªsticas que debe reunir una vivienda (consumos de agua, luz...) para ser considerada vac¨ªa y, por tanto, estar sujeta a una declaraci¨®n especial que permita imponerle un grav¨¢men sobre el Impuesto de Bienes Inmuebles. Hacienda ha se?alado que la complejidad de dicho reglamento impide que se apruebe en esta legislatura.