La 'poes¨ªa necesaria' camina hacia la generaci¨®n del entendimiento y el di¨¢logo

Se acabaron los d¨ªas de las peleas por un qu¨ªtame all¨¢ esos versos. Persisten tendencias, dos muy claras y eternas, entre los buscadores de lo ¨ªntimo y los denunciadores de lo social, entre la poes¨ªa de la experiencia y la del silencio, entre la l¨®gica y el sue?o de Orfeo, pero ya conviven en paz. As¨ª lo certificaron ayer en el Congreso Internacional de la Lengua en Valladolid poetas como Luis Antonio de Villena, Luis Alberto de Cuenca, Francisco D¨ªaz de Castro, ?ngeles Mora y Vicente Gallego en el ¨²ltimo coloquio de esta reuni¨®n titulada Poes¨ªa necesaria: "Las dos grandes tendencias actuales en Espa?a caminan juntas y se influyen", dijo Villena. Ha surgido la generaci¨®n del entendimiento.

Desde los tiempos de Quevedo y G¨®ngora, los poetas de est¨¦ticas rivales han luchado desde tribus encontradas. Pero eso se acab¨®. Los poetas de la ¨²ltima generaci¨®n se entienden, se respetan, se admiran, dialogan e intentan ponerse en la piel del que aparentemente sigue el camino contrario. De ah¨ª que la ¨²ltima antolog¨ªa que ha hecho Luis Antonio de Villena se titule La l¨®gica de Orfeo (Visor), un enunciado que suma: "Las tendencias perviven en los j¨®venes. Hasta que un poeta no cumple los cuarenta a?os, por lo general, busca su propio camino, su propia voz y se adscribe a un grupo. Cuando lo encuentra ya no se preocupa tanto de indagar en uno u otro, sigue el suyo propio y ¨¦ste es un camino sin fin, que simplemente hay que patear". "Un poeta bueno, hoy, conoce todas las vanguardias, las ha explorado y eso le proporciona comprensi¨®n y no desecha nada en principio", explica De Villena. Todos se congratulan de ello.

El congreso de Valladolid ha sido un ejemplo de tendencias que conviven, los de la experiencia con los de la introspecci¨®n, los nov¨ªsimos con los del nuevo clasicismo. Francisco D¨ªaz de Castro incluso cree que hay casos de poetas de una corriente que hoy, en la madurez, exploran la otra. "Es el ejemplo de Carlos Marzal o Luis Garc¨ªa Montero, que ya cuentan con el ¨¦xito pero contin¨²an con una b¨²squeda de otros caminos", asegur¨®. De Cuenca aplaudi¨® la pluralidad y el eclecticismo: "Hay un momento muy bueno de calidad en la poes¨ªa espa?ola actual que viene de ese di¨¢logo que ya est¨¢ fuera del dogma. La ausencia de sectarismo es muy saludable", asegur¨® el secretario de Estado de Cultura.

Singularidad

Vicente Gallego y ?ngeles Mora defendieron la singularidad como el secreto de la pluralidad: "A m¨ª me gusta hablar de poetas y de poemas, del lector y del libro", dijo Gallego. Mora tambi¨¦n se introdujo en el escondrijo de la soledad, de lo ajeno. "Las mujeres hemos sido a menudo despreciadas y eso nos hace sentirnos m¨¢s solas. Para combatirlo a m¨ª me ha servido mucho la iron¨ªa", confes¨®.

Se celebraron las lecturas magn¨ªficas de los veteranos Clara Jan¨¦s y Pablo Garc¨ªa Baena, de la joven Luisa Castro, que ley¨® en gallego cristalino y musical, o los desgarros de Antonio Gamoneda, tan hondos, tan dolientes.

Fue una jornada de celebraci¨®n de la po¨¦tica grande, en la que tambi¨¦n hubo premio y magisterio. El premio del marat¨®n de poes¨ªa lo gan¨® Mercedes Garc¨ªa Rega y se lo entreg¨® ?ngel Gonz¨¢lez.