Y Fonseca se encontr¨® con sus j¨®venes lectores
El brasile?o flaco Fonseca es tambi¨¦n un hombre menudo ("yo tambi¨¦n quer¨ªa ser alto y bonito", dijo contestando a alguna pregunta), pero nadie se perdi¨® ni uno solo de sus gestos cuando iba de un lado a otro del Auditorio Juan Rulfo, micr¨®fono en mano, haciendo lo posible para que su portu?ol fuera inteligible y que lo entendieran cuantos fueron a escucharlo, j¨®venes sobre todo. Lo fue, y tanto. Habl¨® de literatura, y empez¨® siendo muy did¨¢ctico.
?Qu¨¦ hace falta para convertirse en escritor? Cuatro cosas, dijo. Y las fue explicando. Primero, "saber leer", y entender y comprender lo que se lee. Segundo, ser una persona atenta, estar motivado. La tercera condici¨®n es la paciencia, acumular mucha paciencia (se refiri¨® a los diez a?os que tard¨® Rulfo en escribir Pedro P¨¢ramo), y la cuarta, imaginaci¨®n. "Hay todav¨ªa otra cosa que se necesita para escribir: el coraje, el valor, la valent¨ªa. Para decir aquello que no puede ser dicho. Para decir lo que ninguno quiere o¨ªr". Luego empez¨® la ronda de preguntas.
?Qu¨¦ lee Fonseca, qui¨¦nes son sus escritores preferidos? "Soy un lector compulsivo. Leo de todo, y lo que m¨¢s me gusta es la poes¨ªa". ?Qu¨¦ significa que un escritor tenga que ser subversivo? "No tener que aceptar ninguna convenci¨®n, ni art¨ªstica, ni ideol¨®gica, ni moral. Hay que romper con todas las convenciones. En Secreciones, excreciones y desatinos, por ejemplo, he llegado a escribir un libro asqueroso". ?Por qu¨¦ escribi¨® cuentos y novelas si lo que le gustaba era la poes¨ªa? "Escrib¨ª prosa porque no sab¨ªa escribir poes¨ªa".
Iba de un lado a otro, miraba muy de cerca a quienes le preguntaban, les colocaba la mano en sus respectivos hombros, muy atento a cada cuesti¨®n. Luego contestaba de forma fulminante. "Me identifico mucho con la frase 'soy un hombre consumido por el presente', que cuelga al lado de su imagen en los pasillos de la feria", le dijo una joven lectora, y le pregunt¨® por el sentido de la frase. "?Soy un hombre consumido por el presente?", se pregunt¨® Fonseca. "No lo s¨¦", se contest¨® de inmediato.
?Qu¨¦ es lo que m¨¢s le conmueve, lo m¨¢s deslumbrante?, quiso saber otra lectora. "Caramba", dio dos vueltas, call¨® un rato, "lo m¨¢s deslumbrante es la belleza". Los j¨®venes hicieron "uh, uh, uh", hubo risas. Fonseca: "La belleza es una alegr¨ªa para siempre".
?Cu¨¢les son las caracter¨ªsticas de un buen cuento? "Lea a Rubem Fonseca", dijo Rubem Fonseca. ?C¨®mo es que tard¨® tanto en publicar su primer libro (lo hizo a los 38 a?os)? "Termin¨¦ mi primera novela a los 18 a?os. Fui a un editor y se la entregu¨¦. Vuelva dentro de dos meses. Volv¨ª. Pidi¨® a su secretaria que buscaran mi manuscrito. No lo encontraron. '?A qu¨¦ autores lee usted?', me pregunt¨®. Ch¨¦jov, Maupassant..., contest¨¦. La literatura es una cosa noble, no se pueden decir tantas porquer¨ªas, sentenci¨®. As¨ª que me pas¨¦ veinte a?os leyendo. La ¨²nica manera de aprender a escribir es leyendo y leyendo y leyendo".
"No me gusta la imagen de la literatura como algo m¨¢gico y sacrosanto", dijo m¨¢s adelante. "Escribir se parece m¨¢s bien al trabajo de un carpintero que se esfuerza para que la silla que est¨¢ haciendo le salga lo mejor que pueda". Otra joven lectora: "Se me hace como que a sus cuentos les falta algo...". "Lo mejor de la literatura es que puede tener muchos significados. Cada cual lee el mismo libro de manera distinta, porque al leerlo cada uno lo reescribe".
"No, no s¨®lo sirve el coraz¨®n para ponerse a escribir. Hace falta tambi¨¦n inteligencia y lucidez, saber lo que est¨¢s haciendo", le contest¨® a otro lector. Luego le pregunt¨® Elena Poniatowska, que se col¨® en la reuni¨®n como una joven lectora m¨¢s, le record¨® aquella frase de Eliot, la que dice que el hombre no soporta demasiado la realidad. "Yo la soporto", le dijo Fonseca despu¨¦s de abrazarla, "no temo la realidad. Tenemos que enfrentarnos a las injusticias, procurando vencer lo que est¨¢ ah¨ª". Luego Fonseca coment¨® que se pod¨ªa cerrar el acto, en ese momento en que parec¨ªa ir bien. "Si no, luego nos aburrimos". Pidi¨® al p¨²blico que le dijera que s¨ª. Y el p¨²blico le dijo s¨ª. Y se acab¨®.
Babelia
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